El operador privado de alta velocidad Ilsa ha publicado las primeras ofertas de trabajo para 100 maquinistas para sus trenes de alta velocidad, que empezarán a prestar servicio en el Estado a partir de 2022. Según la compañía, entre los requisitos indispensables están disponer de una licencia de conducción de vehículos ferroviarios de categoría B y tener experiencia profesional demostrada de entre dos y seis años en la Red Ferroviaria de Interés General, además de un certificado de aptitud psicofísico. El proceso de selección empezará el mes que viene y finalizará en julio, un mes antes de la llegada del primer tren para iniciar el proceso de homologación.
La compañía explica en un comunicado que ofrece a sus maquinistas un programa integral de desarrollo de carrera basado en un contrato indefinido con "una remuneración atractiva y con una fuerte apuesta por la formación, la diversidad y la carrera profesional". Además de las plazas de maquinista, Ilsa pondrá en marcha en los próximos meses un nuevo proceso de selección para incorporar a más de 500 personas al área de atención al cliente.
El operador fue una de las tres empresas que ganó el concurso convocado por Adif en el marco de la liberalización de la alta velocidad, vigente desde el 14 de diciembre. De momento, Renfe se mantiene como la única empresa que presta el servicio de alta velocidad a la espera de la llegada de la francesa Ouigo esta primavera.
Ilsa empezará a prestar servicio en 2022 en la mayor parte de las rutas de alta velocidad y conectará Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga, Córdoba, València, Alacant y Zaragoza. Concretamente, se adjudicó el paquete B –el segundo más importante en número de surcos después de Renfe-.
La compañía ha invertido 800 millones de euros en la construcción de 23 trenes nuevos de última generación a cargo de Hitachi y Bombardier en Italia, donde se están llevando a cabo los trabajos de acoplamiento y construcción, y en el Estado, donde se fabrican los motores de propulsión desde la planta que tiene Bombardier en el País Vasco. Cada unidad dispondrá de 465 plazas y el 97% de los materiales serán reciclados.