Mantenerse activo, la alternativa a un futuro sin pensiones

El 45% de los jubilados catalanes dispone otras fuentes de ingresos además de la pensión pública

Jubilados y pensionistas a las puertas de la INSS en Barcelona | ACN Jubilados y pensionistas a las puertas de la INSS en Barcelona | ACN

La prometida de Mariano Rajoy de aumentar las pensiones mínimas al mismo nivel de crecimiento del IPC no ha gustado a los jubilados que han salido estos días a la calle pidiendo unas pensiones dignas. "A la gente le han explicado toda la vida que, el día en que se jubilen, tendrán una pensión y lo han planificado todo en función de esto", explica el profesor del departamento de Iniciativa Emprendedora de la IESE y presidente del CEIBS, Pedro Nueno. "Yo nunca me lo he creído; si voces como se malgasta el dinero en este país en cosas inútiles no te puedes sorprender que no haya fondo".

El profesor acaba de publicar Jubilado. ¿Y ahora qué? (Plataforma Editorial), un libro en que plantea las alternativas a la jubilación que tienen ante suyo las personas que no quieren retirarse un golpe completa su vida laboral y que, en el contexto actual, toma más vigencia que nunca. "Hemos confiado mucho en el Estado, pero el Estado ya hace tiempo que nos va diciendo que espabilamos", apunta Nueno, que plantea como opción mantenerse activo y generar recursos propios.

De hecho, el 45% de los jubilados catalanes dispone otras fuentes de ingresos además de la pensión pública, según se desprende del barómetro VidaCaixa, de la Obra Social La Caixa. El mismo profesor es un ejemplo de profesional que se mantiene en plena actividad más allá de la edad de jubilación. A sus 73 años, Nueno viaja dos golpes al mes en la China donde, además de presidir la escuela de negocios CEIBS, se reúne con todo tipos de empresarios. Y su motivación para hacerlo no es diferente de la que tenía a los inicios de su carrera. "A mi vida siempre he querido aprender, y cada aposento en la China es un aprendizaje increíble".

El profesor del IESE, Pedro Nueno, publica el libro 'Jubilado ¿Y ahora qué?', en el que analiza como enfocar la puesto-jubilación sin retirarse

El jubilado 'oldpreneur'

Por Nueno, hay razones sobradas para continuar ligado en el mundo laboral un golpe pasada la edad de la jubilación. Entre ellas el aumento de la esperanza de vida y la calidad de vida en edades avanzadas. "Tenemos que empezar a pensar que viviremos 100 años, que estaremos en buena forma y que necesitamos algún tipo de actividad que nos permita estar ocupados y estimulados", afirma.

No se trata de convertirse en un emprendedor en serie a partir de los 65 años. Después de una vida trabajando un mínimo de 40 horas semanales, el rol laboral de la postjubilació puede ser muy diferente, sea como mentor empresarial o inversor en nuevos proyectos. "Con un poco de preparación, habilidad y pequeñas inversiones puedes ser por ejemplo un business angel de empresas tecnológicas de gran valor por la experiencia acumulada", indica el profesor.

Con una buena selección de los proyectos en los cuales invertir se pueden generar buenos ingresos, ya sea por los dividendos generados por las empresas, posibles ventas, etc. Pero, más allá de esto, este papel de inversor y mentor de nuevas compañías supone un estímulo por el jubilado. "Poner tu dinero a una start-up es una gran oportunidad para estar al día en temas digitales y nos obliga a saber qué pasa en otros países para generar negocios globales. En definitiva, nos mantiene activos, interesados y fomenta el aprendizaje".

"Tenemos que pensar que viviremos 100 años, que estaremos en buena forma y que necesitamos algún tipo de actividad que nos permita estar ocupados y estimulados"

El profesor ofrece algunos consejos para encarar esta nueva etapa como inversor-mentor por la postjubilació. El primero, crear un equipo con el cual hacer pequeñas inversiones y, así, diversificar el riesgo. El segundo, invertir parte de los ahorros en campos como el inmobiliario, que mantienen el valor de los calers a largo plazo, y así garantizar un nivel de ingresos mínimo, de forma que los beneficios de las apuestas empresariales sean para mejorar las entradas. Y, finalmente, empezar con las inversiones antes de entrar a la jubilación.

"Si entramos en el mundo de los business angels con 40 años es probable que a los 60 hayamos hecho inversiones en 30 empresas. Así es como adquieres práctica, te pones al día, convives con los jóvenes y haces contactos, que serán muy útiles para centrar los proyectos, hacer recomendaciones y abrir puertas", apunta Nueno, que asegura que, para empezar, "nos podemos dedicar unas pocas horas durante la semana o los fines de semana".

El perfil del postjubilat activo

Nueno, pero, advierte que su fórmula no es apta para todo el mundo. Mantenerse activo laboralmente después de la edad de la jubilación sólo es una opción para aquellas personas que quieren estar ligadas en el mundo de la empresa, seguir con su nivel de ingresos habituales y que, por una simple cuestión numérica, se ven apartados. "El libro va dirigido a aquellas personas que, más que jubilarse, han sido jubiladas o, incluso, trabajadores que esperaban con ganas el momento de retirarse y que, un año después, no saben qué hacer".

A pesar del indissimulat rechazo del mercado laboral a los perfiles de más edad, el profesor reivindica la valiosísima experiencia de estos trabajadores. "Lo vivimos cada día en la escuela de negocios, donde tenemos profesores de más de 65 años que están al día de las tendencias de su campo de enseñanza y son plenamente vigentes, y el mismo está sucediendo en campos como la medicina, el derecho o la arquitectura, donde personas de muy avanzada edad están haciendo grandes aportaciones por la mezcla de altísimo conocimiento de su sector y alto nivel de competencia profesional".

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