En este tercero de los artículos sobre las principales conclusiones del Congreso Mundial de Cambras celebrado en Ginebra la semana de San Juan y al que tuve el placer de asistir, me gustaría destacar la importancia mundial del factor humano en las empresas y organizaciones. Así lo vimos plasmado en diferentes ponencias que pusieron de relieve, señalando que, afortunadamente, hoy en día el peso de la decisión de una vinculación profesional recae principalmente en la valoración de los candidatos/as sobre las prácticas reales y valores de la empresa, aun por encima, pese a su importancia, de aspectos pecuniarios en los que se incluyen también las facilidades de combinar la vida familiar con la profesional. Esta realidad, lógicamente, está presente en nuestra región, tal y como en la Cambra de Terrassa hemos constatado en el incremento de un 26% de la plantilla durante la presente legislatura, actualmente de treinta y seis personas, tres cuartas partes del género femenino, y que intentamos recurrentemente consolidar gracias a una total explicitación de los valores y objetivos que trabajados en el ámbito del Comité Ejecutivo y aprobados por el Plenario. Estos parten de una constante interacción con el señalado equipo profesional, principal activo de la entidad, buscando potenciar su profesionalidad, objetivo que a la vez nos posibilita no solo ofrecer al mejor servicio al tejido empresarial sino también saber captar sus necesidades de cara a adecuar nuestros servicios.
Así fruto de esta capacidad y con una necesaria colaboración con profesionales de otras cambres catalanas, nuestro equipo profesional ha desarrollado la necesaria actualización de los servicios camerales en la incentivación de la internacionalización de las compañías, también las pymes, haciendo valer, como ampliamente se ha destacado en este congreso, la experiencia y relaciones camerales entre las más de 13.000 cambres de comercio del mundo. Por su mejor perfección requerimos optimizar las recurrentes relaciones con Acció potenciando la complementariedad y evitando duplicidades ineficientes que, como en muchos otros campos, nuestro país no puede permitirse y de ahí la recurrente mano tendida del tejido cameral hacia todo tipo de administraciones y otras entidades por una colaboración eficiente.
Los actuales resultados demuestran las dificultades con las que se enfrenta la parte separada en un mundo cada vez más global
Para concluir las interesantes sesiones de trabajo intervino el exministro en varios gobiernos franceses y que también lideró, representando en la Unión Europea, las negociaciones del Brexit con Reino Unido. De sus palabras destacar su apuesta también por el multilateralismo en un mundo en el que Europa, sin dar lecciones, debe aportar su experiencia, para evitar nuevos divorcios internos que en el caso del Brexit tuvo, a su entender, una base de cabreo social a valorar pues está globalmente presente. Este experimentado político señaló que los actuales resultados demuestran las dificultades con las que se enfrenta la parte separada en un mundo cada vez más global. Así en cuanto al PIB, mientras que en el año 2016 cuatro países de la Unión Europea, el Reino Unido entre ellos, estaban entre los 8 primeros del mundo, las proyecciones para 2050 son que sólo Alemania seguirá perteneciendo, pero en uno séptimo puesto. Si se valora por el conjunto de la Europa de los 27, en 2016 ocupábamos la segunda posición y según las proyecciones, pasaremos al tercer puesto en 2030 ya un cuarto puesto en 2050, ampliamente superados por China, los Estados Unidos, e India y, por tanto, hay que fortalecer la unidad europea, que no significa uniformidad.
Ligado con esta faceta geográfica cabe destacar que a pesar de celebrarse en Suiza, los europeos éramos los asistentes menos numerosos, ampliamente superados por asiáticos y también africanos, continentes en los que las cámaras están jugando un papel activo en su desarrollo, tejiendo una fuerte sociedad civil, empoderando nuevas iniciativas empresariales para superar, en muchos sitios, inestables gobiernos y fomentando el multilateralismo, que como escribí en el primero de los artículos y como lema del Congreso, es la base para ayudar desde la iniciativa privada y con las cámaras como uno de los principales actores para construir la paz y la prosperidad mundial, en el marco de una sociedad diversa, en la que el diálogo es imprescindible y donde todos los países tienen mucho que aportar en beneficio propio y del conjunto. Por todo ello y cómo concluyó la presidenta de la Cambra Internacional de Comercio, Dª. Maria Fernanda Garza, es necesario tener una pasión clara por lo que hacemos con una misión definida y explicita por todo el equipo y que en cuanto a la Cambra de Terrassa, que tengo el honor de presidir, no es otro que fomentar la competitividad y el desarrollo socioeconómico de la demarcación y de Catalunya en general, propiciando una necesaria colaboración entre los diferentes actores, que evite duplicidades, buscando un equilibrio económico que asegure nuestra continuidad aportando valor a través de nuestra capacidad de establecer relaciones, proyectando la Cambra como una entidad abierta y referente en el impulso y apoyo permanente a la iniciativa empresarial y a la actitud emprendedora. Por un mejor desempeño, también la Ley de Cambres Catalanes es imprescindible.