El Foro Barcelona de Seguretat Viària, organizado por el Racc, el Ayuntamiento de Barcelona, el Servicio Catalán de Tráfico y la Asociación Prevención de Accidentes de tráfico (PAT), ha celebrado su 27en edición al Caixaforum de Barcelona. Las principales entidades y administraciones implicadas en la movilidad y varios expertos han analizado los retos y oportunidades que plantea el fenómeno de los vehículos de movilidad personal (VMP), entre los cuales destacan principalmente los patinetes eléctricos. A pesar de representar todavía menos del 1% del total de los desplazamientos a la ciudad, los VMP están experimentando un crecimiento disruptiu y de hecho, es el único modo de transporte que creció el 2020 en el contexto de la pandemia.
En el espacio de las tablas redondas, Alba Rey, ninguno de Estudios de Movilidad del Racc, ha dado a conocer las principales conclusiones del estudio El comportamiento de los usuarios de vehículos de movilidad personal (VMP) que el Racc presentó este mes de septiembre. El objetivo de este informe es comprender las claves de este fenómeno en crecimiento y proponer recomendaciones para mejorar la convivencia y garantizar la seguridad de todos los usuarios. Para realizar este estudio del Racc se hicieron más de 3.000 observaciones y 600 encuestas a usuarios de VMP de Barcelona.
Por otro lado, el presidente del Racc, Josep Mateu ha puesto de relieve que "los accidentes con implicación de VMP son los que más aumentan después de las motos". Por eso, Mateu ha destacado que "hace falta información, formación, regulación y fomentar la convivencia, por una correcta integración". En este sentido, el presidente del Racc ha recordado que la siniestralidad de los patinetes a la capital catalana se ha incrementado este año en comparación con el 2020 y dos de los accidentes que ha habido a la ciudad han sido mortales, según datos de la Guardia Urbana.