Somos en tiempos preelectorales. Las elecciones municipales se acercan y es un buen momento para reflexionar sobre qué tienen que ser las prioridades programáticas de los ayuntamientos para los años próximos. En el caso de Barcelona y su área metropolitana, la sostenibilidad ambiental constituye un de sus grandes retos, tanto en términos de calidad de vida de sus ciudadanos como de capacidad de atracción de talento, emprendedores, inversiones y turistas.
Aquí van, pues, algunas ideas sobre las prioridades que haría falta que la ciudad abordara en el próximo mandato municipal para avanzar en la sostenibilidad ambiental:
- Internalitzar costes externos
Orientar al conjunto de la fiscalidad local (impuestos municipales, tasas, precios públicos) hacia la consecución de objetivos ambientales. Incrementar y hacer cumplir las exigencias normativas en materia ambiental, especialmente en cuanto a la contaminación atmosférica y al ruido.
- Generar efectos demostración
Impulsar proyectos innovadores y singulares en colaboración con la iniciativa privada, la sociedad civil y otras administraciones. Divulgar entre la población las ventajas de la adopción de prácticas sostenibles. Promover la creación y la implantación de innovaciones técnicas y organizativas junto con las universidades y los centros de investigación.
- Estimular los comportamientos sostenibles de las actividades productivas
Desarrollo integral de la fiscalidad verde en los impuestos y tasas municipales. Incorporación sistemática desde un punto de vista ambiental las normativas referentes a licencias de obras, licencias de actividad, concesiones públicas, compras municipales, ...
- Estimular los comportamientos sostenibles de los ciudadanos
Introducir elementos tarifarios y fiscales personalizados para promover la recogida selectiva. Implementar un programa de apoyo al ahorro energético (vivienda, equipamiento doméstico). Reforzar los mecanismos fiscales y tarifarios destinados a penalizar el uso de vehículos de motor privados. Facilitar los desplazamientos a pie y no motorizados y el uso del transporte público
- Generar conocimiento y expertesa
Priorizar los desarrollos de ciudad inteligente que reducen el impacto ambiental. Desarrollar proyectos piloto que contrasten la viabilidad de nuevas tecnologías y nuevas fórmulas organizativas. Prestar apoyo a emprendedores y a empresas emergentes que ofrezcan soluciones económicamente viables a problemáticas ambientales.
- Consolidar la oferta de bienes y servicios verdes
A partir de la demanda de la administración y de las empresas y organismos municipales, se haría en los edificios y las instalaciones municipales (optimizar la eficiencia energética y el auto producción y autoconsum de energía, generalización de las compras ambientalitzades, establecimiento de progresivos requisitos ambientales en los concursos y concesiones (por ejemplo, obras públicas, licencias de taxis, guinguetes de la playa...).
- Impulsar un clúster de actividades de economía verde
Reforzar los clústeres existentes sobre agua, energía y sobre eficiencia energética. Promover nuevos clústeres vinculados a la economía verde (tratamiento de residuos, simbiosis industrial, construcción sostenible...). Estimular la cooperación entre los diferentes clústeres. Promover la aparición y desarrollo de nuevas actividads y empresas que complementen los nuevos clústeres y los ya existentes.