La China no pierde el tiempo, todo y su desaceleración económica. Este lunes recibe la visita de la cancillera Angela Merkel y de la visita sale la noticia que Airbus y tres firmas chinas establecerán una planta de ensamblatge de helicópteros a la región de Quingdao. "La China espera ser un destino más atractiva para las inversiones extranjeras, y que otros vean que el desarrollo pacífico de este país sirve también al de otros", ha afirmado su primer ministro, Li Keqiang, en la rueda de prensa que ha compartido con Merkel tal como recoge EFE. La visita institucional alemana busca presionar al gigante asiático porque continui permitiendo un margen de negocio a las empresas alemanas al mercado chino en un contexto en que su desaceleración muestra síntomas negativos también a la bolsa -al cierre de la jornada, el índice Shanghai Composite se había deshinchado un 3,2%.
Aun así, las palabras de Keqiang parecen buscar el refuerzo de las relaciones ya establecidas con regiones como la española, donde la economía china ha aumentado considerablemente su presencia en los últimos años. De hecho, los emprendedores chinos abren bares con tanta rapidez que ya no sorprende que la bodega de la esquina esté ahora regentada por el señor Yang y su mujer, la simpática Xiaomei. En los últimos años, la comunidad china ha pasado de inaugurar bazares –nuestros antiguos 'Todo en 100'-, que también, a servir tapas de calamares y patatas bravas, clásicos de la cocina española, con la misma rapidez y éxito. Como consumidores, tenemos la sensación compartida que han invertido muy aquí y esta percepción tiene cifras que la validan: el 2014, más de 600 millones de euros han entrado a España como inversión directa desde la China.
El último Informe Inversión China en Europa 2015 de ESADE Barcelona revela que invierten en hostelería, pero también en turismo y energía. En total, 75 empresas chinas operan en el Estado español y la previsión es que muchas más aterrizan en los próximos años porque la China considera España "un importante socio al continente europeo", tal como asegura Tang Lingyun, cónsul general adjunta del Consulado General de la República Popular de la China en Barcelona.
Unas inversiones que no mirarán quién gobierne aquí o allá, porque no entienden de colores políticos, ha venido a decir Lingyun, quienes ha preferido matizar que la incertidumbre política no es buena. "Los inversores chinos quieren venir a un país con un entorno político y económico establo", ha defendido en un cuidado tono diplomático. Más claro ha sido Joan Aregio, secretario de empresa y Competitividad de la Generalitat de Cataluña, quien ha defendido que "las inversiones se producen por otros motivos (en referencia a los políticos). Nuestras bases son suficientemente sólidas cómo porque los momentos políticos no intervengan. Esto es tan ilógico cómo si yo dijera que todas las inversiones están porque tienen mucha fe y esperanza en que se independice Cataluña".
Durante la mesa redonda El papel de España como país receptor de inversiones chinas, celebrado a ESADE Barcelona, varios economistas han explicado el viraje que está haciendo el país desde la industria hacia los servicios y cómo afecta este cambio a sus relaciones comerciales con el resto de países. De hecho, la representante diplomática china ha explicado que la China llevará a cabo su nuevo Plano Quinquenal 2016-2020 –aprobado el 16 de marzo pasado- "para ser una sociedad modestamente acomodada, para mantener el crecimiento económico e impulsar las industrias, potenciar el papel conductor de la innovación, proveer el desarrollo coordinado de las zonas rurales y urbanas, acelerar la mejora del entorno ecológico, implantar un nuevo régimen de desarrollo…", apunta Lingyun, además de un largo etcétera de propósitos.
En este amplio listado entra también cuidar sus relaciones comerciales con el Estado español. Nova, el 2014 la China ha ocupado la posición 14a como socio comercial de España y la 5a como importador. Tal como recoge el mencionado informe, la inversión extranjera directa (IED) español recibimiento por la China, un total de 1.258 millones en el periodo 2010-2014, es superior a la IED chino recibimiento por España, según los expertos, lógico porque las multinacionales españolas tienen más tradición y experiencia de inversión en el exterior y las compañías chinas han empezado a invertir en el exterior de forma regular hace sólo unos años.
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Los ponentes del acto celebrado a Esade Barcelona. Cedida |
Oficinas de banca al por menor, ampliaciones de puertos marítimos, compra de inmuebles, patrocinios de equipos de fútbol, adquisiciones de empresas manufactureres para ampliar su capacidad productiva, inversiones en empresas agroalimentarias o creación de joint venturas para colaboración estratégica entre empresas tecnológicas son algunas de las actividades empresariales de la China al mercado español. Pero también destacan los pequeños negocios como los bares y bazares, multiplicados por dos desde 2008, detrás de los cuales se sitúan cerca de 45.000 chinos dados de alta en la Seguridad Social como autónomos.
Por qué España?
Según explica Antonio Hernández, socio de Estrategia Energética e Internacional de KPMG en España, en la China están interesados porque "aquí hay sectores regulados y estratégicos para su economía, por la tecnología, porlaexpertise de los directivos españoles y por el posicionamiento estratégico en numerosos mercados como el latinoamericano, una de las razones del interés chino en este mercado".
El Puerto de Barcelonasabe de este interés por las economías del Mediterráneo, tal como explica Santiago Garcia-Milà, subdirector general de Estrategia Comercial de la infraestructura. "Hay dos grandes elementos que desde la China se valoran: el acceso a otros mercados y que nuestra zona se convierte en zona central del comercio mundial. La lectura de futuro es que el área del Mediterráneo tiene que asumir el rol que hoy en día el mercado le pone encima de la mesa", apunta el directivo del Puerto de Barcelona. Garcia-Milà habla de esta relación como fruto del plan BARCELOC que, diseñado junto con Acción, explica las ventajas de invertir en Barcelona y apuesta porque "este sea el puerto a través del cual la China haga la distribución por el Mediterráneo, también por su rol de la más importante área industrial del sur de Europa".
Por otro lado, Albert Garrofé, socio del área de mercantil de Cuatrecasas, Gonçalves Pereira en Barcelona, describe España como "un paraíso para descubrir para la China". En su enumeración de bondades, el abogado destaca la excelente ubicación geográfica como una de las razones que motivan este interés chino, "a pesar de que el transporte de mercancías todavía se hace básicamente con camiones, España tiene una infraestructura buena para moverse en Asia y norte de Oriente", apunta.
Los vínculos con Sudamérica, el sistema legal de protección de las inversiones, la estabilidad del sistema judicial español, la flexibilidad de las normativas son, en palabras de Garrofé, otras de los argumentos de peso porque los chinos pongan su mirada a la península Ibérica. "Aquí existen registros públicos que los da mucha fiabilidad: el auge de las inversiones inmobiliarias por parte de empresas chinases un ejemplo".
Menor crecimiento chino, pero crecimiento al fin y al cabo
Hernández considera que, todo y el menor crecimiento de su economía, las inversiones directas de la China continuarán siendo claves y le seguirán sirviendo para liderar el crecimiento económico mundial. "Si tenemos en cuenta la memoria histórica, vemos que en todos los Planos Quinquenales la China ha crecido por encima del planificado. Si se consolidan las mejoras macroeconómicas de la China,habrá un aumento", razona. La previsión a estas alturas es que el PIB chino crezca al 6,5%, abandonando los dos dígitos –crecía por encima del 10%- que años atrás lo han ubicado al podio económico mundial.
En este sentido, el responsable de KPGM habla de la "nueva normalidad" de la China como una transición natural, libre de dramatismos. "Se está haciendo sostenible su crecimiento. Vamos hacia una integración más flexible de la China a los mercados mundiales, el que creo que también será sostenible para ellos. Muchas economías emergentes habían basado su crecimiento en la exportación limpia en la China y al reducirse su exportación, se han visto muy afectados, como el Brasil, por ejemplo", explica Hernández.
Aumenta la demanda interna del país y, por el contrario, decrece la dedicación al sector industrial, mientras el sector primario se mantiene en, aproximadamente, un 90% de la producción china. "La economía china se enfrenta a desventajas pero creemos que también a muchas esperanzas porque ahora su base ha cambiado, ya existe la nueva normalidad", cierra Hernández.