Ryanair: cobrar por la maleta de mano es ilegal

Un juzgado condena a la aerolínea a devolver 20 euros a una pasajera que quería embarcar una maleta y un bolso, una sentencia que crea jurisprudencia

Pasajeros de Ryanair hacen cola a un mostrador del aerolíanida | Europa Press Pasajeros de Ryanair hacen cola a un mostrador del aerolíanida | Europa Press

Cobrar por embarcar una maleta de mano a un avión es ilegal. El juzgado mercantil número 13 de Madrid ha condenado a Ryanair por hacer pagar 20 euros a una pasajera que quería subir una maleta de mano al avión además de su bolso. La magistrada considera en la sentencia que es una medida "abusiva" y obliga a la aerolínea a devolverle el importe.

Esto no significa que la compañía irlandesa ya no podrá cobrar en estos casos, puesto que se trata de un caso particular y no de una acción colectiva, sino que cuando otros viajeros emprendan un proceso judicial en el mismo sentido, podrán aportar esta sentencia como prueba. Es decir, crea jurisprudencia. Por lo tanto, Ryanair puede decidir si simplemente devuelve el dinero a esta pasajera o si elimina este cobro en todos los casos para la tarifa estándar.

De hecho, ya ha anunciado que "la sentencia no afectará a la política de equipajes". La compañía entiende que es "un caso concreto que ha malinterpretado" su libertad comercial de determinar el tamaño del equipaje de cabina.

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Un "simple bolso de escasas dimensiones" no se puede considerar un bulto, puesto que "se puede ubicar perfectamente en la parte inferior del asiento delantero", indica el auto. Esta conducta "no está amparada" por la norma comunitaria que permite a las aerolíneas fijar tarifas libremente por sus servicios. La sentencia es firme y no admite recurso.

Sin daños morales

Aún así, la jueza admite sólo parcialmente la demanda de la consumidora, que también pedía una indemnización de 10 euros por daños morales, por la "rabia e impotencia de tener que asumir un coste que inicialmente no tenía previsto y ver que la maleta que quería llevar con ella en la cabina" iba a la bodega.

Los hechos ocurrieron en un vuelo de Ryanair de Madrid a Bruselas, cuando la tripulación de tierra vio que la pasajera no tenía una tarifa priority y consideró que debía pagar 20 euros por una pieza de equipaje de mano extra.

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