El aeropuerto del Prat ha cerrado el mes de agosto con 4,9 millones de pasajeros, mayoritariamente de los vuelos comerciales, una cifra que representa un incremento de un 11,4% en comparación con el mismo mes del 2022. Ahora bien, los datos también apuntan que este movimiento de personas no llega a los niveles previos a la pandemia. Lejos de las operaciones de despegue y aterrizaje, así como el ajetreo por las terminales, Aena intenta captar nuevas vías de negocio a partir de ideas innovadoras que solucionan problemáticas cotidianas o estructurales de las instalaciones que gestiona la empresa.
En el año 2021 se dio el pistoletazo de salida del programa Aena Ventures, una iniciativa donde 254 firmas de 33 nacionalidades presentaron un proyecto. De esta primera selección, solo cinco llegaron a la fase final con la exigencia de mejorar los siguientes aspectos: desplazamientos al aeropuerto, comunicación con el pasajero y sostenibilidad.
Durante los primeros ocho meses del año 2023, el equipamiento ha registrado un tráfico acumulado de poco más de 33 millones de personas. Sin dejar de banda los efectos del Covid, a finales de mayo, la Cambra de Comerç de Barcelona publicó un estudio donde se detallaba, entre otros aspectos, cómo el aeropuerto ha recuperado 46 de las 47 rutas intercontinentales que estaban operativas en 2019. El mismo documento plantea que Barcelona es el segundo aeropuerto del continente con más tráfico de destino u origen, solamente por detrás de Heathrow (Londres). Tampoco se puede obviar que la recuperación de la actividad en el Prat está marcada por el debate político alrededor de su ampliación.
Barcelona, principal campo de pruebas
Desde el minuto cero del proyecto Aena Ventures, Barcelona ha sido uno de los principales campos de pruebas. En los últimos tiempos, la firma británica Airbot Technology ha desarrollado un punto de información interactivo para resolver todas las dudas de los pasajeros que transitan por las instalaciones. Chinespain, el marketplace de turismo exclusivo para el mercado asiático, creó un aplicativo con información de interés sobre el aeropuerto. El rasgo destacado de esta iniciativa es la conexión con otras plataformas de gran peso cómo Alipay y WeChat.
En otro orden, también en Barcelona, Meep, firma especializada en movilidad sostenible, activó una herramienta tecnológica para orientar el pasajero dentro del aeropuerto y, a la vez, acercarle las principales vías de conectividad a la capital catalana y su entorno más próximo. Más allá de los 50.000 euros iniciales para participar en el programa, las firmas finalistas tienen opción a ganar contratos de hasta dos millones de euros.
Las instalaciones donde se desarrolla el programa de Aena Ventures están repartidas entre una antigua torre de control de la terminal 4 y unas oficinas del operador aeroportuario situadas en el centro de Madrid. De cara a la segunda edición, la dirección de Aena ya estudia más de 500 propuestas presentadas. Este año, el propósito es captar talento relacionado con la programación de datos, la eficiencia aeroportuaria o el mundo virtual.
El camino propio de la Generalitat
Recientemente, la Generalitat ha presentado su propia hoja de ruta para innovar en el ámbito aeroportuario. Con una inversión de 3,2 millones de euros, en gran parte asumida por Aeroports de Catalunya y los fondos Next Generation, el Govern quiere convertir el aeropuerto de Lleida-Alguaire en un hub de producción de energía verde. El horizonte es que en 2025, esta instalación sea energéticamente autosuficiente con una producción de 50 toneladas anuales de hidrógeno.
Las obras contemplan la instalación de un electrolizador para llevar a cabo la transformación de la energía y una hidrolinera para garantizar el suministro. EVARM, firma de ingeniería con sede en Sant Boi de Llobregat, y Aldoratech, empresa de Sabadell especializada en aplicaciones industriales para drones, son, junto con la Universitat Politècnica de Catalunya y la Universitat Rovira Virgili, los socios que acompañan la Generalitat en este viaje.
