
En el mundo de la tecnología y la innovación , parece que avanzamos a la velocidad de la luz. Pero hay sectores, como el de la energía, que va a paso de tortuga. Según un estudio de Siemens, sólo una de cada tres empresas en España está preparada por la digitalización y, el sector energético, es el menos preparado. Sólo un 38% de estas compañías tienen su proceso digitalizado. Sin embargo, la inversión de las energéticas en startups se ha triplicado en los últimos seis años, según un estudio de Everis publicado este viernes. El motivo? La necesidad de estas compañías de asociarse con empresas emergentes para avanzar en la transformación digital. Una realidad que plantea nuevas oportunidades y retos por el sector, que se han debatido en la conferencia Los desafíos digitales de la energía del siglo XXI, organizada por la Mobile World Capital de Barcelona.
La lentitud al adaptarse a los cambios es uno de los principales problemas del sector. "Nos hemos juntado dos mundos con dinámicas diferentes: el sector de las telecomunicaciones va corrientes y cambia mucho prisa y el energético va andando", señala el responsable del grupo Power Systems (IREC), José Luis Domínguez. Y la regulación es uno de los motivos principales de este ritmo pausat. "No es que nohaya una voluntad del consumidor y de las empresas, sino que somos un sector muy regulado", añade el CEO de Factorenergia, Emilio Rousaud. Aun así, según el CEO de Aiguasol, Oriol Gavaldà, el poder está en manso de los usuarios, puesto que si los consumidores se implican y empiezan a poner baterías domésticas a casa para almacenar energía, como las de Tesla que instalará Holaluz, "la regulación puede cambiar".
El prosumer energético: consumidor y productor a la vez
Hasta hace poco, el sector de la energía estaba en manso de pocas empresas que tenían un poder de oligopolio. Sin embargo, Rousaud ve el futuro de la energía muy diferente. "Nosotros dejaremos de ser una compañía proveedora de energía y pasaremos a ser una compañía proveedora de servicios, y esto debido a la digitalización". El CEO de Factorenergia cree que en unos años las personas tendremos en casa alguna tecnología de generación de energía, por el que seremos consumidores y productores a la vez.
Además, hasta ahora, nos encontrábamos con un problema de alfabetización energética de la población. Pero el cambio de mentalidad de la sociedad está haciendo que "unos clientes que hasta ahora no tenían capacitado de convertirse en parte activa de este proceso, ahora quieran participar", destaca la cabeza de innovación a Global Infraestructure & Networks (Enel), Santiago Cascante. "A medida que el usuario incrementa su cultura energética, se hace más independiente y se convierte en un cliente más exigente", añade Rousaud.
Esta implicación más grande por parte de los usuarios es la que acabará empujando a la regulación a hacer cambios y a adaptarse a la digitalización. "En unos años, la gran mayoría de la población serán nativos digitales y esta voluntad de know how del usuario en temas de energía que hasta ahora no existía acabará atrayendo la digitalización del sector", apunta Rousaud.
Las grandes empresas energéticas necesitan de startups que las impulsen a innovar
Pero, de momento, esta implicación todavía no se ha acabado de producir del todo. Cascante destaca como el coche eléctrico ya está disponible para los consumidores, pero todavía hay poca gente que lo utilice. "Los cambios tecnológicos no son inmediatos, se necesita una transición".
La necesidad de startups para innovar
Algunas de las oportunidades que plantea la digitalización por el sector energético y con las cuales los expertos coinciden es en el incremento de la eficiencia y en la reducción de costes. Pero para que esta transformación se acabe de producir, se necesita un cambio en el modelo de negocio de las empresas energéticas. Tal como apunta el director del Hub Digital de Siemens South-West Europe, Oliver Pozo, "el que ha sido disruptiu en otros sectores ha sido el cambio de modelo de negocio" con la aparición de startups que han cambiado la forma de funcionar de las empresas en el mercado.
Sin embargo, en el sector energético han aparecido pocas empresas emergentes. Según Cascante, este hecho se debe de a la velocidad con la cual se mueven y trabajan las startups, un ritmo que en el mercado energético no existe de momento. Aún así, Pozo y Cascante coinciden en el hecho que se necesitan startups para que las grandes empresas energéticas puedan asociarse con ellas y avanzar hacia la digitalización del sector.
Imagen del panel de expertos del sector energético | P.A.
Obligados a transformarse
La digitalización abre el camino a nuevas actuaciones y cambios en el sector energético. Un cambio de regulación, más implicación por parte de los usuarios, nuevos modelos de negocio y alianzas tecnológicas con otros sectores son algunos de los cambios que nos podemos encontrar en un futuro. Y para los expertos, el más importante es este último. "La tecnología tiene que crear alianzas entre sectores", apunta Gavaldà, a la vez que Rousaud advierte que "esta unión TIC-energía se tiene que dar con un objetivo claro: el cambio del modelo energético".
"A medida que el usuario incrementa su cultura energética, se convierte en un cliente más exigente", señala Rousaud.
Sin embargo, el usuario no deja de jugar un papel bastante relevante en todo este proceso. La digitalización llegará de un momento al otro y a medida que "la sociedad exija a las empresas determinados estándares de sostenibilidad y cura por el medio ambiente, estas, para mantener la buena relación con el cliente, tendrán que adquirir, quieran o no, las innovaciones", señala el CEO de Factorenergia. Al final, parece que quién tiene la última palabra es el consumidor.