Secretario de Empresa y Competitividad y consejero delegado de Acció

40 años de Acció: un elogio de la madurez

01 de Octubre de 2025
Jaume Baró Torres

Con demasiada frecuencia se habla de la crisis de los 40 para referirse a aquel momento vital en el que eres consciente de que, ahora sí, difícilmente te podrás considerar joven sin que alguien te sonría de forma irónica. Hablamos de crisis porque se suele enfocar en la nostalgia de lo que dejamos atrás: esa juventud que tiene la ilusión y las expectativas de todo lo que vendrá. Pero realmente los 40 son una magnífica oportunidad para celebrar un momento casi único: aquel preciso instante en el que confluyen los puntos óptimos de experiencia y vitalidad. Los 40 son todo lo bueno que tiene la madurez para ayudarte a cumplir todos aquellos objetivos que aún tienes fuerza y ganas de alcanzar.

 

Este maravilloso momento es el que vive este año Acció, la agencia pública de la Generalitat que facilita el crecimiento de las empresas catalanas. Esta misma noche del martes celebraremos en el MNAC cuatro décadas de apoyo ininterrumpido a la empresa. Y lo haremos con el orgullo del trabajo hecho. Acció ha sido en todo este tiempo un punto de apoyo esencial para la empresa catalana. 

"Los 40 son todo lo bueno que tiene la madurez para ayudarte a cumplir todos aquellos objetivos que aún tienes fuerza y ganas de alcanzar"

En sus inicios, para ayudarla a integrarse en la Comunidad Económica Europea, tarea para la cual era necesaria una adaptación a los estándares de calidad de nuestros socios continentales después de años de cierre. También en la adopción de la innovación como palanca de crecimiento y competitividad; así como de la internacionalización para hacer llegar los productos catalanes a todo el mundo. Finalmente, tampoco podemos olvidar la importancia del trabajo de Acció a la hora de captar inversión extranjera productiva en nuestro país.

 

Hace 40 años difícilmente alguien habría imaginado que hoy las empresas catalanas exportarían por valor de más de 100.000 millones de euros anuales, que contaríamos con un potencial tecnológico e innovador puntero en Europa, con uno de los ecosistemas emprendedores más dinámicos del continente y consolidados como uno de los principales destinos para invertir de cualquier multinacional.

Esta evolución del tejido empresarial catalán tiene un protagonista evidente: las empresas del país. Pero no podemos menospreciar el impacto de contar con un apoyo especializado, en Catalunya y en todo el mundo mediante la red de Oficinas Exteriores, como el que ha ofrecido Acció.

Una agencia singular, de consenso y fruto de una visión estratégica que todos los Gobiernos de la Generalitat han sabido consolidar como lo que es: una herramienta de país al servicio de las empresas, es decir, al servicio del bienestar y la prosperidad de la sociedad catalana en su conjunto.

Como decía al inicio, sin embargo, esta conmemoración del 40 aniversario nos permite reunir todo este bagaje y utilizar esta experiencia para seguir siendo útiles en el futuro. En un contexto global cada vez más incierto y volátil, garantizar que las empresas catalanas encontrarán certezas en el apoyo público a sus proyectos es imprescindible.

"Hace 40 años difícilmente alguien habría imaginado que hoy las empresas catalanas exportarían por valor de más de 100.000 millones de euros anuales"

Y esto es lo que continuará haciendo Acció -¡esperémoslo!- 40 años más: ofrecer las respuestas que las empresas catalanas necesiten. Ya sea para reorientar su modelo de negocio, para incorporar tecnología o para abrirse paso en el mundo. En entornos más estables o en otros más complejos. En definitiva, contribuir a generar y mantener puestos de trabajo de calidad. Con todo el conocimiento acumulado durante los últimos 40 años y con la madurez para aplicarlo en beneficio del conjunto del país. 

Una tarea que quiero agradecer a todos los trabajadores que han tenido relación con Acció durante estos 40 años. Por el trabajo realizado, su compromiso de servicio público y la indudable orientación a nuestro cliente, la empresa. ¡Felicidades a todos!