16
de Julio
de
2015
Act.
16
de Julio
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2015
Con la llegada del buen tiempo el comercio barcelonés se ha animado. No se trata con sólo que la oleada de calor haya disparado las ventas de productos como los ventiladores, "también es una motivación para la gente a comprar ropa", asegura a VIAempresa Miquel Àngel Fraile, secretario general de la Confederación de Comercio de Cataluña. Fraile, pero, tampoco lo ve como la causa principal de la mejora del comercio. "Lo es más el turismo, favorecido por la inestabilidad en otros países del Mediterráneo", indica.
Sea como fuere, el comercio de la capital catalana también empieza a recuperar la esperanza. Este jueves se ha presentado el Indicador de Comercio de Barcelona (IcoB) que elaboran Esade y la Fundación Barcelona Comercio constatando que los comerciantes barceloneses han vivido este segundo trimestre de 2015 como uno de los mejores de los últimos años. Según su percepción, crece la afluencia de compradores a las tiendas, así como su actitud ante la acción de compra. En cifras del estudio, esta actitud se cuantifica en un 3,26 sobre 5, que correspondería a una actitud muy animada.
Estas son las conclusiones principales de unos sondeos trimestrales realizados a 500 comercios de las principales arterias de la ciudad. Un tejido comercial que incluye los sectores de la alimentación, el equipamiento personal y del hogar, los servicios profesionales, el ocio y la cultura.
Miquel Àngel Fraile celebra que estos datos confirman el que ya destacaba el informe de su asociación respeto la ocupación y el índice de ventas. "Crece de manera positiva con un cambio de tendencia significativo del 2015 respecto al 2014 y años anteriores". Según Fraile, "el pequeño comercio es un motor de este crecimiento porque los clientes aprecian su oferta comercial".
No sólo esto, a su entender era "impensable hace dos o tres años lograr la situación que tenemos ahora". Aún así, los porcentajes siguen siendo bajos, con unas ventas que crecen entre un 2 y un 4%. "Venimos de una bajada del 30% de hace siete años, por lo tanto el importante es el cambio de tendencia".
La lenta pero constando bajada del paro ha ayudado en este sentido, especialmente en el pequeño comercio. "Más del 80% de los contratos que se hacen son indefinidos, esto nos anima a todos juntos y se expresa en la confianza del consumidor", dice Fraile; que también destaca el crecimiento del índice de pago con tarjeta de crédito. "Esto quiere decir que la gente tiene confianza que podrá hacer frente a estos gastos", asegura.
Más ingresos y menos costes
Esta percepción de mejora manifestada por los comerciantes encuestados se sustenta, además, en unos resultados positivos en caja, donde a pesar de que la facturación y tickets de caja han continuado cayendo (-0,5% sin tener en cuenta la inflación) lo han hecho a un ritmo sustancialmente inferior al de periodos anteriores (-0,8% en el mismo trimestre de 2014 en los dos casos –facturación y tickets de caja- y -3,4% y -3,6% en 2013 respectivamente). Incluso en el sector equipamiento de personas la evolución de negocio ha sido positiva ( 0,36%).
Esta evolución general se fundamenta tanto en la mejora de los ingresos como en la reducción de costes, que se han estabilizado: la luz ( 2%, entre los más bajos de los últimos años), el agua y el gas ( 1,0%, el más moderado desde 2012), los alquileres ( 0,5%) y también los costes laborales ( 0,4%). Los costes relacionados con la compra también se han reducido (-0,1%).
En este sentido, el presidente de la Fundación Barcelona Comercio, Vicenç Gasca, ha indicado que: "el comercio barcelonés empieza a notar el cambio positivo en la tendencia de ventas y en la actitud de los consumidores". Gasca ha añadido que "es evidente que todavía queda mucho camino para recuperar el posicionamiento anterior a la crisis, pero todo indica que estamos en el buen camino de la recuperación del comercio".
Esta visión coincide con la del director del estudio y Catedrático en Marketing de Esade, Josep-Francesc Valls, que asegura que "con unos cuántos meses de retraso, el sector comercial barcelonés se sume a los síntomas de mejora del consumo". Según Valls, "de esta forma se reducen los números negativos, lo cual supone una mejora parcial de los resultados, muy afectados por la crisis".
Más competencia en alimentación
Según los resultados del IcoB, el dinamismo empieza a volver en determinados sectores. Una de las primeras muestras de estos cambios es el crecimiento de la competencia, que en ámbitos como la alimentación se está incrementado de forma clara, según los comerciantes encuestados. El 52,6% de la muestra así lo considera, lo cual representa un resultado histórico desde la primera edición de la IcoB en 2010. En esta línea, aunque con menor intensidad, se encuentra el equipamiento de personas (el 32,5% así lo afirma), mientras que en el resto de sectores no se percibe, de momento, un impulso de los competidores.
Esta presión es todavía más fuerte cuando se pregunta sobre las ofertas y los descuentos. De hecho, el 71,3% de los encuestados cruz que han aumentado o han aumentado mucho. Sobre los precios, más de la mitad de la muestra encuestada está de acuerdo en que la competencia ha crecido.
Aunque la muestra contempla el trimestre que viene con cierta tranquilidad, también es cierto que los comerciantes no muestran demasiada euforia respecto a la actitud de los consumidores, las ventas y los precios. Si bien es cierto que durante los meses de verano llegarán más turistas a la ciudad, este periodo coincide también con las vacaciones de los comerciantes.
Unas rebajas tranquilas
Según la muestra, este año ha habido un buen inicio de la temporada de rebajas de verano. En la primera semana analizada, los comerciantes indican que los resultados han mejorado un 0,53% respecto al mismo periodo del año anterior. El impulso ha sido superior al 2014 ( 0,44%) y ha doblado la de 2013 ( 0,23).
Despunta la tecnología
La incorporación del online y los servicios digitales ha experimentado un fuerte crecimiento como herramientas de gestión a las tiendas de Barcelona. Uno de los aspectos que llama la atención es el crecimiento en el último año de las tiendas virtuales (del 45,4% al 59,67%) como recurso de comunicación para las misma tiendas. Las apps propias también se han doblado (del 9,2% al 19,5%), así como las de ofertas y descuentos (del 10% al 19,5%).
Nova, el 78,2% de las tiendas de Barcelona tiene un ordenador y conexión wifi, y tan sólo un 10,7% no tienen un ordenador conectado a la red.
Sea como fuere, el comercio de la capital catalana también empieza a recuperar la esperanza. Este jueves se ha presentado el Indicador de Comercio de Barcelona (IcoB) que elaboran Esade y la Fundación Barcelona Comercio constatando que los comerciantes barceloneses han vivido este segundo trimestre de 2015 como uno de los mejores de los últimos años. Según su percepción, crece la afluencia de compradores a las tiendas, así como su actitud ante la acción de compra. En cifras del estudio, esta actitud se cuantifica en un 3,26 sobre 5, que correspondería a una actitud muy animada.
Estas son las conclusiones principales de unos sondeos trimestrales realizados a 500 comercios de las principales arterias de la ciudad. Un tejido comercial que incluye los sectores de la alimentación, el equipamiento personal y del hogar, los servicios profesionales, el ocio y la cultura.
Miquel Àngel Fraile celebra que estos datos confirman el que ya destacaba el informe de su asociación respeto la ocupación y el índice de ventas. "Crece de manera positiva con un cambio de tendencia significativo del 2015 respecto al 2014 y años anteriores". Según Fraile, "el pequeño comercio es un motor de este crecimiento porque los clientes aprecian su oferta comercial".
No sólo esto, a su entender era "impensable hace dos o tres años lograr la situación que tenemos ahora". Aún así, los porcentajes siguen siendo bajos, con unas ventas que crecen entre un 2 y un 4%. "Venimos de una bajada del 30% de hace siete años, por lo tanto el importante es el cambio de tendencia".
La lenta pero constando bajada del paro ha ayudado en este sentido, especialmente en el pequeño comercio. "Más del 80% de los contratos que se hacen son indefinidos, esto nos anima a todos juntos y se expresa en la confianza del consumidor", dice Fraile; que también destaca el crecimiento del índice de pago con tarjeta de crédito. "Esto quiere decir que la gente tiene confianza que podrá hacer frente a estos gastos", asegura.
Más ingresos y menos costes
Esta percepción de mejora manifestada por los comerciantes encuestados se sustenta, además, en unos resultados positivos en caja, donde a pesar de que la facturación y tickets de caja han continuado cayendo (-0,5% sin tener en cuenta la inflación) lo han hecho a un ritmo sustancialmente inferior al de periodos anteriores (-0,8% en el mismo trimestre de 2014 en los dos casos –facturación y tickets de caja- y -3,4% y -3,6% en 2013 respectivamente). Incluso en el sector equipamiento de personas la evolución de negocio ha sido positiva ( 0,36%).
Esta evolución general se fundamenta tanto en la mejora de los ingresos como en la reducción de costes, que se han estabilizado: la luz ( 2%, entre los más bajos de los últimos años), el agua y el gas ( 1,0%, el más moderado desde 2012), los alquileres ( 0,5%) y también los costes laborales ( 0,4%). Los costes relacionados con la compra también se han reducido (-0,1%).
En este sentido, el presidente de la Fundación Barcelona Comercio, Vicenç Gasca, ha indicado que: "el comercio barcelonés empieza a notar el cambio positivo en la tendencia de ventas y en la actitud de los consumidores". Gasca ha añadido que "es evidente que todavía queda mucho camino para recuperar el posicionamiento anterior a la crisis, pero todo indica que estamos en el buen camino de la recuperación del comercio".
Esta visión coincide con la del director del estudio y Catedrático en Marketing de Esade, Josep-Francesc Valls, que asegura que "con unos cuántos meses de retraso, el sector comercial barcelonés se sume a los síntomas de mejora del consumo". Según Valls, "de esta forma se reducen los números negativos, lo cual supone una mejora parcial de los resultados, muy afectados por la crisis".
Más competencia en alimentación
Según los resultados del IcoB, el dinamismo empieza a volver en determinados sectores. Una de las primeras muestras de estos cambios es el crecimiento de la competencia, que en ámbitos como la alimentación se está incrementado de forma clara, según los comerciantes encuestados. El 52,6% de la muestra así lo considera, lo cual representa un resultado histórico desde la primera edición de la IcoB en 2010. En esta línea, aunque con menor intensidad, se encuentra el equipamiento de personas (el 32,5% así lo afirma), mientras que en el resto de sectores no se percibe, de momento, un impulso de los competidores.
Esta presión es todavía más fuerte cuando se pregunta sobre las ofertas y los descuentos. De hecho, el 71,3% de los encuestados cruz que han aumentado o han aumentado mucho. Sobre los precios, más de la mitad de la muestra encuestada está de acuerdo en que la competencia ha crecido.
Aunque la muestra contempla el trimestre que viene con cierta tranquilidad, también es cierto que los comerciantes no muestran demasiada euforia respecto a la actitud de los consumidores, las ventas y los precios. Si bien es cierto que durante los meses de verano llegarán más turistas a la ciudad, este periodo coincide también con las vacaciones de los comerciantes.
Unas rebajas tranquilas
Según la muestra, este año ha habido un buen inicio de la temporada de rebajas de verano. En la primera semana analizada, los comerciantes indican que los resultados han mejorado un 0,53% respecto al mismo periodo del año anterior. El impulso ha sido superior al 2014 ( 0,44%) y ha doblado la de 2013 ( 0,23).
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| Tasa de crecimiento de facturación durante las rebajas. IcoB |
Despunta la tecnología
La incorporación del online y los servicios digitales ha experimentado un fuerte crecimiento como herramientas de gestión a las tiendas de Barcelona. Uno de los aspectos que llama la atención es el crecimiento en el último año de las tiendas virtuales (del 45,4% al 59,67%) como recurso de comunicación para las misma tiendas. Las apps propias también se han doblado (del 9,2% al 19,5%), así como las de ofertas y descuentos (del 10% al 19,5%).
Nova, el 78,2% de las tiendas de Barcelona tiene un ordenador y conexión wifi, y tan sólo un 10,7% no tienen un ordenador conectado a la red.