Corea, una oportunidad entre dos gigantes

La agroalimentaria, la cosmética y la moda, opciones para las empresas catalanas

A la decimoquinta economía del mundo, hay mucho para aprender pero también mucho que hacer-. Corea del Sur es uno de los países que más ha apostado por la innovación, más flexible es en contextos de crisis y mejor ha sabido encontrar la veta de los países emergentes. Pero este país pequeño entre los gigantes chino y japonés también sobresale como un campo de oportunidades para las empresas catalanas.

Marcar la diferencia
En Corea del Sur se puede encontrar el éxito apostando por buen precio o por la diferenciación. Para el director del centro de promoción de negocios ACC1Ó en Seúl, Josep Maria Coll, no hay duda: "Recomiendo competir en diferenciación". Entre las posibilidades para las empresas catalanas, hay la agroalimentaria y el turismo. Corea exporta casi el 70% de los productos alimentarios, tiene un paladar con una marcada "atracción por los gustos occidentales" y el poder adquisitivo de los ciudadanos está en alza.

También hay mercado vinculado en las ciudades inteligentes, la cosmética y la moda . Las posibilidades se abren por quienes vende energías renovables y gestión de residuos; quién produce cosméticos de lujo y componentes químicos por las empresas locales; y por quien hace ropa para público joven o de lujo, ya sea aterrizando a través de tiendas multimarca o propias.

Más abierta que China
Este país de 49 millones de habitantes da opciones a las compañías catalanas. Es el único de la zona con acuerdo de libre comercio con la Unión Europea. Además, tiene una sociedad muy homogénea, donde se puede perfilar "una estrategia de mercado con más garantías de éxito", y la suya demasiado salarial es "de gran calidad y con cultura del esfuerzo", en palabras del profesor Jaume Giné, que es secretario general de Casa Asia. "Son más fáciles en su relación comercial y personal que los chinos y japoneses", asegura el experto.

Dificultades
Pero la cuarta economía de Asia no es siempre una alfombra roja por los catalanes y la prueba son nombres como Samsung y LG. En un encuentro con el mundo de la empresa en Barcelona, el profesor Giné advertía que Corea del Sur cuenta con "empresas extraordinariamente competitivas y, además, son grandes conglomerados que fabrican de todo". Y no hay que olvidar que es una líder tecnológica nata, una potencia de la economía del conocimiento y que conseguir regulaciones puede ser "lento y largo".

Pero que la vecina Corea del Norte haya sacado pecho en las últimas semanas preocupa los posibles inversores catalanes. "Las tensiones han aumentado, sobre todo en retórica, pero la realidad es de tranquilidad y dinamismo", saca hierro el responsable de la oficina comercial de la Generalitat a la zona.

Y es que las cifras recogidas al observatorio mundial de la CIA hablan por sí suelas: cuarta economía de Asia, octavo exportador mundial y la mitad de los casi 50 millones de habitantes concentrados en una área metropolitana. "Es el Alemania asiática", asegura Pedro de Antonio Ferrer, director internacional de Europa, Asia y África de la catalana Ferrer, presente al país desde el 1995.

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