
El pasado 28 de enero el gigantesco mundo de las grandes franquicias de videojuegos sufrió un zarandeo. Nintendo, durante dos décadas y media fiel a las limitadas fòrmules que habían marcado la historia de su franquicia de cabecera, decidió cambiar el paradigma. El lanzamiento al mercado de Pokémon Legends: Arceus, una nueva historia de los populares monstruos de bolsillo que marcan el ritmo de los gigantes del sector década detrás década, va suponer la primera expedición de la franquicia hacia un nuevo lenguaje. El tercero de la marca a la última generación de consolas de la tecnológica japonesa, Arceus plantea la exploración de un mundo anterior a la convivencia pacífica entre humanos y Pokémon. Ha hecho falta un cuarto de siglo para adentrarse en esta nueva frontera temática, pero ¿cómo ha llegado la marca hasta este punto?
Pokémon nace en 1996 de la mano del diseñador Satoshi Tajiri. El nombre del protagonista de la serie, que llegó a occidente como Ash, es, de hecho, Satoshi; y el de su rival, conocido aquí coma Gary, es originalmente Shigeru, en honor de su mentor y actual Consejero Creativo de Nintendo Shigeru Miyamoto. Tajiri es el fundador de Game Freak, la primera empresa que gestionó la marca de Pokémon, y actualmente un tercio del gran conglomerado encargado de las licencias, The Pokémon Company. La multinacional, participada a partes iguales por la compañía de Tajiri, Nintendo y Creatures – productora del famoso juego de cartas de la franquicia – dejó de publicar sus cifras de ingresos hace años, pero la estimación es que la compañía genera un valor de 1.500 millones de dólares el año, unos 1.320 millones de euros. Como subsidiaria de Nintendo, The Pokémon Compañero forma parte del valor del gigante japonés, que ha mostrado un crecimiento de su valor de mercado del 161,3%, hasta los 60.000 millones de dólares, unos 52.000 millones de euros, con un valor por acción superior a los 53 euros.
Pokémon hace 25 años con 81.000 millones de euros en ventas globales
Las ventas de Pokémon, en todos sus formatos, la convierten, con una sana diferencia, en la marca audiovisual más importante de la historia. Según varios estudios, de hecho, la línea de los monstruos de bolsillo habría ingresado unos 92.121 millones de dólares en los 25 años que lleva activa y al mercado, unos 81.000 millones de euros. Las ventas de sus juegos, el principal motor de los beneficios de la empresa, acompañan estas cifras de negocio: según la misma compañía, desde los primeros cuatro títulos – Amarillo, Rojo, Verde y Azul – hasta el último lanzamiento, los juegos de Pokémon han vendido un total de 380 millones de unidades en todo el mundo.
Como marcador de referencia, su último título, el ya mencionado Pokémon Legends: Arceus, logró, según cifras oficiales de la compañía, unas ventas de seis millones y medio de unidades durante su primera semana – solo 1,5 millones en Japón, algo que demuestra el carácter global de la marca. Esta cifra, que desde la compañía consideraron un éxito, está lejos de llegar a los niveles de los Pokémons más vendidos. Las ediciones originales – de las cuales solo tres llegaron a Occidente – han vendido un total de 45 millones de unidades en todo el mundo, con un valor aproximado de 1.517 millones de euros – unos 1.725 millones de dólares. La longevidad de la marca se demuestra con el hecho que el segundo de la clasificación es, de hecho, uno de los últimos títulos publicados: Pokémon Espada y Escudo, con cerca de 24 millones de copias vendidas, superando el antiguo título de referencia, el último de la GameBoy Color, Oro y Plata, con unos 23 millones de juegos vendidos.
Multimedia
El valor de Pokémon reside, además, en su multiplicidad de propuestas. Mientras que los juegos son – y han sido siempre – el producto nuclear de la franquicia, su expansión hacia otros medios ha sido clave para los buenos resultados. Uno de los principales mercados es, de hecho, el de las trading cards, uno de los juegos de cartas mejor valorados por los coleccionistas. Según los datos publicados por la compañía, el total de cartas vendidas desde su lanzamiento en 1998 ha estado de unos 34.000 millones de unidades. A pesar de que las cifras de ventas más recientes todavía no están publicadas, durante el primer año de la pandemia Creatures – filial y participada de Nintendo encargada del juego de cartas – imprimió unos 3.500 millones de nuevas unidades. El mercado de las trading cards es, además, el más dado a la nostalgia. Los precios de algunas de las cartas más caras y buscadas de la colección se han disparado con los años, hasta el punto que la carta promocional de Pikachu Illustrator de la primera edición se llegó a vender en 2021 por 375.000 dólares, unos 330.000 euros al cambio.
El salto a otras pantallas también ha sido especialmente beneficioso para la franquicia, que ha registrado buenos números también en el celuloide. La primera película de acción real, Pokémon: Detective Pikachu, estrenada en 2018, consiguió una box office de 432 millones de dólares, unos 380 millones de euros. La apuesta por los dispositivos móviles también ha funcionado a la compañía japonesa, especialmente con el juego PokémonGO. La famosa aplicación de realidad aumentada ve acercó los 2020 a los 2.000 millones de dólares en facturación (unos 1.760 millones de euros), mientras que en 2021 logró unos 795 millones de euros solo en microtransaccions internas, según el portal de investigación Statista.
El año 2021, además, fue uno de especial éxito para la marca en todos sus frentes. Durante el ejercicio que marcó los 25 años de la empresa, especialmente a Europa, donde disparó sus ventas globales en muchos de los principales mercados. El de los juguetes fue un sector de referencia para la marca. El primer juego de tabla basado en las trading cards, Pokémon Academia de Combate, logró unos cinco millones de euros en ventas al continente. Según ha comunicado la compañía, los crecimientos del negocio a mercados cómo Alemania, Bélgica o los Países Bajos superaron el 100 % en términos interanuales. Además, la frontera europea de la compañía se expande el 2022 a Europa del Este con una campaña centrada, precisamente, al juego de cartas, con que, según el VP de Ventas de JCC Pokémon Europa SimonBenton, la compañía espera "aumentar sus horizontes". La IP, así, no para de crecer, y con 898 pokémons en las diferentes regiones de los videojuegos, no hace más que ampliar la base de usuarios que, en un eslogan especialmente vive, quieren hacerse con todos.