No hace muchos días supimos que pronto la cumbre de la Everest tendrá cobertura móvil, como otras grandes cumbres ya tienen. La justificación, de ia la noticia es que de esta forma se podrá establecer contacto con eventuales equipos de ayuda en caso de necesidad. Y hay que suponer que se podrán enviar selfies para justificar la llegada.
Más allá de la anécdota, el hecho objetivo es que un espacio finos hace bien poco prácticamente inaccesible, y que ahora ya sufre los efectos de una sobreutilització que, por ejemplo, tiene un elevado impacto en forma de residuos abandonados, será todavía más fácil y más seguro de llegar.
La tecnología casi nunca es buena o mala por sí misma, depende del uso que sehaga. En términos de sostenibilidad, las innovaciones tecnológicas destinadas a disminuir las necesidades de energía en los procesos productivos, a generar energías limpias, a recuperar y valorar residuos como nuevas primeras materias, o a disminuir las necesidades de agua y a recuperar la ya utilizada y tantos otros, son casi siempre un aliado de primera magnitud de la economía verde.
Siempre hay el peligro pero que, igual que si en casa sustituimos las bombillas incandescentes por otros tipos led porque gastan mucho menos, en vez de dos luces encendidos a la vez,tengamos debe de y el ahorro se nos evapore. Es decir, hay que evitar que los adelantos tecnológicos disparen las producciones y los consumos y queden, ambientalmente hablando, rápidamente amortizados.
Y en cuanto a la tecnología móvil? En términos económicos, la tecnología móvil pone en el mapa de lugares del mundo donde o desde dónde, eventualmente, se pueden realizar actividades económicas, lugares hasta no hace muy vírgenes por alejados o inhóspitos. Del mismo modo que el invento del ascensor permitió construir rascacielos y la concentración de capital queestá asociada, o que el aire acondicionado hizo posible que zonas sometidas a altas temperaturas pudieran empezar a competir con las zonas templadas del planeta, ahora la tecnología móvil está haciendo que las últimas regiones hasta ahora inabarcables pasen a incorporarse a la globalización económica mundial.
Es esto doliendo, necesariamente? Seguro que no, depende de cómo lo hacemos. En la África, grandes extensiones de territorio donde prácticamente no tienen acceso a la electricidad, el agua, o el alcantarillado, están ahora bajo la cobertura móvil y los massais. Por ejemplo, pueden ir a pacer sus rebaños a las mesetas de la África oriental con el teléfono al bolsillo. De hecho, uno de los habituales a la cita del Mobile de Barcelona, a pesar de que este año no vendrá Mark Zuckerberg, ha manifestado repetidamente su interés de hacer llegar internet y la cobertura móvil a todos los lugares de África. Tiene un afán filantròpic este interés? Seguramente está más vinculado a la voluntad de incorporar los africanos como clientes de Facebook que no de otra cosa.
Cómo todos los procesos civilizadores, sean a través del tren, de los barcos de vapor u otros widgets similares, el resultado final presentará luces y sombras y uno de los retos que habrá que abordar es como se puede hacer compatible la preservación de los valores ambientales de un territorio hasta ahora virgen y aislado con su entrada en la modernidad móvil. Quizás podremos ayudar el pastor massai a no perder animales de su rebaño implantando un chip vinculado al GPS. A pesar de que también podemos pensar que si han pasado sin GPS hasta ahora, también lo podrían hacer en el futuro. En último término, tanto el pastor como los alpinistas del Everest tendrán que decidir si las facilidades que los ofrece la tecnología, móvil, en este caso, servirán para preservar o para malograr su entorno.