Ingeniero y exministro

Los pasos hacia el mercado exterior

25 de Noviembre de 2013
Joan Majó
No toda empresa tiene vocación ni necesidad de convertirse en una empresa global. Pero a partir de una cierta dimensión, seguramente no tanto grande como nos pensamos, es muy conveniente agrandar la base del mercado, traspasando las fronteras tanto de Cataluña cómo de España. El mercado catalán es muy pequeño, y el mercado españoles menos seguro que no lo era hace unas décadas, en épocas de fronteras cerradas. Una gran parte de empresas catalanas tendrían que considerar ya Europa como su "mercado interior".

A la hora de plantearse este reto, hay que distinguir bien entre "exportación" y "internacionalización", y ver qué combinación de estrategias es la mejor, y en qué momento. Exportar quiere decir mantener toda la actividad creativa y de producción aquí, y vender a clientes de fuera. Esto obliga poco a poco a tener (creándola o comprándola) una red comercial propia al exterior, y este es el primer paso hacia la dimensión internacional, dimensión que sólo se completa cuando se inician también actividades productivas (nuevas o deslocalitzades) afuera.

 

Es importante dejar dedo que se pueden analizar fácilmente las ventajas y los inconvenientes para el país, en términos de puestos de trabajo o del equilibrio de la balanza exterior, de cada una de estas etapas, y ver que son bastante diferentes a lo largo de este proceso. Por eso, las políticas en relación al apoyo público tendrían que ser más especificas del que son, y tener máscuenta las consecuencias a corto y a largo plazo.