Marca nueva, vida nueva. Cambiar de nombre no es fácil ni para personas ni para empresas. No tanto por el papeleo que supone que también sino más bien por una cuestión de identidad y de estrategia. Ahora, Gas Natural Fenosa es Naturgy. Pero, por qué este cambio? Según el presidente de la multinacional, Francisco Reynés, "con Naturgy, construimos una marca internacional, adaptada a todos los mercados globales donde tenemos presencia y donde la tendremos en el futuro".
Reynés: "Queremos ser un 'player' internacional centrado en la creación de valor"
En este caso, el cambio de rumbo después de 175 años de historia es bastante claro: "Una nueva imagen, más moderna, digital y global, respetuosa con el entorno y la sociedad y representativa de la nueva etapa que empezamos". Sin empezar de nuevo pero con el objetivo renovado de encarar nuevos retos, ganar proximidad con los clientes y todavía más compromiso con el medio ambiente.
Simples, digitales y ágiles
Se trata de hacer fácil aquello más complicado: comunicar a través de una nueva marca y un nuevo logo, también digitalitzable y también internacional. No faltan los tres colores corporativos: el moratón, el naranja y el blanco. El pasado es herencia y el futuro, todo un reto. Desde la multinacional energética defienden "la innovación tecnológica, la digitalización, la simplicidad y la globalidad" como nuevos ejes de la casa.
"La compañía no empieza de cero. Ya somos reconocidos por una energética próxima y comprometida con nuestros clientes. Pero a partir de ahora lo seremos todavía más. Iremos más lejos, haciendo la vida más fácil a nuestros clientes gracias a la tecnología, y satisfaciendo sus necesidades. Seremos más simples, más digitales y nos preocuparemos para ser más ágiles", añade Reynés.
Marca nueva, estrategia nueva
La creación de Naturgy va en linea con un nuevo Plan Estratégico 2018-2022. Marca nueva, estrategia nueva. Entre sus nuevos objetivos financieros figuran lograr un Ebitda de 5.000 millones de euros y un beneficio neto de 1.800 millones de euros de cara al 2022. A guisa de comparación, cerró el 2017 con un Ebitda de 3.915 millones de euros y un beneficio neto de 1.360 millones de euros.
A la vez, la multinacional quiere lograr un aumento del dividendo por acción de al menos un 5% por año hasta los 1,59 euros por acción el 2022 y prevé invertir 8.400 millones de euros durante el periodo 2018-2022, de los cuales 5.300 millones de euros se destinarán a crecimiento sobre todo en negocios de gas y electricidad así como infraestructuras reguladas. Se espera que el mercado español represente como máximo un 40% de su actividad cuando finalice el plan estratégico.
Se espera que el mercado español represente como máximo un 40% el 2022
Paralelamente, se prevé reducir los gastos operativos anuales en 500 millones de euros de cara al 2022 y simplificar el gobierno corporativo para "agilizar la toma de decisiones y rediseñar la estructura organizativa con más autonomía y responsabilidad". Tanto es así que la compañía ya se reestructuró a principios de junio en cuatro grandes áreas: gas y electricidad, infraestructuras, infraestructuras de Latinoamérica Zona Sur y Zona Norte.
"Queremos convertirnos en un player internacional centrado no tanto en la medida sino en la creación de valor por nuestros stakeholders", concluye Reynés. La marca es estrategia y la estrategia es marca: Gas Natural Fenosa es pasado y Naturgy es ya presente y futuro.