
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha avanzado que el Gobierno está trabajando en un Plan de Infraestructuras del Transporte de Catalunya 2025-2050 con el objetivo de "transformar" la movilidad del país y prepararse para la Catalunya de los 10 millones de habitantes. Así lo ha dicho en el pleno monográfico sobre infraestructuras que arranca el martes en el Parlamento.
Un plan que incluye proyectos "estratégicos" como la conexión intermodal ferroviaria y viaria de la B-40, el Eje Transversal – que debe conectar Lleida y Girona-, el desdoblamiento de la ruta Tarragona-Lleida-Zaragoza, tranvías regionales y más buses interurbanos. Illa ha admitido que las infraestructuras son "insuficientes" en algunos ámbitos, pero ha defendido que se están "transformando".
El plan integral “articulará y potenciará” los ámbitos económicos del Camp de Tarragona, de las Terres de l’Ebre, de las Terres de Ponent y de la Catalunya Central y huirá del crecimiento centralizado en áreas metropolitanas para ir hacia un modelo de “constelación”.
Esta planificación parte de la “premisa de mirar hacia adelante y no hacia atrás” y de asumir el incremento de población de 2050, que se prevé de 2 millones de personas
Esta planificación parte de la “premisa de mirar hacia adelante y no hacia atrás” y de asumir el incremento de población de 2050, que se prevé de 2 millones de personas. “Tenemos unas infraestructuras construidas para un país de 6 millones cuando en Catalunya ya somos 8 millones y creciendo. Es obvio que en algunos ámbitos tenemos infraestructuras insuficientes”, ha dicho Illa en la intervención inicial del pleno monográfico, que se alargará hasta el jueves.
En la misma línea, la consejera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Sílvia Paneque, ha coincidido en decir que la sociedad catalana “pide una nueva política ferroviaria desde hace décadas” para asumir el crecimiento de población que se aleja progresivamente del área metropolitana, tal como se ha detectado en las ciudades de entre 25 y 60 kilómetros de Barcelona, que han experimentado un incremento de residentes del 51%.
El Gobierno quiere impulsar el Eje Transversal ferroviario que debe unir Lleida y Girona, pasando por Cervera, Igualada o Manresa y las líneas orbitales ferroviarias que deben romper la configuración radial de la red, con ramales entre Vilanova i la Geltrú y Vilafranca del Penedès; entre Martorell y Terrassa; y entre Sabadell y Granollers y Granollers Mataró.
Además, el Ejecutivo estudiará la viabilidad de los tranvías regionales entre Girona y Banyoles, entre Tortosa y l’Aldea y entre la Seu d’Urgell y Sant Julià de Loira (Andorra), unas infraestructuras que ahora mismo no serían rentables, pero que podrían serlo en la Catalunya de 2050, cuando se espera que la población llegue a los 10 millones. También es prioritario el tranvía del Camp de Tarragona, que está más avanzado y que iniciará las obras del primer tramo entre Cambrils y Vila-Seca a finales de 2025 con un coste de 244,9 millones de euros.
Illa también ha defendido la creación de la nueva empresa mixta Rodalies de Catalunya será la futura operadora del servicio de cercanías
Illa también ha defendido la creación de la nueva empresa mixta Rodalies de Catalunya será la futura operadora del servicio de cercanías y regionales y que se construirá durante el mes de julio.
La red ferroviaria deberá estar complementada con mejoras en el sistema de buses interurbanos, especialmente en los corredores rápidos, como el de Salt-Girona, Terrassa-Sabadell, Blanes-Lloret o Riera de Caldes-Palau-Solità y Plegamans.
En este ámbito, Paneque, ha asegurado que se está redactando un “nuevo modelo más eficiente” para las nuevas concesiones que se cerrarán cuando se acabe el actual contrato, en 2028. El Gobierno está estudiando ampliar los contratos de las líneas que han tenido que incrementar notablemente frecuencias -que en algunos casos prácticamente se han duplicado- por el incremento de usuarios para que las empresas puedan amortizar las inversiones.
En el ámbito viario, también han destacado el desdoblamiento de la C-55 en el Bages, la ampliación de la C-16 entre Berga y Bagà, la mejora del Eje Pirenaico N-260, DEL corredor de la B-224 y un nuevo tramo del Eje de Comiols; así como la mejora de la conectividad entre la AP-2 y la AP-7. También se optará por la Variante de les Preses y de Olot o la de Sant Feliu de Codines.
El Gobierno también ha situado como prioridad la ampliación de Puerto de Barcelona, que debe recibir una inversión estimada de 1.150 millones de euros para proyectos como los nuevos accesos viarios y ferroviarios y el sistema de suministro de energía OPS, y del Puerto de Tarragona, de 195,3 millones de euros para crear viales de acceso a la Zona de Actividades Logísticas o la construcción de una terminal intermodal de 150.000 metros cuadrados en la zona de Guadalajara.
A pesar de las críticas de la oposición, Illa ha defendido que los niveles de ejecución de obras de movilidad, energía y recursos hidráulicos se encuentran en "niveles inéditos" con una inversión pública movilizada con más de 20.000 millones de euros. “Las grandes infraestructuras no mejoran con la confrontación con otros Gobiernos sino con la exigencia mutua”, ha remachado el jefe del Ejecutivo.