Afrontar los problemas que sufren todas las empresas, pero desde una perspectiva y soluciones globales desde la experiencia del éxito de las firmas. Con estos elementos, en pleno debate sobre los déficits que arrastran las empresas leridanas por la carencia de infraestructuras o la falta de suelo logístico, el objetivo es que "la gente se quede en el territorio con oportunidades para desarrollar proyectos empresariales". Este ruego del presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn, que ha presentado la mesa redonda 'Experiencias empresariales de éxito', que ha servido para iniciar el XXXIII Encuentro Empresarial al Pirineu en la Seu d'Urgell, lo han recibido los representantes de las compañías Ilerna Online, Exquisitarium, Pinsos Urna y Culinarium. Ante un auditorio de casi 650 empresarios, récord de participación en la Trobada, han compartido sus secretos. Entre ellos, destacan la innovación, la internacionalización, la proximidad, la formación, la diferenciación o la atracción de talento.
Ser líderes en el ámbito de la Formación Profesional on-line en un entorno, cómo el del Estado español, en que este tipo de enseñanza no estaba muy implantado. Es la trayectoria que ha dibujado la confundadora de Ilerna Online, Vírginia Agelet. Nacida a partir de una 'spin-off' de una academia de FP tradicional, la compañía alternó hace una década un centro físico de formación con la enseñanza a distancia. "En el ámbito del modelo, no nos queda otro que innovar cada seis meses", ha expuesto Agelet. Acompañada de un proceso progresivo de internacionalización, Agelet ha recordado que la plantilla, "el secreto de nuestro éxito y el verdadero motor de la compañía", está formada por casi 500 personas. Igual que Ilerna se marca el reto de innovar y buscar al cliente cada seis meses, su cofundadora ha explicado que, si los resultados acompañan, también lo celebran con un encuentro social cada medio año.
Congelados 'made in Oliana'
En Oliana, una población situada a 40 kilómetros de la Seu d'Urgell, lugar de celebración de la Trobada, nació Exquisitarium, una firma orientada a los platos preparados de quinta gama para el canal horeca. Su CEO, Sònia Plana, ha aludido a que "nos desarrollamos en un escenario donde se defendía el producto fresco y se rechazaba el congelado". De estas dificultades, en palabras de Plana, "hicimos fortalezas, ya que el universo es mental". En resultados concretos, Exquisitarium consiguió exportar un producto de referencia para el mercado asiático, como el arroz, a China. El cierre de la restauración hace dos años por el confinamiento de la Covid-19 impulsó una nueva reorientación de la compañía. "El cambio de paradigma lo tuvimos apostando por un crecimiento sustentado en la innovación y la inversión en tecnología para escalar y mejorar los procesos productivos. No podíamos asumir que nuestro personal hiciera más canelones por un aumento de la demanda".
Sònia Plana (Exquisitarium): "El cambio de paradigma lo tuvimos con la innovación y la inversión en tecnología para escalar y mejorar los procesos"
Exquisitarium, que cuenta con una plantilla de 50 personas, de las que un 85 % son mujeres, reivindica la innovación. Tal como asegura Sònia Plana, "en nuestra empresa, no existe el departamento de R+D, sino que la innovación está presente a todos los ámbitos". Plana ha defendido que las amenazas y las oportunidades son retos. Por este motivo, ha enumerado las ventajas en el ámbito de la conciliación familiar y la vinculación laboral de estar a Oliana en vez de ubicarse en Barcelona.
La atracción del talento ha sido el eje sobre el que ha pivotado la intervención de Josep Ribalta, CEO de Pinsos Ursa, fabricante de piensos para el sector vacuno y ovino. Además del crecimiento rápido, apoyado en la exportación en 16 países, que ha permitido la multiplicación de la producción, que se ha incrementado 40 veces en 20 años, Ribalta ha resaltado la importancia de atraer talento para consolidar las trayectorias empresariales.
Delfí Robinat (Culinarium): "Gestionar una empresa es una carrera de obstáculos"
Superar incendios
Una compañía familiar de cinco generaciones, con más de 150 años de historia, especializada en la venta de artículos de cocina y mesa, nacida a Tàrrega. El ejemplo de Casa Delfín, que se ha diversificado con Culinarium, que ha facilitado la implantación de tiendas físicas, se ha producido después de momentos de verdaderas dificultades. Entre estos, su CEO, Delfí Robinat, ha evocado el incendio que destruyó la tienda de Tàrrega en 1970, cuando él solo tenía seis años. Desde entonces, varias crisis, márgenes positivos o ventas disparadas. "Gestionar una empresa es una carrera de obstáculos", ha confesado Robinat.
Más allá de los resultados, Delfí Robinat ha remarcado que las "empresas tenemos que aprender a formar, acompañar, ayudar y gestionar conflictos". Todo esto, según el director general de Culinarium, desde "la proximidad, que nos hace diferentes". 'Innovación y la sostenibilidad, palancas del crecimiento empresarial', el lema de la Trobada de este año, ha sido el mensaje de estos empresarios. Los representantes de las compañías han mostrado el orgullo de ser y crear riqueza en el territorio, pero no se han olvidado de reclamar más infraestructuras y suelo industrial para poder continuar innovando.