• Time & Glam: 'personal assistants' a medida

Time & Glam: 'personal assistants' a medida

La start-up se adapta a las necesidades de cliente para ofrecer un servicio de gestión de agenda, tanto de aspectos laborales como personales, para conciliar u organizar viajes de trabajo

    Sílvia Salvadó, fundadora de Time & Glam, y su equipo
    Sílvia Salvadó, fundadora de Time & Glam, y su equipo
    10 de Diciembre de 2014 - 05:30

    Hace tiempo que lo decíamos: el lujo se contrata en Barcelona. Ahora bien, matizamos, porque la ciudad condal destaca por encima de ninguna otra en el territorio español, pero no más allá, porque la crisis también ha afectado los bolsillos más amplios. Lo asegura a VIAempresa  la fundadora de la start-upTime & Glam, Silvia Salvadó, quién puso en marcha hace casi dos años esta agencia especializada en servicios de 'personal assistant' y propuestas de lifestyle .

    Más que un personal assistant
    "Somos una empresa boutique, con un equipo altamente especializado que ofrece soluciones integrales a la carta para apoyar a la vida familiar, social y lúdica de las personas", explica Salvadó sobre la actividad de su negocio.

    Con esta idea en mente, la pregunta es, en que se diferencia de un personal assistant? "En que ofrecemos un plus, el de que trabajamos más allá del entorno profesional y entramos en la conciliación", responde la CEO. Además, destaca que la secretaria o quien trae la agenda de un empresario al trabajo no puede dar un servicio personalizado como sí hace Time & Glam.

    En este sentido, destaca que atienen hasta el más pequeño detalle: "Cada persona es un mundo y tiene inquietudes diferentes, como también es diferente cada época del año. Todo esto lo tenemos en cuenta". Eso sí, con los servicios premium, donde Salvadó subraya que saben solucionar y ser flexibles a cualquier demanda que haga el cliente.

    Un cliente exigente, pero afectado por la crisis 
    Tienen también un target de nivel adquisitivo elevado y muy exigente. Dice de estos clientes que "tienen agendas muy ocupadas, que saben el que quieren y que necesitan significar su día a día disfrutando de experiencias únicas y diseñadas sólo para ellos".

    Además de los directivos catalanes y españoles que tienen en cartera, cuentan también con clientes otros países que venden en Barcelona de manera temporal a hacer negocios. "Normalmente son inversores", puntualiza la fundadora, y añade a continuación que es en este segmento extranjero donde hay el grueso del negocio. El porque se encuentra en la crisis, la cual Salvadó asegura que ha afectado duramente en el Estado español y al sector del turismo, los congresos y los viajes de empresa. "Hasta que esto no vuelva a remontar..." deja el comentario en alto.

    Y a pesar de saber que el cambio de hábitos de los directivos –más prudentes con los gastos- ha afectado la profesión, la fundadora de Time & Glam reconoce que eran, son y serán un servicio atractivo por quien no saben como organizar su agenda. "Con nosotros ganan el tiempo que hasta entonces perdían y lo destinan a aquello que quieren, al que tiene más valor a su vida. Sabemos que cuando todo mejore, lo notaremos", dice.

    Ante las malas cifras, pensar en positivo
    Esta es la actitud que tiene Salvadó. Lo avala citando las estadísticas que definen el sector, las que según nos explica auguran un incremento de beneficios anuales hasta el 2020. Ella prefiere, pero, pensar además corto plazo: "Hasta entonces tenemos mucho a recorrer. Ahora pensamos en el 2015 y creemos que seguiremos con buenos números".

    Cómo que su cuota de negocio se encuentra en los inversores que venden en España a conocer el mercado, focalizan gran parte de la atención en ellos. Pueden prestarlos servicios por una semana, diez días o incluso firmar un contrato anual que se puede ir renovando y acabar encadenando un total de tres años. Salvadó argumenta que es un cliente fructífero porque "quiere información de los vuelos, reservas de restaurante, un intérprete... Todo el viaje tiene que estar coordinado al minuto y de estar atendido durante todo el día".

    En términos monetarios, este tipo de contratos pueden llegar a generar presupuestos de más de un millón de euros. Sin embargo, "son negocios a largo plazo", deja claro la CEO, de forma que no saben nunca si una conversación acabará convirtiéndose en negocio.

    Sobre esto, detalla que trabajan con individuos, no con empresas. Una persona ofrece mayor estabilidad, no tiene un presupuesto tan volátil como el de una compañía, así que se centran en la fidelización más de clientes que no de marcas.

    Un bagaje profesional importante
    Cuando no hay mentores, ni programas de emprendeduría, ni cabe otro apoyo, tener experiencia profesional previa y un nicho de mercado detectado es la clave. Es el caso de Sílvia Salvadó, quien cuenta con más de 11 años a Areas  en su currículum, entre otras multinacionales. "Apoyaba a los equipos directivos de entonces, así que vi qué es el que se necesita y se busca en el terreno del personal assistance", recuerda.

    A la busca de capital
    Time & Glam tiene dos socios y ha construido sus bases con créditos de los bancos. "Hemos presentado rondas de financiación", reconoce Salvadó, pero sin éxito. Critica que este tipo de captación de fondo están demasiado centrados en proyectos tecnológicos o biomédicos y que el turismo "ha quedado parado". "Es como que el mercado no es bastante maduro por según qué negocios", lamenta.

    Sí que han recibido, en cambio, solicitudes de inversores de fuera, pero la CEO revela que hoy por hoy prefieren crecer poco a poco y mediante inversores locales. El porque rae en su confianza por el talento autóctono, "porque aquí tenemos empresas que pueden generar negocio y riqueza", afirma. Potenciando y consolidando en Cataluña este sector, se podrá fortalecer también su profesionalidad de cara a salir afuera.

    Hasta entonces el equipo está formado por tres personas. Aun así, Salvadó detalla que es un sector con subidas y bajadas, porlaestacionalitat de los congresos y ferias, que los obliga a depender de "más personas externas" cuando hay una punta de trabajo y los clientes piden servicios extras.