La economía española cerró el segundo trimestre del año con un aumento del PIB del 0,8%, según los datos avanzados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La variación anual se situó en el 2,9%, tres décimas más que la del trimestre anterior. La previsión del gobierno español es que el Estado cierre el año con un crecimiento del 2,4%, por encima de lo que pronostican la mayoría de grandes economías europeas. El ministro de Economía, Comercio y Empresa Carlos Cuerpo, ha destacado que "las reformas y medidas de política económica están permitiendo mantener unos excelentes datos macroeconómicos".
Durante el segundo trimestre, la demanda estatal aportó 0,3 puntos al crecimiento, mientras que la externa aportó 0,5. En este sentido, y entre abril y junio, el gasto del consumo final de los hogares creció un 0,3% trimestral, mientras que la de las administraciones públicas lo hizo en un 0,2%. Por su parte, la formación bruta de capital subió un 0,3%.
El gasto del consumo final de los hogares creció un 0,3% trimestral
Los datos del INE también certifican un aumento de las exportaciones de bienes y servicios del 1,2%, con una caída del 0,2% en las importaciones.
En cuanto a la oferta, la industria creció un 0,4% intertrimestral, con la manufacturera moderando su aumento en 1,2 puntos hasta el 1,1% de incremento. La construcción creció un 0,1%, 1,7 puntos menos que en el trimestre anterior, mientras que el sector servicios, con la vista ya puesta en la temporada de verano, aumentó cinco décimas hasta el 0,9%. En cambio, las ramas de los sectores primarios cayeron un 1,2%.