
El número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales se situó en 2.426 el primer trimestre del año en el Estado, cifra un 5,3% inferior a la del trimestre anterior, pero un 2,4% superior a la del mismo trimestre de 2024, según la estadística de ejecuciones hipotecarias publicada este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El objetivo principal de esta estadística del INE es ofrecer trimestralmente el número de certificaciones de ejecuciones hipotecarias iniciadas e inscritas en los registros de la propiedad durante el trimestre de referencia. Por otro lado, el INE recuerda que no todas las ejecuciones hipotecarias terminan con el desalojo (desahucio) de los propietarios.
En concreto, el primer trimestre se iniciaron 5.531 ejecuciones hipotecarias, un 6,2% más en tasa trimestral y un 2,6% más en la comparación anual. De estas, 5.256 afectaron a fincas urbanas (donde se incluyen las viviendas) y 329 a fincas rústicas (-10,1% trimestral y -25,1% interanual).
Una tendencia positiva
Las ejecuciones hipotecarias sobre fincas urbanas aumentaron un 7,5% durante el trimestre y un 5,1% en comparación con el primer trimestre de 2024. Dentro de las fincas urbanas, 3.429 ejecuciones correspondieron a viviendas, un 3,1% menos que el trimestre anterior, pero un 3,6% más que el primer trimestre de 2024. De estas, 2.930 eran ejecuciones sobre viviendas de personas físicas, cifra un 4,7% inferior a la del trimestre anterior y un 4,7% inferior a la del trimestre anterior.
Por su parte, las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas de personas jurídicas se incrementaron un 8% trimestral (-1,8% interanual), hasta las 499, mientras que las realizadas sobre solares se dispararon un 47,8% entre enero y marzo (+63,5% interanual), hasta totalizar 170.