La Escola Sant Gervasi, el espacio de encuentro de Mollet

La cooperativa de trabajo asociado amplía sus instalaciones y remodela los servicios de FP gracias a un crédito del ICF, cofinanciado por Caixa Enginyers

La Escola Sant Gervasi, ubicada en Mollet del Vallès | Cedida La Escola Sant Gervasi, ubicada en Mollet del Vallès | Cedida

Mediante un ejercicio de autoestima en Plana Lledó, un barrio de Mollet del Vallès marcado por la migración, Manuel Arroyo fundó la Escola Sant Gervasi hace más de cinco décadas. Inicialmente creada como un centro de enseñanza privada, en poco tiempo se orientó hacia uno de sus rasgos diferenciales, que ha mantenido durante su trayectoria: ser una cooperativa de trabajo asociado, que dejaba abierta la puerta a la participación de las familias. De hecho, hoy en día, la entidad cuenta con 107 socios, cinco de ellos representantes de las familias colaboradoras. Más allá de la fórmula de gestión, el presidente de la cooperativa, David Cos, habla de una filosofía que ha acompañado los pasos de la escuela desde 1970. "Tenemos claro nuestro propósito de crear un clima comunitario, que propicie un sentimiento de pertenencia al barrio y a la ciudad". De hecho, Cos añade un matiz. "Nos gusta decir que no creamos una escuela, sino un centro social, cultural y deportivo". En este sentido, reivindica la Escola Sant Gervasi "como un espacio saludable de crecimiento, que abre los siete días de la semana".

La Escola Sant Gervasi ha ido creciendo de forma sostenida, incorporando servicios y actividades, que le han hecho dejar atrás la categoría exclusiva de centro de enseñanza para incorporar proyectos. Este se ha evidenciado con la construcción de nuevos edificios, puesto que actualmente el centro está formado por cinco. Allá, se concentran las instalaciones escolares, pero también equipamientos científicos, deportivos y de ocio. Tal como señala David Cos, "se trata de propiciar un entorno familiar y de compartir espacios con un barrio involucrado detrás".

Actividades de ocio, extraescolares, la presencia de 40 equipos de baloncesto federados, teatro, laboratorios, bibliotecas... Todo esto forma parte del ecosistema de la Escola Sant Gervasi, haciendo suya la premisa fundacional de la cooperativa que gestiona el centro de ir más allá de la caracterización como escuela tradicional. Este ámbito de crecimiento, en palabras de su presidente, "hace que puedan compartir espacio en nuestra piscina una niña de cuatro años y su abuela".

La escuela ha ido creciendo de forma sostenida, incorporando servicios y actividades, que la han hecho dejar atrás la categoría exclusiva de centro de enseñanza para incorporar proyectos

Financiar un cambio de modelo

En su afán constante de renovar su método pedagógico, basándose en cambios en el concepto de aula y de espacio de aprendizaje, la Escola Sant Gervasi decidió pedir financiación para ampliar las instalaciones y remodelar los servicios para ofrecer nuevos ciclos de FP. A estas alturas, se imparten dos de farmacia y química, mientras que la idea es extenderlos a otros sectores, como la educación, la informática, el diseño, el deporte y el ocio. Gracias a Caixa Enginyers, que propuso una opción de cofinanciación, se ha concretado una operación conjunta de la entidad cooperativa de crédito con sede en Barcelona con el Instituto Catalán de Finanzas (ICF), organismo perteneciente a la Generalitat de Cataluña. Con su línea 'ICF Crédito- Inversión', la entidad financiera del Govern otorga préstamos para financiar inversiones en activos fijos, materiales, inmateriales y financieros. Además, como en el caso de la Escola Sant Gervasi, también incluye la posibilidad de cofinanciar con otra entidad financiera con iguales condiciones y garantías.

Este crédito está permitiendo que la escuela materialice físicamente la nueva idea pedagógica. Las obras, que se iniciaron el mes de diciembre del año 2023 y está previsto que finalizan en el mes de agosto de este año, también contemplan la instalación de placas solares en el tejado para favorecer la eficiencia energética. David Cos destaca la importancia que "el ICF haya trabajado de forma coordinada con una entidad cooperativa, como Caixa d’Enginyers, lo que ha ayudado a la creatividad de la operación y a conseguir unas condiciones financieras competitivas".

El crédito está permitiendo que Sant Gervasi materialice físicamente la nueva idea pedagógica

En la Escuela Sant Gervasi estudian más de 1.650 alumnos, desde I3 hasta el Bachillerato, además de los diferentes ciclos de FP. El fomento de las lenguas extranjeras, la formación continua y ocupacional, con cursos para parados y formación para las empresas, o los programas deportivos y culturales forman parte del talante diversificado de la entidad. Paralelamente, el presidente de la cooperativa enfatiza el carácter innovador y la apuesta por la ciencia. "Somos fundadores de una empresa tecnológica, de la cual han surgido patentes y además, como entidad, disponemos de un programa de emprendeduría". En la esfera de las actividades empresariales, la escuela tiene una sección de participadas, en que a través de la compañía Creixen en Educació, constituida conjuntamente con Suara y Abacus, gestionan centros educativos en Olesa de Montserrat, Terrassa y Viladecans.

Los 40 equipos de baloncesto constituidos alrededor del centro suponen que la Escola Sant Gervasi sea el centro de Catalunya con más formaciones federadas de este deporte. En el mismo campo deportivo, también se ejercen clubes de natación, voleibol o patinaje. En este aspecto, David Cos se muestra orgulloso cuando recuerda que "durante los días laborables de Semana Santa, abrimos las puertas y la escuela estaba llena por las actividades que se desarrollaban".

Cos defiende el modelo organizativo del centro, recordando que "a pesar de aspirar a ser una escuela interclasista, buscamos la excelencia". Según explica, el tiempo ha evidenciado que con un control estricto de los recursos y generando nuevos servicios se puede abaratar la plaza escolar. Para hacerlo posible, se ha optado por diversificar las actividades para mejorar la eficiencia y erigirse en una opción más viable económicamente que otros centros educativos. De hecho, para la Escola Sant Gervasi, que en cinco décadas ha dado el paso de academia a centro cultural, deportivo y cívico, la realidad ha corroborado que con los mismos costes que la escuela pública se puede lograr un nivel igual o mejor tanto en formación como en competencias profesionales.

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