Luz, fuego y... petardos. La verbena de Sant Joan es una de las noches más intensas y festivas en Catalunya y a su alrededor se genera una economía que ha consolidado empresas y oportunidades. Es el caso de Petardos CM, compañía familiar nacida en Palau-Solità i Plegamans hace más de 40 años y que se ha convertido en líder del sector pirotécnico en el país. Solo un dato: Petardos CM acumula el 45% de las ventas totales de pirotécnica en Cataluña para San Juan.
"Vendemos fuego e ilusión", resume Josep Maria Vilardell, fundador y director de la empresa.
De electrodomésticos a petardos
Los inicios de Petardos CM se remontan a principios de los años 80 y el origen de todo, como ocurre en muchas historias, es fruto de la casualidad. Josep Maria Vilardell tenía una tienda de electrodomésticos en Palau y recibió la visita de un comercial por si quería vender petardos. En aquella época, se vendían en todo tipo de negocios, incluso en carnicerías. Fue entonces cuando, conjuntamente con un socio que tenía un supermercado, decidieron abrir un local de venta de petardos: "Nos picó la curiosidad".
Vieron que justo empezaban a aparecer las primeras casetas de venta de petardos por los alrededores de Sant Joan y fueron de los primeros en sumarse. Al segundo año, ya montaron una quincena.
Palau, capital del petardo
Una curiosidad es que en Palau también se fundó la Traca, actualmente en manos de los hermanos Brau. Hoy en día son las dos empresas líderes del sector. Dos empresas de un pueblo de menos de 20.000 habitantes del Vallès Occidental dominan una de las fiestas populares más queridas en Catalunya.
Vilardell: "La evolución del sector ha sido muy grande"
Petardos CM fue creciendo año a año, el negocio aumentaba y el sector evolucionaba. Desde vender petardos individuales a preparar lotes bien diseñados y elegir productos para todos los públicos. "Nosotros elegimos el producto, que se fabrica en China, que es quien vende pirotecnia en todo el mundo", detalla Vilardell. A pesar de la evolución, las pilas y las bombillas siguen siendo las reinas de la noche. De hecho, la bombilla representa más del 20% de sus ventas.
Sin embargo, cada vez tiene más éxito la pirotecnia relacionada con el color e incluso ya existe pirotecnia de interior. Uno de los trabajos de Petardos CM es justamente encontrar el mejor producto y confeccionar lotes atractivos y que cumplan las expectativas de cada cliente.
La mancha de aceite del petardo
Con quince casetas en 1984, Petardos CM ha vivido un crecimiento exponencial hasta el día de hoy, que cuenta con más de 140 casetas para San Juan y 85 locales y naves. Y controla el 30% de los casi 1.000 puntos de venta (entre casetas y tiendas) que hay en Catalunya.
Durante la época de Sant Joan dan trabajo a más de 800 personas y la facturación de todo el año asciende a los 12,5 millones de euros, el 95% de los cuales son para estas fechas. "La gente dice que cada vez se oyen menos petardos. Pero nosotros cada año vendemos más, se vende más pirotecnia", reflexiona Vilardell. Sin embargo, apunta que hay trabajo de preparación durante todo el año.
El gran reto de los petardos
Con un 95% de la facturación para Sant Joan, uno de los retos del sector y de Petardos CM es la desestacionalización. En parte, lo consiguen en ventas fuera de Cataluña para Fin de Año, donde es habitual el uso de pirotecnia. Actualmente, el 30% de su facturación está en el resto del Estado.
Sobre la clave para haberse convertido en uno de los líderes, Vilardell lo tiene claro: "Hacemos las cosas bien y con seriedad. Todo el mundo habla de nuestros petardos". La atención a los clientes es también uno de los pilares fundamentales y apuestan por la formación de sus 800 vendedores para que puedan guiar las ventas. "No fabricamos los petardos, pero por nuestra manera de tratarlos y de vender, tenemos mucha presencia y un buen nombre en Catalunya", concluye.