El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, apuesta por los liderazgos institucionales basados en valores, que huyan del paternalismo y que actúen con grandes dosis de humildad intelectual, como clave del éxito de las organizaciones. Así lo defendió este miércoles cuando recibió el premio al mejor empresario del año 2021 concedido por la UPF-Barcelona School of Management.
El rector de la Universitat Pompeu Fabra, Oriol Amat, justificó la entrega del premio a Goirigolzarri por su "dilatada trayectoria de liderazgo" y por la "contribución decisiva" en la fusión de CaixaBank con Bankia culminada el año pasado. Indicó que si esta fusión no se hubiera llevado a cabo con éxito habría provocado un colapso sistémico en el sector bancario.
José Ignacio Goirigolzarri, presidente de CaixaBank: "no creo en los liderazgos personalistas o carismáticos porque, aunque pueden tener resultados en momentos puntuales, comportan peligros para la sostenibilidad de los proyectos"
En su discurso, Goirigolzarri subrayó que el verdadero destinatario del premio "no soy yo sino el conjunto del equipo de CaixaBank" porque "no creo en los liderazgos personalistes o carismáticos". Indicó que este tipo de liderazgos, aunque pueden tener resultados en momentos puntuales, comportan "peligros para la sostenibilidad de los proyectos". Por eso, apostó por los "liderazgos institucionales, una cultura basada en fuertes valores que inspiren la estrategia de la empresa". "No hay proyectos sostenibles sin valores arraigados", si bien reconoció que, para mantenerse en el tiempo, estas proyectos deben ser rentables. "Para ser sostenible en el tiempo necesitan tener una rentabilidad por encima del coste de capital, contar con clientes satisfechos y con un equipo de personas comprometidos con el proyecto", precisó.
Liderazgos institucionales
Estos liderazgos institucionales deben tener dos referencias básicas: "una cultura basada en fuertes valores, que inspiren la estrategia de la empresa, y la creación de una red de líderes locales". En este sentido, indicó que hay que "crear un caldo de cultivo en el que se generen líderes locales, responsables de desarrollar la estrategia empresarial dentro de una cultura corporativa muy arraigada". "Cada persona del equipo se debe sentir como un actor y no como un espectador del éxito de la empresa". Y defendió "el orgullo de pertenencia" a la empresa.
Y respecto a los principios y valores, precisó que, por definición, "derivan de una determinada concepción de la ética empresarial. Y, en consecuencia, deben estar en el centro del proceso de definición de la estrategia de una empresa. O, dicho de otro modo, los principios y valores no pueden reducirse a ser simples restricciones o limitaciones en la definición de la estrategia".
Más consejos
Todavía desgranó más consejos para conseguir la sostenibilidad de los liderazgos: "el paternalismo es bueno a corto plazo pero letal a largo plazo", "nadie puede exigir una cosa que no esté dispuesta a darla él mismo" o que "una organización necesita altas dosis de humildad intelectual porque esto es lo contrario al dogmatismo".
Entre el público asistente a la primera edición de la entrega del premio al empresario del año de la UPF-Barcelona Shool of Management estaba la delegada del Gobierno en Catalunya, Maria Eugènia Gay; la sindica de greuges, Esther Giménez-Salinas; el residente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre; el presidente del Consejo de Cámaras de Comercio de Catalunya y de la Girona, Jaume Fàbrega; y también el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar.
En una nota distribuida antes de la ceremonia, la UPF-BSM justificó el premio a Goirigolzarri al recordar que "ha pilotado de manera sensible e inteligente la principal fusión bancaria europea, después de una carrera impoluta al sector y después de haber asegurado el retorno a la viabilidad de una de las entidades [Bankia] que requirió el apoyo del contribuyente a raíz de la gran crisis financiera de hace unos años".