Este es y será uno de los artículos más importantes de mi vida. Toda gran historia tiene un comienzo apasionante y un final nostálgico. Entré por primera vez en la redacción de VIA Empresa en septiembre de 2017 y me voy justo cinco años después con la inmensa gratitud de haber podido dirigir este pequeño gran diario durante tres años, recordando en cada momento que fer VIA es una filosofía de vida.
Hoy es el último día de un bello recuerdo, hoy es el primer día de un nuevo sueño. Dicen que el periodismo -como el fútbol y la vida- te devuelve lo que le das.
Me apasiona este oficio desde que tengo uso de razón. Tenía solo cinco años cuando mi familia me regaló mi primera radio. De pequeño, tenía un gran sueño: ser periodista. Un sueño que cumplo cada día. El periodismo es una actitud, una forma de hacer, trabajar y vivir. El periodismo es una pasión y una forma de compartir tu vida con las personas que te rodean. Dejarse la piel, 24 horas al día y 365 días el año. Decía Michael Hastings en su famoso decálogo que "tienes que estar dispuesto a dedicar tu vida al periodismo". Y esto es precisamente lo que he intentado hacer a lo largo de estos últimos cinco años. Dedicarme y vivirlo con plenitud y gratitud.
El periodismo es también el arte de preguntar, repreguntar e ir más allá. El arte de escuchar, entender, escribir y compartir. Ser creativo, saberse anticipar y tener visión, pensamiento crítico, curiosidad, resiliencia y empatía. Encontrar información allí donde nadie la busca para conocer, explicar y adentrarse en un auténtico laberinto de poder como bien explica Roger Vinton que es la verdad. Porque las grandes historias que nos inspiran y nos ayudan a avanzar son siempre la mejor parte del periodismo.
¡Viva el periodismo a fuego lento, sin prisa pero sin pausa, que quema entre los dedos y la pluma digitalizada!
Larga vida a las conversaciones que consiguen parar el reloj y nos recuerdan que un momento no se repite nunca dos veces.
Larga vida a la investigación, la reflexión y el análisis que implica tiempo, sudor y lágrimas, pero que nos ayuda a entender más y mejor el mundo que nos rodea.
Fer VIA es caminar, conversar y ver siempre el vaso medio lleno. Fer VIA es construir un periodismo en profundidad, análisis, reflexión y color. Fer VIA es hacer equipo y vivir la vida de forma optimista y constructiva. Fer VIA es recordar que el buen trabajo no tiene fronteras y que juntos vamos más lejos. Fer VIA es encontrar soluciones cuando solo hay problemas y recordar el canto de Pau Donés: "Depende, ¿de qué depende? De según como se mire, todo depende". Al final, todo es camino y experiencias.
Soy de los que cree que el periodismo se cuece a fuego lento a la redacción y a pie de calle y si puede ser con un buen café y una buena conversación, siempre mucho mejor. En VIA Empresa nos hemos rodeado de conversaciones, reflexiones y críticas constructivas, a la vez que siempre hemos creído y defendido que nuestra sociedad está llena de gente inspiradora y que la inteligencia es contagiosa. El factor humano y el círculo virtuoso del periodismo.
Han sido cinco años muy apasionantes, intensos y cargados de grandes momentos compartidos. Una lluvia fría de recuerdos con perspectiva. Quiero mostrar mi sincero agradecimiento a TODO el equipo, los colaboradores y los lectores. Sin vosotros, todo esto no habría sido posible porque más allá de cualquier proyecto o idea quedan sobre todo las personas que dan sentido, luchan y comparten una causa. En palabras del maestro Kapuscinski sobre el buen periodismo: "La relación con los seres humanos es el elemento imprescindible de nuestro trabajo". Gracias a todos por haber convertido este viaje periodístico en una experiencia única e inolvidable.
Tal y como dijo Pep Guardiola cuando dejó el Barça: "Me he vaciado y necesito llenarme... Me voy muy feliz por todo lo que he vivido". ¿Qué hemos hecho estos últimos años en el diario? En un titular: Fer VIA. El resto es historia, momentos y legado.
La vida es una obra de teatro que no permite ensayos...
Por eso, canta, ríe, baila, llora
Y vive intensamente cada momento de tu vida...
... antes que baje el telón
Y la obra acabe sin aplausos.
¡Gracias eternas y viva el periodismo!