A través del móvil, Kivi te permite conocer el estado de tus cultivos, bien sean flores, plantas u hortalizas, y te avisa de las necesidades de luz o humedad que puedan tener. Todo esto de manera interactiva y divertida, de forma que el usuario está implicado en la cura de sus plantas, aprende a cuidarlas y conoce nuevos trucos de jardinería.
"Kivi no solamente es un dispositivo que te facilita regar las plantas cuando estás de vacaciones. Nuestra idea va mucho más allá. Queremos que se convierta en un fiel consejero que haga las mejores recomendaciones, que interactúe con el usuario y que, por ejemplo, te sugiera ricas y divertidas recetas de mojitos si tienes plantada hierbabuena", explica Borja Uría, CEO y cofundador de Kibu Green.
Una de las características más atractivas es su diseño. Las líneas con las cuales se ha jugado a la hora de diseñar el test y la oportunidad de personalización que ofrece a través del intercambio de sus carcasas, le brinda al usuario final la posibilidad de tener un producto que se adapta a sus gustos. "Hemos adaptado el diseño del recipiente de retención de agua que siempre han tenido los tests, convirtiéndolo en una carcasa con estas mismas funciones, y que además juega un importante papel estético en Kivi", detalla Román González, CDO y cofundador de la compañía.
Conseguir 50.000 euros
Estos jóvenes emprendedores han lanzado una campaña en Kickstarter, la plataforma de crowdfunding más importante a nivel internacional, para financiar la fabricación y el desarrollo final de Kivi antes de lanzarlo al mercado. "Nuestro objetivo es, por un lado, conseguir 50.000 euros que nos permitan empezar con la producción en serie. Además, queremos aprovechar la oportunidad de visibilidad que esta plataforma nos puede brindar para potenciar la difusión del producto entre el mayor número de usuarios potenciales posibles", comenta Uría.
"Es indudable que el verde es y va a ser una tendencia para los próximos años. Lo vemos, por ejemplo, en la proliferación de huertos urbanos a las ciudades. La tecnología puede y tiene que adaptarse a las necesidades de los usuarios y ofrecer dispositius que faciliten la vida y fomenten las aficiones saludables de las personas. La revolución de la internet de las cosas ha llegado para quedarse", concluye.