El plan piloto de la Generalitat sobre la Renta Básica Universal hará llegar la prestación a unos 5.000 ciudadanos del país entre 2022 y 2024. Así lo ha explicado la consejera de Presidencia, Laura Vilagrà, durante un acto celebrado al Palau de la Generalitat presidido por el cabo de la Oficina del Plan Piloto para Implementar la RBU, Sergi Raventós.
La prueba piloto, que se implementaría el diciembre de 2022, constaría de una prestación mensual de 900 euros de la que se analizaría "el impacto individual y colectivo". Según la consejera, el Gobierno pretende "diseñar bien la prueba piloto", que será "una de las más grandes del mundo" teniendo en cuenta muestra y duración.
Según la consejera, el objetivo de la prueba es "analizar el impacto que té cobrar una prestación en aspectos cómo el bienestar emocional o físico o la relación con el mundo laboral. La Generalitat querría comparar, así, los resultados con el impacto del sistema actual de prestaciones, a menudo marcado por "demasiada burocracia" y que genera "externalidades negativas".
Por su parte, el cabo de la Oficina, Sergi Raventós, ha considerado que la estructura sociodemográfica de ha Catalunya cambiado mucho en los últimos años, algo que hace necesaria la RBU para "garantizar la existencia material del conjunto de la ciudadanía". El experto ha apuntado, además, que el proyecto se implementará en municipios o barrios enteros para "replicar al máximo la homogeneidad de la sociedad y el territorio" – que el experimento incluya personas con todo tipo de circunstancias sociales y económicas.