Cuando los desfiles son lo menos importante

Las actividades paral·les al 080 Barcelona Fashion, como el Investor Day donde participan empresas emergentes del sector, son un impulso al ecosistema de la moda

"El que hay alrededor de los desfiles es lo más importante del 080 Barcelona". Lo asegura Enric Jové, CEO de McCann Worldgroup Barcelona y miembro del jurado en el 080 Barcelona Fashion Investor Day que se ha celebrado este jueves por la mañana. La pasarela y la red de inversores Seed&Click han organizado por segunda vez una competición de startups del sector de la moda con un premio valorado en 100.000 euros. Un concurso que han acabado ganando las inglesas Smartzer y Bookalook .

"Por una marca ser a la pasarela implica visibilidad y fotografías a los medios; pero para el ecosistema empresarial de Barcelona y Cataluña lo más importante es el que hay alrededor", insiste Jové. A su entender, "sólo generas núcleo de una industria si más allá de los desfiles hay un ecosistema de empresas y empresarios que lo vertebran. Porque no se acabe convirtiendo en una pasarela más, esto es básico".

Cómo en todos los concursos, no ha faltado lo entrega de premios. Sheekr.

Al fin y al cabo, añade Enric Jové, "tener una pasarela no implica tener éxito. Hay muchas y competimos en el país donde hay de más importantes. De salida, el partido de la visibilidad lo tenemos perdido". Por lo tanto, valora positivamente el hecho de aportar cosas nuevas como el concurso de startups. "Se tiene que ir vertebrando alrededor del 080, que las empresas grandes del sector con sede aquí crean. Así podremos hacer un modelo de pasarela diferente de las otras, que tienen más prestigio, dinero o antigüedad", resume.

En la misma línea se expresa Xavier Martí, socio fundador de Sheekr , uno de los proyectes participantes del Investor Day. "Por el mundo de la innovación las políticas de conectar actores son muy importantes", asegura. "Que el 080 esté conectado con el tejido industrial, ya sea startup u otros tipos, que hay alrededor, es fundamental", insiste.



En este acontecimiento también ha participado Costalamel, la marca fundada por Ernest Costafreda, que valora positivamente oportunidades como estas en un entorno donde "los desfiles no están organizadas para potenciar las marcas pequeñas, sino más bien para potenciar las grandes". A pesar de destacar la cordialidad que ha existido siempre entre su marca y el 080, Costafreda se muestra un punto crítico. "No creo mucho en la parafernàlia de las semanas de la moda que acaban promocionando las grandes marcas mientras la gente que hace cosas independientes queda un poco al margen".

Costalamel hace moda urbana inspirada "de Barcelona en el mundo". Cedida

Oportunidades digitales
Costalamel hace "ropa de calle" y funciona desde hace dos años y medio. Actualmente está haciendo una ronda de inversión que irá destinada al marketing online. "Es donde nos movemos", evidencia a VÍA Emprendida su fundador y director creativo. "Hemos presentado el proyecto a varias plataformas de inversión y escuelas de negocios; y esta también nos pareció una buena plataforma para promocionarnos y que más inversores puedan conocer el proyecto", indica.

En cuanto a Sheekr, Xavier Martí explica que "somos una empresa de Big Fecha". Su producto principal es una app y un hardware que permite a los usuarios mejorar la experiencia del que ya están haciendo: hacerse fotos dentro de los probadores para enviarlo a sus contactos y que los den una opinión para decidir si lo compran o no.

"El principal objetivo es conseguir inversión. Que podamos demostrar que el mercado desea el que hagamos nosotros", dice Martí. El responsable de Sheekr destaca que "un concurso de estos no deja de ser una opinión de una parte del mercado". Con la perspectiva de lanzar bien pronto nuevas funcionalidades que no dependan tanto del hardware instalado en la tienda, como hasta ahora, Martí señala que "nuestra visibilidad a corto plazo tiene que ser hacia los inversores".

En cuanto al jurado, Enric Jové recuerda que básicamente se fijan en la idea del modelo de negocio. "Cuando valoras cualquier concurso de startups tienes que ver si la idea realmente es disruptiva y hace romper un mercado consiguiendo introducir nuevos modelos de negocio y cambiante aspectos clave de la cadena de valor", indica. "Cuando voces esto es que tiene posibilidades reales de tener éxito".

La importancia digital
Jové tiene claro que "en la digitalización de las empresas el mercado de la moda es el que ha permitido más compañías de éxito desde el principio". Lo ejemplifica con Privalia, que "por mucho que la veamos como un ecommerce, básicamente vende moda".

Jové asegura que este sector "es un mercado agradecido para la introducción de startups digitales". Y lo es porque "el consumidor ha roto las barreras del miedo con las que otros mercados, como el de la alimentación, no han podido". A pesar de que la lógica podría hacer creer que es más fácil vender online una caja de galletas que una camiseta, Jové insiste que "se ha demostrado que el mundo de la moda ha evolucionado más rápido y a través de plataformas de cocreació, diseño y colaboración hay mucho camino".

Sheekr es una de las compañías que quiere aprovechar el impacto digital en la moda, facilitando la típica consulta con los amigos mediante las fotos al probador. "Damos más funcionalidades, hasta el punto que lo pueden comprar desde la foto mirándola más tarde en casa suya", dice Martí. No se trata, pues, de un probador virtual, sino que la cámara que tiene la tienda afuera de los probadores, activada por el usuario desde el app, permite compartir con los amigos los diferentes looks y comprar más tarde desde la misma imagen el que haya tenido más éxito.

No sólo de desfiles vive el 080. Laia Corbella

"Es fruto de la convicción que la moda es imagen y la compra de ropa tiene un carácter social. Cuando compras roba estás pensando en otra gente y tiene una connotación social dentro del cerebro", reflexiona Xavier Martí. Por eso, desde Sheekr intentan encontrar una solución porque se canalice a través de una única funcionalidad ligada directamente con la compra.

También vive en el mundo digital Costalamel. Su fundador argumenta que la digitalización "ha hecho caer una barrera de entrada. Hace 15 años si hacías una marca, como te conocía la gente? Ahora puedes tener Instagram y Facebook, hacer fotos y vídeos de calidad para llegar". Ahora bien, Costafreda advierte que "si al único que te dedicas es a crear contenidos por redes sociales y no intentas conectar con el consumidor, quedándote con la parte superficial del que está de moda, como un reloj o unas ojeras de solo, creo que no tiene muy futuro".

Sea como fuere, "de aquí cinco años veremos qué marcas han sobrevivido al hype que hay ahora, que aparecen marcas de bajo las piedras. Y creo que serán pocas", vaticina.

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