• Empresa
  • John Carlin: "Messi ha sido mi religión, pero me ha defraudado"

John Carlin: "Messi ha sido mi religión, pero me ha defraudado"

El periodista reivindica que "el del Barça es el retorno a la vida más dramático que se ha visto desde Lázaro”

John Carlin en la puerta del Fishhh! | Carolina Santos
John Carlin en la puerta del Fishhh! | Carolina Santos
La Milanesa de Messi
Barcelona
29 de Abril de 2022
Sección patrocinada por Fishhh!

El periodista John Carlin se brindó a charlar con la Milanesa de Messi en el restaurante ‘Fishhh’, propiedad de Lluís de Buen. Una intensa hora de conversación que giró, en buena parte, alrededor del Futbol Club Barcelona, su momento actual y sus protagonistas, presentes o ya ausentes. Fiel a su trayectoria y personalidad, Carlin habló sin medias tintas, de manera directa, y dejó una buena colección de frases y pensamientos que, en muchas ocasiones, nada tienen que ver con el balón, como podrán apreciar en el texto a continuación. Para otros pormenores del encuentro con el celebrado autor de “El factor humano”, en este enlace pueden leer otra crónica de la velada.

 

Hace medio año, usted escribía que el Barça vivía “una nostalgia perversa”. ¿Lo sigue pensando?.

Ya ni me acuerdo, a lo que aspiro cuando escribo un artículo es a reflejar determinada situación en ese momento, no puedo predecir el futuro. Al margen de esa evidencia, creo que si somos ahora honestos, nadie se esperaba esta resurrección tan rápida del Barça y la verdad es que ha sido una sorpresa fantásticamente grata, no sólo para los culés, también para la gente que gusta del buen fútbol. Hace seis meses, el Barça estaba con un pie en la tumba y todo indicaba que iban a tardar, no sé, un par de años hasta recuperar un poquito de competitividad. En ese momento parecía complicado clasificarse para la Liga de Campeones y en eso estábamos todos de acuerdo. No te digo que luchara por evitar el descenso, sino para no protagonizar una temporada nefasta. Bueno, de hecho en la Champions fracasaron con estrépito y el panorama pintaba fatal. Bajo ese estado de cosas, claro, era un momento para sentir nostalgia. Y no sólo entonces, sino en los últimos años, cuando cualquiera guardaba fresco en la memoria ese fantástico equipo que ha sido el mejor que he visto en mi vida y que dirigían Pep Guardiola, Tito Vilanova o Luis Enrique. El contraste entre aquellas imágenes tipo Capilla Sixtina y algo que se había convertido en un graffiti de vagón de tren provocaba que el dolor fuese mayor todavía.

 

Como observador y seguidor del mundo del fútbol, ¿esperaba un hundimiento tan estrepitoso del Barça?.

Tan estrepitoso quizá no, pero creo que el fútbol nos apasiona tanto porque, en ciertos aspectos, es el reflejo de la vida y en la vida, todos pasamos nuestros ciclos, sean las economías o las personas. Por lo tanto, era lógico esperar que algún día acabara aquel fútbol de fantasía, con tantos triunfos obtenidos en cinco, seis, siete años y que llegarían las vacas flacas. Eso era previsible.

“Hace seis meses, el Barça estaba con un pie en la tumba. Xavi está haciendo un trabajo excepcional y hay que reconocerlo”

¿El actual déficit económico del club puede hacerle caer en manos de un fondo de inversión o convertir el Barça en sociedad anónima deportiva?.

La situación deportiva ha cambiado tanto en los últimos meses que incide en el aspecto económico. O sea, la capacidad del Barça para generar ingresos o convencer a los bancos para conseguir préstamos debe ser mucho mayor ahora que hace medio año. Se está construyendo un equipo que va a más. De todos modos, la actual es una situación tan desconocida para el Barça que resulta difícil adaptarse a esta ‘nueva normalidad’. Pero bueno, el caso es que el Barça tiene una deuda del carajo, eso es indudable, y quizá para volver a competir en el máximo nivel europeo seguro que necesitará invertir en grandes jugadores, que son muy caros y piden salarios extravagantes. A mí me ha sorprendido leer en la prensa deportiva que quieren a Haaland. Pienso, ¿cómo es posible? ¡Esto no me cuadra! Y lo sigues viendo a menudo en las portadas. Incluso han hablado de Mbappé… Vamos, que parece un poco ‘Alicia en el país de las maravillas’ hablar de esto… Entonces, Xavi está haciendo un trabajo excepcional, extraordinario y hay que reconocerlo, pero para poder competir con City o Liverpool necesitas un par de fichajes a lo grande aunque, claro, el fútbol siempre nos sorprende y nunca tiene certezas de nada. Pensad en la eliminatoria de Champions entre el Madrid y el PSG, cuando los franceses le dieron un repaso total durante 150 de los 180 minutos, parecían adultos contra niños. Pero de repente conceden un error estúpido y se hunden, quien lo iba a decir… Hablando de fútbol hay que usar mucho la palabra ‘quizá’, eso seguro. Por suerte nos sorprende a menudo.

Para que el Barça inicie otro ciclo ‘virtuoso’, el primer paso consiste en una recuperación deportiva. Esa es la condición previa para conseguir ingresos, por lo que parece.

Esa es una gran verdad, primero hay que tener un modelo de juego, un estilo y todos deben remar en la misma dirección porque, si no muestras eso y pretendes triunfar a base de fichajes estrella, puedes imitar el fenómeno Manchester United. Los ‘red devils’ son hoy, exactamente, todo lo contrario a lo que estamos hablando. Ficharon a Cristiano Ronaldo superilusionados y ahora debe estar muriéndose de pena, peor de ánimos que Messi, lo cual es mucho decir… Es irónico, mira, tanto para Messi como Cristiano, el otoño de su carrera está resultando muy triste, muy decepcionante. Volviendo al United, han invertido auténticas fortunas en fichajes; Maguire, Pogba, Rashford, Bruno Fernandes… buenísimos, unas figuras, pero no hay plan de juego, ni moral, ni estructura. Forman una parábola de cómo no hacer las cosas en fútbol para ir por el buen camino. Por contraste, el Barça ahora construye desde abajo, primero los cimientos y luego ya iremos a por la casa, no empezaremos por el tejado...

¿John Carlin es culé?.

No. Tal como escribí en su momento, mi equipo preferido en los últimos años ha sido Messi aunque, ahora que se ha ido, me ha defraudado un montón, no sólo como jugador. Mi religión ha sido Messi.

“El fútbol también son ciclos y tras los triunfos era previsible que llegaran las vacas flacas”

Para usted, ¿es el mejor futbolista de la historia?.

Esas comparaciones no me gustan, son topicazos. Cada cual tiene su punto de vista según sus afiliaciones tribales, yo vi muchos partidos de Maradona en Argentina cubriéndolos como periodista y comparto eso de que ‘Messi es Maradona cada día’, no sé quién lo dijo…

Más allá del topicazo, Messi ha estado en lo más alto durante quince años, al menos, rindiendo de manera excepcional en cada partido y ese mérito resulta único, comparado con los grandes nombres de todos los tiempos.

La continuidad, claro. A ver, si me hicieras la pregunta sobre quién es mejor, Messi o Cristiano, me levanto y me voy porque ya no te tomo más en serio (risas)… Compararlo con Maradona, Pelé o Di Stéfano, aunque no tengamos tantos testimonios del pasado, me parece correcto. En fin, lo que te digo con contundencia, con claridad empírica, científica, es que Messi ha sido el mejor jugador del siglo XXI y quién no lo vea así, no entiende nada de fútbol. O es del Real Madrid o portugués...

¿Ha podido hacerse una composición de lugar clara sobre lo sucedido para que no continuara en el Barça?.

Tengo la impresión de que no se ha contado todo y queda bastante por saber. Mi opinión, que no sirve para nada y es anecdótica, es que Messi debería haberse quedado y aceptar el hecho de jugar para el Barça sin que le pagaran un salario. Sí, exacto, es una posición muy romántica la mía, pero si Messi y su gente hubieran pensado un poco al tomar esa decisión final, habrían llegado a la conclusión de que los ingresos le hubieran llegado igual de otras partes, de los patrocinadores, de las marcas. Todas las empresas del mundo habrían hecho cola para asociarse con él y con esa decisión de jugar gratis en el Barça, lo habría alcanzado todo. Hubiera sido inmortal, no sólo ya como futbolista sino como persona. No hubiera perdido un euro, al contrario. Habría entrado en la historia como el futbolista no sólo más grande con el balón en los pies, sino un gigante en lo personal, su reputación habría alcanzado niveles grandiosos gracias a ese gesto. Esa era la gran jugada para él, es tristísimo que no pensara así. A mi me consta que alguna gente que sabe del mundo del fútbol y de los patrocinios redactó un documento en el que desarrollaba esta teoría aún antes de que Messi se fuera, explicando cómo podía ingresar enormes cantidades de dinero sin recibir un sueldo del Barça. Entiendo que pasaron ese informe al club, pero no sé si llegó a Messi y me parece una pena, una tremenda oportunidad perdida de enviar un mensaje al mundo. Pensaba que se quedaría como un maestro, ayudando a los ‘nens’ a crecer, a mejorar el juego de los Pedri, Gavi, Nico y compañía. Ese era un papel muy digno de representar, habría sido la gran figura en la historia del deporte quedándose en casa sin cobrar. ¿Qué puede mejorar eso? Hasta el final de mis días mantendré que su marcha fue una gran cagada, una pena, una gran oportunidad perdida. Lástima que nadie cercano a él le propusiera esta idea. Hubiera significado una victoria total, arrasadora, para el resto de su existencia.

“Messi y Cristiano viven un otoño de sus carreras muy triste y decepcionante”

Nueve meses després de vivir ese cataclismo, el problema actual radica en cómo rehacer puentes entre Messi y el Futbol Club Barcelona, ¿no?.

Supongo, supongo. Ahora bien, el Barça siempre debe ser generoso con Messi, eso seguro, no debe limitarse a en pequeñeces, quejas o lamentaciones. Siempre, siempre, el Barça debe tener a Messi en el corazón y sentirse a la vez profundamente agradecido y afortunado por haberle gozado tantas temporadas en el equipo, ser consciente del servicio que brindó al club… El dio cuanto tenía que dar y no hay motivos sobre la mesa para sentirse defraudado, de ninguna manera.

¿Lo ve de vuelta antes de la retirada? Da la impresión que, ahora mismo, volvería muy a gusto para dejar París.

Sumado a esa tremenda oportunidad perdida de la que acabo de hablar, cualquiera le habría podido decir que se ha ido a un equipo desalmado, mercenario, ahora ‘messinario’… Primero perdieron aquella remontada contra el Barça por 6-1 y hace cuatro días les ha vuelto a pasar con el Madrid. Es un equipo que es un flan, se hunden al sufrir cualquier revés y eso demuestra que padecen una falta de moral, de espíritu, delata el factor dinero. Y encima, ir a jugar a la Liga francesa… Eso queda, con todos los respetos, sólo para los franceses. ¿Quién ve la Liga de Francia fuera de allí? Messi merecía otro escaparate.

¿Le pudo la codicia de seguir ganando dinero, quizá?.

El mundo del fútbol vive absolutamente obsesionado con el dinero. La codicia en ese sector alcanza lo ridículo, lo patético. Con las cantidades que ganan, sólo quieren más y más, denotan una mentalidad muy estrecha. Si se tenía que ir, vete al Manchester City, hombre, juega bajo las órdenes de Pep en la liga más potente del momento. Juega bien y todo el mundo te verá, verá lo que aún eres capaz de mostrar…

“Messi debería haberse quedado gratis a jugar en el Barcelona, habría sido una victoria arrasadora para el resto de sus días. El Barça debe tener siempre a Messi en su corazón”

Quizá lo que no quería Guardiola era, precisamente, complicarse la existencia llevándose a Messi al City desde el Barça.

Pep no me lo ha dicho, pero, según bastante gente, un año antes Guardiola lo tenía todo preparado para llevarse a Messi al City. Habría resultado de las opciones menos malas para todos los implicados. Él habría sido mucho más feliz jugando allí, obviamente. Y Pep habría sabido exprimir, maximizar los años que le quedan de carrera a Messi. Me da mucha pena y tristeza porque, en resumen, todo ha resultado un despropósito enorme. Un jugador que me ha dado tanta, tanta alegría a lo largo de los años y que esté acabando así…

Resulta chocante la impresión de que a Messi ya ni se le nombra aquí, parece ‘el ausente’. Los comentaristas no le citan y su nombre es obviado en la actualidad del Barça…

Lo cual revela, de ser así, que ha existido un trauma. Parece la muerte de un ser querido en una familia, pérdida que logra evitar que se le nombre durante años. Algo muy humano y que da la medida de lo que pasó. Cuando se fue de aquí y apareció en París, coreado en las gradas por su nueva afición, eso fue terrible y muchísima gente en Barcelona se quedó moralmente destruida.

Volvamos a la actualidad, al papel de Xavi como entrenador. ¿Esperaba que diera este resultado?.

No. Pero también, como dicen en Argentina, pensé que se le debía dar ‘chance’, la oportunidad de demostrar si valía o no. Ahora bien, sí dije en su día que Koeman iba a ser un desastre… Bueno, eso tampoco requiere un enorme dominio y conocimiento del fútbol, claro… En el caso de Xavi estaba dispuesto a esperar, a ver qué pasaba, pero no imaginaba este cambio. Es el regreso a la vida más dramático que he visto desde Lázaro, esto del Barça…

“Messi habría sido mucho más feliz fichando por el Manchester City”

Además, con detalles inesperados, la alegría del vestuario, por ejemplo, es algo que no se puede fingir, no es impostada…

Como dice Santiago Segurola, lo que consiguen algunos entrenadores, los mejores, es una especie de magia, de alquimia. Antes de mostrar, por ejemplo, una gran agudeza táctica, lo más importante de su trabajo consiste en levantar la moral del conjunto y construir un espíritu de equipo. Y eso creo que Xavi lo ha logrado. Fundamentalmente, tienes también que transmitir autoridad al vestuario y Xavi lo ha hecho de una manera que Koeman no pudo. Volvamos a la otra cara de la moneda, al Manchester United, que cuenta con un técnico al que claramente no respetan sus jugadores. Y Xavi no lo tenía fácil para convencer a sus viejos compañeros…

John Carlin

Fotografia de Carolina Santos

Precisamente, a los Piqué, Busquets o Alba se les daba por acomodados, por acabados y ahora se han convertido en pilares de la renovación.

Bueno, cuestión de autoridad, como decía. El caso de Zidane en el Madrid. Nadie dirá nunca que es un entrenador a la altura de Guardiola, pero, joder, le miras y dices ‘ese es Zidane’, un respeto. Todos quietos, que es Zidane. Y buena parte de la explicación, del éxito que tuvo el Real Madrid radica en eso. No encandilaron con su juego, nadie recuerda su estilo, pero ganaron tres Copas de Europa casi seguidas. Todo el mundo recuerda al Barça coral de Xavi, Messi, Iniesta y compañía, cierras los ojos y te vuelven imágenes de su juego. Con el Madrid, en todo caso, gol de Ramos en el 94, pero ganaban por moral, por ese ‘factor Zidane’. El Barça, con Xavi, parece disponer de ese punto de partida y eso es lo más importante, aunque cueste definirlo. De detalles técnicos y tácticos, pregúntale a otra persona con mayores conocimientos que yo. Ahora bien, otra manera de definir la valía de los entrenadores consiste en preguntarte si el total del vestuario ofrece más o menos rendimiento que la suma de sus partes. Eso es clave, si fuera el presidente me haría esa pregunta. Claramente, en el caso de Koeman el total del equipo era menos, mucho por debajo de lo que podía ofrecer. Y en el de Xavi, todo lo contrario. Es bastante más y eso que, al llegar, se encontró un grupo bastante variopinto, con gente veterana que parecía a punto de jubilación, otros de diversas procedencias y que, total, no prometían mucho, chicos que necesitan tiempo para madurar y, al final, ficharon descartes por la situación económica del club. ¡Ficharon a Luuk de Jung! Un rebotado del Newcastle después repudiado por el Sevilla… Aubameyang, una oveja negra del Arsenal. Ferran Torres, ni titular en el City. Eric García, tampoco… Y con estos ingredientes, Xavi tiene que hacernos un gran plato. ¡Y lo ha hecho! Muchísimo mérito, el suyo.

¿Qué papel le da a Joan Laporta como gestor de este grupo?.

A mí me cae mal Laporta, no confío en él. Me parece otra más entre tantas y tantas personas del fútbol que son, básicamente, amorales, que barren para sus intereses y que harían cualquier cosa por conseguir más dinero. Con lo cual, me cuesta mucho darle crédito. No me pidas que te hable bien de Laporta porque no puedo… Siempre voy a sospechar de sus intenciones.

“Xavi no tenía nada fácil convencer a sus viejos compañeros de vestuario”

¿El Barça mantiene viva la condición de ‘més que un club’?.

Sigue representando una identidad nacional catalana, un cierto espíritu, sí. Está muy arraigado. Continúa siendo un sentimiento genuino. Por supuesto, habrá periodos en que se vivirá de manera más explosiva o conflictiva, dependiendo de la relación política con Madrid, como sucedió pocos años atrás. Sé un poco de la historia del Barça y sé de donde arranca esa vinculación con el catalanismo. A mí, el fenómeno Joan Gamper me parece interesantísimo. Un tipo que viene de Suiza con 21 años y que ni siquiera pensaba quedarse aquí, acaba siendo más catalán que un nativo, cambia su nombre y se enfrenta a la dictadura de Primo de Rivera, que era el máximo representante entonces del nacionalismo español… Hay otra cosa que me atrae y me parece interesantemente contradictoria: Como el ‘més que un club’ se asocia al catalanismo y, en paralelo, la importancia que han tenido los extranjeros en el desarrollo del club. Gamper es suizo, Kubala húngaro, Cruyff holandés, Messi argentino, gente a la que podríamos llamar exiliada de sus países que han tenido una relevancia decisiva en el engrandecimiento del Barça. Son cuatro personajes paradigmáticos que representaron un papel enorme en la identidad y el desarrollo de la entidad, del ‘més que un club’.

¿Cuál es la impresión del Barça que se tiene desde las diversas partes del mundo donde ha viajado?.

A ver, cómo te lo resumo… El Barça es una marca enorme. Está ahí junto a Coca-Cola, Microsoft o Apple. Una marca colosal. Y lo es porque el fútbol es el fenómeno social más grande del mundo y tiene más adeptos que cualquier religión o cualquier ideología. Además, entre sus seguidores, la gente está muy informada y en consecuencia, el Futbol Club Barcelona tiene una imagen potentísima. Los que siguen el fútbol de cerca saben que ha pasado una mala época, pero eso no ha dañado su proyección. Como también la ciudad de Barcelona tiene una imagen sensacional en el mundo pese a que, últimamente, y me aburre muchísimo, escuches a barceloneses cayendo en el victimismo que tanto les encanta para decir que Madrid es muy potente, que está en ebullición… ¡No me jodas, hombre! Barcelona es formidable, una marca mucho más grande en el mundo que Madrid. A la gente del resto del mundo poco le importa si está Ayuso o está Colau o si la economía anda un poco mejor aquí o allí. No se fija en eso, se fija en la imagen labrada a lo largo de los últimos treinta años y en la materia prima, que es infinitamente mejor en Barcelona que en Madrid por motivos obvios. ¿Tengo que explicarlos? El clima es mejor, tenemos el mar, la arquitectura, es una ciudad más variopinta, más interesante, que invita a caminar. Esa es una buena manera de calibrar una ciudad, si quieres andar o no por ella y yo he vivido en muchos lugares… Volviendo al Barça, piensa en el Milan, que no ha hecho nada en veinte años y sigue ahí como marca importante y respetada a nivel mundial.

Fuera de las fronteras españolas, ¿se capta la singularidad del Barça?.

No se capta nada, en absoluto. La gente pone la tele para ver un Barça-Madrid y ve la habitual pancarta del ‘Catalunya is not Spain’ y si piensas que un inglés, un coreano o un mexicano se preocupan por eso, estás muy equivocado. No le interesa absolutamente nada. El cartel es sólo para consumo interno. Ya lo dije antes, para mí hay en el mundo cincuenta temas más importantes que la independencia o no de Catalunya. Hay conflictos, causas que me movilizan, que me provocan un interés y una emoción muy por delante del tema catalán, lo siento. Aunque vivo aquí, lo sé, quizá debería estar más involucrado, no sé, pero imagínate que eres británico y vives lo del Brexit, con ese payaso llamado Boris Johnson… Cada país tiene sus temas prioritarios y lo afirmo después de haber trabajado como periodista en más de setenta naciones. A nadie le sobra mucha materia gris para dedicarla a otros aspectos menores o apartados de sus principales preocupaciones, tipo Catalunya. Éste es uno de los mejores lugares del mundo para vivir, la calidad de vida aquí no la tiene ni el 1% de la humanidad… Volviendo a tu pregunta, yo sigo hablando del Barça como marca global, pero en cuanto al detalle, que los dueños sean los socios o su identidad catalana, sólo lo saben grupos más reducidos o informados de personas. No hablo de poca gente, claro, que hay muchos millones de aficionados al fútbol, pero no es algo que sepa una ama de casa en Oklahoma. Sabrá, seguramente, qué es el Barça, aunque no le pidas mucho más, ni le hagas un cuestionario sobre quién fue Joan Gamper…

“Laporta es una persona amoral, como tantos y tantos en el mundo del fútbol”

Años atrás, en las primaveras árabes, se acostumbraba a ver guerrilleros vestidos con camisetas del Barça. ¿Pura casualidad o era una imagen de aspiración por la libertad?.

¿Y qué? Pues que la prensa de aquí publicaba esa foto por proximidad, igual que en Italia hubieran reproducido a un tío vestido de la Juve. En todo el mundo, la gente se viste con camisetas de los grandes clubes y no hay que extrapolar nada, ni llegar a falsas conclusiones… Siempre ves a gente así, con camisetas de fútbol. Una vez estuve en Ruanda, en una islita en mitad de un lago remoto que está en el centro geográfico de África y allí vi a un niño de ocho años, descalzo, con una camiseta del Barça, de Messi. Por una parte te llama la atención y por la otra, debería no hacerlo porque todo el mundo lleva ya camisetas de fútbol. Hablando de África, allí verás muchísimas del Arsenal y quizá se deba a que en el equipo londinense han jugado futbolistas africanos. O quizá no. En Afganistán, he visto a un montón vestidos del Real Madrid. O sea que… Si crees que esto significa que el Barça ejerce una especial fascinación sobre gente con determinadas significaciones políticas, no lo comparto.

Hablemos de Pep Guardiola, otro personaje referencial.

Sólo puedo hablar bien de Pep. Lo conozco personalmente, sin que seamos íntimos amigos, aún manteniendo el contacto. Creo que ha ejercido una influencia extraordinaria en el mundo del fútbol. Alguien, no recuerdo si viene de la cultura griega o romana, dijo hace mucho tiempo que uno creó el ladrillo y otro creó el mármol. Y eso es lo que sucedió con Cruyff, primero, y más tarde con Pep Guardiola, que acabó completando, refinando, sofisticando la obra de su maestro, esa genialidad, esa brillantez de modelo, de manera de entender cómo hay que jugar al fútbol. Le puso cierto orden y lo llevó a otro nivel. El impacto de Guardiola en el fútbol ha sido muy grande. La cantidad de equipos que ahora salen jugando desde atrás, en cosas muy simples como el juego de pies del portero. Esto fue patentado por Pep, como la obsesión por el balón, el balón y el balón. Incluso Gareth Southgate en Inglaterra, que no es ninguna lumbrera, recibe críticas por ser demasiado fiel al estilo de Pep. El otro día leía que Jurgen Klopp le considera el mejor entrenador del mundo…

¿Guardiola ha cambiado el futbol inglés?

Más bien creo que su influencia está siendo muy grande en el fútbol en general. En Inglaterra no ha sido una revolución absoluta porque ya habían pasado otros precursores que habían suavizado el típico futbol vertical, de patadón adelante, como Arsene Wenger o Terry Venables, pero este concepto, tan elemental en principio, del amor por la pelota o la posesión es suyo y así se lo reconocen en la Premier, claro. Guardiola es una persona muy, muy respetada allí, de manera prácticamente unánime. No soy consciente de que en Inglaterra tenga a un Pedrerol o a un Roncero dándole hostias, para nada… Guardiola y Klopp, por cierto. Klopp me parece un personaje maravilloso. Si hubiera elecciones para secretario general de Naciones Unidas, yo creo que votaría por Jurgen Klopp… Me parece un gran tipo y otro espíritu libre. Me he acordado de otro personaje, José Mourinho, con el que me había metido mucho hasta parecer un anti-mourinhista acérrimo. Hace dos o tres años, cuando Mourinho estaba en uno de sus múltiples fracasos de los últimos años dirigiendo al United, se le ocurrió criticar a Klopp por celebrar con excesiva emoción y alegría los éxitos del Liverpool. Se lo preguntaron al alemán en rueda de prensa para buscarle las cosquillas y el tipo se echó a reír a carcajadas. Después, ya más en serio, dijo, mire usted, la vida es complicada, llena de tristezas. Por tanto, cuando uno goza de un momento de alegría, hay que exprimirlo a fondo, todo lo que se pueda…. ¡Disfruta, salta y ya está!. Ahí hay una filosofía de vida que me gusta. Bien por Klopp, pues.

“Los extranjeros han tenido un papel decisivo en el engrandecimiento del Barça”

Una lástima que Guardiola no continuara en el club de su vida…

Ya, bueno, no conozco las interioridades, pero igual pasa como en ciertos matrimonios, que llegan al límite y deben separarse, falta la chispa y lo dejas. Ahora bien, lo que diré, y lo tengo escrito, es que Guardiola no sólo es el catalán más famoso del mundo, sino que también es el español más conocido, evidencia que fastidiará a muchos. Volvemos a la idea, muy elemental, de marca global. Estoy segurísimo de que nadie compite en esa dimensión con Guardiola, excepción hecha tal vez de Iniesta o del propio Xavi Hernández porque el fútbol es la gran, gran, gran religión mundial. Hay muchos más futboleros que judíos, cristianos, musulmanes o budistas. La gente puede decir que el gran deportista español es Rafa Nadal, pero compara la dimensión del tenis con la del fútbol y no tienen absolutamente nada que ver. Vete a África, vete a China y pregunta allí qué es el tenis...

¿El Real Madrid es ‘marca España’, pues, siguiendo el razonamiento?.

Es ‘marca España’ visto desde Catalunya. Para el resto del mundo, y no sé donde estás colocado políticamente, el Barça también es marca España, os duela o no. Tanto como el Real Madrid. Son matices, pequeñas riñas regionales, lo siento, sólo ocupan a los afectados. Aquí pueden parecer muy importantes, pero a los demás les trae sin cuidado. El independentismo me parece una causa honorable, respetable, aunque con los problemas que sufre la gente en el resto del mundo, no creo que se preocupen de eso, vaya… Esa es la idea que tenían durante el ‘procés’ los Puigdemont y compañía, convencidos de que la Unión Europea iba a llegar como un batallón de caballería para salvarlos, pero, por favor… Otra vez más, en la lista de prioridades de la Unión Europea no figura Catalunya. Es así.

¿John Carlin es de los que ‘odia el fútbol moderno’?. Por ponerlo en palabras y conceptos de los críticos.

Si te refieres al fenómeno comercial del fútbol, bueno, correcto. Pero mira, acabo de ver el mejor espectáculo que puede ofrecer el fútbol ahora mismo, un Manchester City-Liverpool. Lo mejor en años. En años. Una bestialidad. O sea, el fútbol moderno me encanta. Guardar odio por la comercialización me parece un sentimiento demasiado fuerte. Eso lo reservo para cuestiones mayores, como Vladimir Putin, por ejemplo. Por lo tanto, no entra para mí en el mismo nivel de antipatía, pero también es cierto que me provoca un cierto nivel de asco. Como decía, son demasiado peseteros y pienso, obviamente, en la FIFA, un asco de gente que votó para llevar el Mundial a Rusia o a Qatar, por favor, es repelente… No hay que banalizar el odio, hay que reservarlo para causas que lo merezcan. Con la elección de Qatar, por ejemplo, no hizo falta realizar ningún trabajo de investigación periodística, era evidente que hablábamos de pura corrupción y eso lo sabe hasta un crío de cinco años. ¿Qué misterio hay aquí, qué investigación hay que hacer? ¡Cero! Es una barbaridad, una asquerosidad y seguro que en el caso de Rusia también hubo todo tipo de mangoneos y sobornos. En general, es raro encontrar gente en el mundo del fútbol profesional a nivel ‘top’ que no sean unos obsesos por el dinero. Gente a la que les ofreces, no sé, dos millones para ir a promocionar lo que sea y lo hacen porque sólo piensan en los dos millones, sin darse cuenta de las consecuencias políticas o morales de sus decisiones. Amoralidad total. Gente que admiro, con los que me llevo bien o incluso son amigos en el mundo del fútbol, tienen ese rasgo de perdición por el dinero. Me parece tan vulgar como común, hay pocos que no sean así. Louis Van Gaal, por ejemplo, a diferencia de Koeman, él tuvo el honor y el valor de decir que renunciaba al sueldo de un año de contrato y perdió cinco millones de euros en su día. Todo mi respeto por Van Gaal, aunque sólo confirme que sea la excepción de la regla. El tipo, además, tiene la integridad moral para decir lo que piensa de Qatar siendo seleccionador holandés… ¿Por qué los demás no dicen nada? Por miedo a perder dinero como consecuencia, de una manera u otra. ¿Por qué tan pocos deportistas se la juegan dando sus opiniones sobre temas políticos? Por no ofender a nadie o ir contra sus propios intereses. Y así, se dedican a soltar puras banalidades, no descubro nada.

“Guardiola ha ejercido una influencia extraordinaria en el mundo del fútbol”

Hay pocos John Carlin que puedan decir a las claras lo que piensan, dicho sea sin mínima ironía...

Bueno, no sé, no hablaré por nadie. En cambio, puedo decir que creo firmemente en la libertad de prensa que es, en esencia, la democracia. Y la democracia para mí es algo muy importante, es la libertad individual protegida por la ley y esto es algo por lo que han luchado nuestros antepasados durante siglos. Y por eso me ofende tanto lo que está sucediendo ahora mismo en Ucrania, una guerra que pretende destruir algo en lo que yo creo, como es la libertad de prensa. Yo no me voy a cortar si veo, leo o pienso algo sobre un tema relevante, que sea noticia. Nunca me he cortado, quizá sólo lo he hecho alguna vez para proteger la vida de alguien, pero, bueno, aquí ya nos alejamos del tema del fútbol…

Para acabar, una pregunta casi sociológica: Desde aquí abajo siempre hemos visto al Reino Unido como la prolongación del Imperio Británico, ¿existe todavía el orgullo de ser ‘british’ o es ya un mito del pasado? ¿Hay todavía cierta sensación de supremacía sobre el continente?.

Bueno, no te olvides que la última vara de medir fue el referéndum del Brexit y se saldó con un 52-48% en el reparto de votos, por lo que estamos hablando de mitad y mitad. Es como decir que todos los catalanes son ‘indepes’ o que todos quieren seguir formando parte de España. Es mucho más complicado que eso. En segundo lugar, los ingleses, y los británicos en general, tienen la virtud de tomarse la vida con un gran sentido del humor, con una ironía muy fuerte y una gran capacidad para reírse de sí mismos. Hay muchísimos ingleses que se parten de risa recordando lo que llegaron a ser si lo comparamos con el ‘paisito’ que forman ahora. No hay tanta gente que siga pensando en clave imperial. Sí, habrá quien se considere superior a los europeos del continente, como habrá tipos dispuestos a pensar que ganamos solos la II Guerra Mundial… Si la gente se lo quiere creer, adelante, pero también hay que reconocer que son diferentes, con sus cosas buenas y malas. A mí, personalmente, lo del Brexit me pareció una catástrofe, habría preferido clavarme un puñal en el estómago, pero, bah, ya está, ya pasó...