
15
de Julio
de
2013
Act.
16
de Julio
de
2013
La excelencia, desde finales de los años 80, es un valor emergente en el ámbito económico. Desde entonces las marcas buscan a través de premios, certificados de calidad y acreditaciones obtener esta preciada etiqueta. El término, pero, nuevo es paso nuevo. Aristòril ya definía "la excelencia como el arte que se consigue a través del entrenamiento" y destacaba que "no se trata de un acto, sino un hábito". Una definición que el filósofo y teólogo, Francesc Torralba moderniza describiendo la excelencia como "la intolerancia a la mediocridad y a la inercia".
Trabajo y trabajo
A la excelencia no sellega con un golpe de suerte, sino después de haber hecho una cursa de fondo. Y para mantenerla hace falta la aplicación otros valores. "La excelencia no se consigue sin constancia, horas de trabajo, esfuerzo e innovación", apunta el experto en historia económica, FrancescCabana.
Además, también hace falta "rigor, perseverancia, autocrítica, superar una constante lucha contra la fatiga y la pereza, una formación permanente, espíritu abierto y aprender del saber hacer de las generaciones más grandes", añade Torralba del Pinar. Valores igualmente necesarios para mantenerla, puesto que los certificados y las acreditaciones se tienen que renovar.
Un buen equipo humano
Pero, cuál es el principal secreto de la excelencia? "El equipo humano siempre es la parte más importante de la empresa" afirma JulioPrada, director general y unos de los socios de la tecnológica Inbenta; marca catalana de software con sede en Estados Unidos (Silicon Valley), Francia y Brasil y ganadora durante dos años consecutivos del Premio European Seal of e-Excellence.
Respuesta que comparten Miguel Angel Bonachera y Sergi Audivert, cofundadores y consejeros delegados de la gerundense AB-Bióticos, empresa del campo de la biotecnología que comercializa en varios países de Europa, América y Asia. "Sin un buen equipo, una empresa puede fracasar a pesar de tener un producto nuevo y especializado", aseguran.
Curiosamente, los empresarios, como Aristóteles, continúan pensando que es una cuestión de hábitos. "Cuando contratamos alguien miramos el expediente académico" explica Bonachera "porque las personas que tienen excelentes ya han demostrado antes ser trabajadoras y responsables". En este sentido, desde Inbenta, advierten que los valores "no pueden ser impuestos por la dirección si nó que los tienen que ir reconfigurant los propios trabajadores".
Un valor en alza
"Si hablamos de excelencia quiere decir que las cosas se están haciendo bien", afirma Prada. "Y no hay duda que vivir en un país en el cual cada día su gente se esfuerza para hacer el trabajo mejor, es un activo muy potente", dice Torralba del Pinar. Y es que hoy la excelencia "ha pasado de ser un lujo a una aspiración absolutamente necesaria" porque una empresa pueda ser competitiva. De hecho, se trata de un valor que distingue la empresa que triunfa de la que fracasa.
Ahora bien, aunque sólo algunas empresas podrán lograr certificados de calidad o premios, nadie puede excusarse de intentar lograr la excelencia. Es importante tener la actitud, aunque no todo el mundollegue. "El excelente no es la persona que se distingue de los otros, sino quienes hace bien el trabajo y, por lo tanto, tiene que ser tanto excelente un Nobel como un peón", sentencia Cabana.
La sección Valores de empresa es una colaboración de la revista Valores con VIAempresa
Trabajo y trabajo
A la excelencia no sellega con un golpe de suerte, sino después de haber hecho una cursa de fondo. Y para mantenerla hace falta la aplicación otros valores. "La excelencia no se consigue sin constancia, horas de trabajo, esfuerzo e innovación", apunta el experto en historia económica, FrancescCabana.
Además, también hace falta "rigor, perseverancia, autocrítica, superar una constante lucha contra la fatiga y la pereza, una formación permanente, espíritu abierto y aprender del saber hacer de las generaciones más grandes", añade Torralba del Pinar. Valores igualmente necesarios para mantenerla, puesto que los certificados y las acreditaciones se tienen que renovar.
Un buen equipo humano
Pero, cuál es el principal secreto de la excelencia? "El equipo humano siempre es la parte más importante de la empresa" afirma JulioPrada, director general y unos de los socios de la tecnológica Inbenta; marca catalana de software con sede en Estados Unidos (Silicon Valley), Francia y Brasil y ganadora durante dos años consecutivos del Premio European Seal of e-Excellence.
Respuesta que comparten Miguel Angel Bonachera y Sergi Audivert, cofundadores y consejeros delegados de la gerundense AB-Bióticos, empresa del campo de la biotecnología que comercializa en varios países de Europa, América y Asia. "Sin un buen equipo, una empresa puede fracasar a pesar de tener un producto nuevo y especializado", aseguran.
Curiosamente, los empresarios, como Aristóteles, continúan pensando que es una cuestión de hábitos. "Cuando contratamos alguien miramos el expediente académico" explica Bonachera "porque las personas que tienen excelentes ya han demostrado antes ser trabajadoras y responsables". En este sentido, desde Inbenta, advierten que los valores "no pueden ser impuestos por la dirección si nó que los tienen que ir reconfigurant los propios trabajadores".
Un valor en alza
"Si hablamos de excelencia quiere decir que las cosas se están haciendo bien", afirma Prada. "Y no hay duda que vivir en un país en el cual cada día su gente se esfuerza para hacer el trabajo mejor, es un activo muy potente", dice Torralba del Pinar. Y es que hoy la excelencia "ha pasado de ser un lujo a una aspiración absolutamente necesaria" porque una empresa pueda ser competitiva. De hecho, se trata de un valor que distingue la empresa que triunfa de la que fracasa.
Ahora bien, aunque sólo algunas empresas podrán lograr certificados de calidad o premios, nadie puede excusarse de intentar lograr la excelencia. Es importante tener la actitud, aunque no todo el mundollegue. "El excelente no es la persona que se distingue de los otros, sino quienes hace bien el trabajo y, por lo tanto, tiene que ser tanto excelente un Nobel como un peón", sentencia Cabana.
La sección Valores de empresa es una colaboración de la revista Valores con VIAempresa