Las empresas con estrategia LGTBI, más competitivas

El informe 'Aequalis' analiza las buenas prácticas de 13 grandes compañías para que sean referentes

La presentación del informe 'Aequalis' sobre las buenas prácticas en diversidad LGTBI de las empresas | ACN La presentación del informe 'Aequalis' sobre las buenas prácticas en diversidad LGTBI de las empresas | ACN

Un informe que analiza la gestión de la diversidad LGTBI en las empresas concluye que las que tienen no sólo buenas prácticas sino estrategias consolidadas en la materia pueden tener más éxito y obtener beneficios en su negocio. El documento Aequalis 2018 analiza la gestión de la diversidad interna en 13 grandes empresas para convertirlas en referentes de buenas estrategias en la materia. El documento asegura que existen muchos motivos para que las empresas incluyan la diversidad LGBTI en sus agendas como ajustarse a la legalidad, el hecho de que la discriminación afecta a los derechos laborales de los trabajadores, o ser atractivas por el nicho de mercado LGBTI, creador de tendencias.

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Según el informe, al contrario de lo que pasa en las culturas anglosajonas, donde la inclusión empieza por las grandes corporaciones, cala en la sociedad y se materializa en avances legislativos, en el Estado español el itinerario es a la inversa. Se ha empezado por las leyes, se ha continuado por la sensibilización de la sociedad y ahora llega la inclusión de la diversidad LGBTI en el puesto de trabajo.

"La excelencia en la gestión de la diversidad en las empresas tiene que emanar de la dirección general, tiene que ser transversal y tiene que verse como una ventaja competitiva y no como un coste", dice Margarita Alonso, directora académica del informe.

Alonso ha instado a seguir trabajando y ha dicho que las empresas no pueden hacer sólo actos de cara a la galería, sino que tienen que tener estrategias claras y consolidadas. Estas estrategias pasan, según ella, por buscar vínculos entre la buena gestión de la diversidad interna y el negocio, pasar de una visión táctica a una visión estratégica. Sin embargo, ha recordado que la gestión de la diversidad no es activismo y que las empresas no son ONG.

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