
14
de Noviembre
de
2014
De sus instalacioneshan salido las cocinas que han equipado los mejores restaurantes de los rankings gastronómicos. La Bodega de CanRoca , el Santo Pau de Carme Ruscalleda, el Ábaco de Barcelona, el desaparecido Hierva de Ferran Adrià y hasta una cuadragésima de estrellas Michelin forman parte de la lista de clientes de la empresa Garcia & Casademont. Ahora, pero, arrastrada por la crisis, la compañía de cocinas se ha visto forzada a presentar concurso de acreedores.
La firma, con sede en Figueres, arrastra una deuda de dos millones de euros con bancos y proveedores . Sobre todo a raíz de la inversión por unas nuevas naves ahora hace diez años. El director general, JoaquimCasademont, argumenta que el concurso ha sido la única opción, después de ver como sus ventas caían cada vez más, pero que la intención es salirse.
La empresa nació el 1979 y, en un primer momento, comercializaba máquinas de hielo y café para bares y restaurantes. Diez años más tarde, la firma decidió especializarse a fabricar cocinas para restaurantes (sobre todo, de gama alta). El Motel de Figueres fue su primer cliente y, a partir de aquí, empezó toda la estrella de grandes chefs que apostaron por la firma de Figueres a la hora de equipar las cocinas de sus restaurantes. Muchos de ellos, no sólo con un una, sino también con dos -o incluso tres- estrellas Michelin.
De sus naveshan salido las cocinas que se han instalado a restaurantes galardonados por la prestigiosa guía como la Bodega de Can Roca de Girona, el Santo Pau de Sant Pol de Mar (Maresme), Los Tinars de Llagostera (Gironès), el Miramar de Lanza (Alt Empordà), la Fonda Xesc de Gombrèn (Ripollès), Las Coles de Olot, los barceloneses Tragaluz, Ábaco, La Sarte y Saúco o los desaparecidos Hierva de Ferran Adrià y Can Fabes de Santi Santamaria.
Garcia & Casademont, pero, no sólo ha equipado las cocinas de los grandes chefs catalanes. También ha instalado cocinas en todo el Estado (Valencia, el País Vasco o Madrid) y en restaurantes europeos de categoría (entre otros, en Francia, Holanda, Noruega, Italia, Bélgica o Alemania).
De 9 millones de euros de facturación a 2,8
Ahora, pero, la crisis económica también le ha acabado pasando factura. "En pocos años hemos pasado de facturar 9 millones de euros a cerrar el pasado con 2.850.000 euros", explica su director general. Garcia & Casademont ha intentado adaptarse a la situación saliente al exterior (entre otros, ha trabajado en el Perú) y reduciendo plantilla (de los 41 trabajadores del 2012 ahoratiene sólo ocho). Pero aún así, no ha habido bastante para poder hacer frente a la deuda que arrastra, que sube a casi 2 millones de euros.
De esta cifra, Garcia & Casademont diez 400.000 euros a los proveedores. Los 1,5 millones restantes son de la hipoteca de las dos naves que tiene en el polígono El Ferial de Figueres. Las instalaciones suman 4.000 metros cuadrados y se levantaron ahora hace unos diez años. Y aquí, como precisa Joaquim Casademont, es donde hay el grueso del problema, porque la empresa tiene que pagar intereses al banco "que se ensartan hasta el 11%".
"Sólo para hacerse una idea, en 2012 facturé 6 millones de euros yacabé pagando 512.000 en intereses y comisiones", explica el director y cofundador de la empresa. Esto, ligado a la bajada de pedidos y al hecho que hay clientes que no han pagado, ha dejado la empresa sin liquidez. "Instalé cocinas para restaurantes de Barcelona que ya han cerrado, se han vendido la maquinaria y no me han pagado", argumenta Casademont.
Pla de viabilidad
Después de presentar concurso de acreedores, Joaquim Casademont explica que su intención es volver a levantar cabeza. "Pienso volver hasta el último céntimo a los proveedores", indica el director general. Su intención es quedar limpio con estos deudores a finales del 2015, pero Casademont también admite que allá donde habrá que negociar más será con el banco.
La intención de Garcia & Casademont es sacarse del encima las actuales naves (valoradas en 3,5 millones de euros) y trasladarse a otra de más pequeña, dentro del mismo polígono de Figueres. "El mercado es el mercado,hubo una época en que no daba al alcance y me trasladé aquí, pero ahora no necesito tanto de espacio", explica el director general.
Casademont explica que la empresa es viable y que, de hecho, no ha dejado de trabajar. Ya tiene ligados dos proyectos en Francia, uno en la Bretaña y un segundo en Montpellier, y también se plantea extenderse enlaAmérica del Sur, a países como Colombia. "Mi intención es no dejarla perder, porque estamos hablando de una empresa que hace más de 30 años que existe", concluye el director general.
La firma, con sede en Figueres, arrastra una deuda de dos millones de euros con bancos y proveedores . Sobre todo a raíz de la inversión por unas nuevas naves ahora hace diez años. El director general, JoaquimCasademont, argumenta que el concurso ha sido la única opción, después de ver como sus ventas caían cada vez más, pero que la intención es salirse.
La empresa nació el 1979 y, en un primer momento, comercializaba máquinas de hielo y café para bares y restaurantes. Diez años más tarde, la firma decidió especializarse a fabricar cocinas para restaurantes (sobre todo, de gama alta). El Motel de Figueres fue su primer cliente y, a partir de aquí, empezó toda la estrella de grandes chefs que apostaron por la firma de Figueres a la hora de equipar las cocinas de sus restaurantes. Muchos de ellos, no sólo con un una, sino también con dos -o incluso tres- estrellas Michelin.
De sus naveshan salido las cocinas que se han instalado a restaurantes galardonados por la prestigiosa guía como la Bodega de Can Roca de Girona, el Santo Pau de Sant Pol de Mar (Maresme), Los Tinars de Llagostera (Gironès), el Miramar de Lanza (Alt Empordà), la Fonda Xesc de Gombrèn (Ripollès), Las Coles de Olot, los barceloneses Tragaluz, Ábaco, La Sarte y Saúco o los desaparecidos Hierva de Ferran Adrià y Can Fabes de Santi Santamaria.
Garcia & Casademont, pero, no sólo ha equipado las cocinas de los grandes chefs catalanes. También ha instalado cocinas en todo el Estado (Valencia, el País Vasco o Madrid) y en restaurantes europeos de categoría (entre otros, en Francia, Holanda, Noruega, Italia, Bélgica o Alemania).
De 9 millones de euros de facturación a 2,8
Ahora, pero, la crisis económica también le ha acabado pasando factura. "En pocos años hemos pasado de facturar 9 millones de euros a cerrar el pasado con 2.850.000 euros", explica su director general. Garcia & Casademont ha intentado adaptarse a la situación saliente al exterior (entre otros, ha trabajado en el Perú) y reduciendo plantilla (de los 41 trabajadores del 2012 ahoratiene sólo ocho). Pero aún así, no ha habido bastante para poder hacer frente a la deuda que arrastra, que sube a casi 2 millones de euros.
De esta cifra, Garcia & Casademont diez 400.000 euros a los proveedores. Los 1,5 millones restantes son de la hipoteca de las dos naves que tiene en el polígono El Ferial de Figueres. Las instalaciones suman 4.000 metros cuadrados y se levantaron ahora hace unos diez años. Y aquí, como precisa Joaquim Casademont, es donde hay el grueso del problema, porque la empresa tiene que pagar intereses al banco "que se ensartan hasta el 11%".
"Sólo para hacerse una idea, en 2012 facturé 6 millones de euros yacabé pagando 512.000 en intereses y comisiones", explica el director y cofundador de la empresa. Esto, ligado a la bajada de pedidos y al hecho que hay clientes que no han pagado, ha dejado la empresa sin liquidez. "Instalé cocinas para restaurantes de Barcelona que ya han cerrado, se han vendido la maquinaria y no me han pagado", argumenta Casademont.
Pla de viabilidad
Después de presentar concurso de acreedores, Joaquim Casademont explica que su intención es volver a levantar cabeza. "Pienso volver hasta el último céntimo a los proveedores", indica el director general. Su intención es quedar limpio con estos deudores a finales del 2015, pero Casademont también admite que allá donde habrá que negociar más será con el banco.
La intención de Garcia & Casademont es sacarse del encima las actuales naves (valoradas en 3,5 millones de euros) y trasladarse a otra de más pequeña, dentro del mismo polígono de Figueres. "El mercado es el mercado,hubo una época en que no daba al alcance y me trasladé aquí, pero ahora no necesito tanto de espacio", explica el director general.
Casademont explica que la empresa es viable y que, de hecho, no ha dejado de trabajar. Ya tiene ligados dos proyectos en Francia, uno en la Bretaña y un segundo en Montpellier, y también se plantea extenderse enlaAmérica del Sur, a países como Colombia. "Mi intención es no dejarla perder, porque estamos hablando de una empresa que hace más de 30 años que existe", concluye el director general.