La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) prevé que la economía estatal crezca un 2,2% en 2023, dos décimas más respecto a las últimas estimaciones publicadas en el pasado mes de junio. Según las previsiones económicas publicadas este martes, el PIB español será el que más se incrementará entre las principales economías de la eurozona, por encima de Francia (+1 %), Italia (+0,8 %) y Alemania (-0,2%). Por otro lado, la organización vaticina que la inflación media para este 2023 se situará en el 3,5%, cuatro décimas menos en comparación a las últimas previsiones y la tasa más baja entre las grandes economías de la zona euro.
Los pronósticos de la OCDE siguen una línea similar a otros publicados recientemente como los de la Comisión Europea, que apuntan a un crecimiento más acentuado del previsto por "el efecto arrastre" de 2022 y una mejora "robusta" durante la primera mitad de 2023. El ejecutivo comunitario es todavía más optimista y habla de un crecimiento del 2,3%, tres décimas más respecto a la última revisión estadística.
El ejecutivo comunitario es todavía más optimista y habla de un crecimiento del 2,3%, tres décimas más respecto a la última revisión estadística
En cuanto a 2024, la OCDE sitúa la mejora del PIB estatal en el 1,9%, la misma que en su último informe. Una vez más, España presenta una tasa de crecimiento superior a la de las principales economías europeas, superando a Francia (+1,2%), Alemania (+0,9%) e Italia (+0,8%). En comparación con el conjunto de la eurozona, el país también quedaría por encima de la media. En este caso, la organización estima un crecimiento del 0,6% para 2023 en la zona euro (una revisión de tres décimas a la baja) y del 1,1% para 2024 (cuatro décimas menos).
Previsiones de inflación
Las previsiones de inflación de la OCDE también presentan a España como uno de los países con mejores registros, con una tasa del 3,5% para este 2023, por debajo de la media de la eurozona (5,5%). En cuanto a 2024, la subida de precios se prevé del 3,4%, cinco décimas menos que la última actualización.
A pesar de todo, la inflación subyacente -la que no tiene en cuenta la energía y los alimentos no procesados- se mantendrá elevada. Si bien la OCDE también lo ha revisado a la baja en el caso de España -cuatro décimas menos en 2023 y siete décimas menos en 2024-, se prevé que la tasa se sitúe en el 4,4% en 2023 y en el 3% en 2024.
Control de la política monetaria
Después de un inicio de 2023 con un crecimiento mejor del esperado, el organismo apunta que los efectos de la política monetaria restrictiva ya se han empezado a hacer notar. Si bien celebra que la tasa de inflación tiende a la baja, también alerta que la subyacente se mantiene "persistente", apuntando que las decisiones de los bancos centrales tienen que continuar siendo restrictivas "hasta que no haya signos claros de que las presiones inflacionistas van a la baja".