La Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona se han puesto de acuerdo en prohibir por ley la actividad de los bicitaxis. Este ha sido el resultado de la primera reunión del grupo de trabajo dedicado a esta cuestión, que cuenta con miembros del Gobierno y del Ayuntamiento. El secretario general del Departamento de la Vicepresidencia y Políticas Digitales, Ricard Font, ha avanzado que se modificará la ley del taxi para que excluya las bicicletas como vehículo válido para prestar el servicio.
Se actualizará el régimen sancionador de la ley, que ahora mismo regula desde la inmovilización del vehículo hasta una multa de 6.000 euros, en el caso más grave. Font ha dicho que el objetivo es "fortalecer e incrementar" la sanción.
Font detalló que se modificará el artículo 20 de la ley del taxi, que es el que regula las características que debe tener un vehículo para ser considerado un taxi, y se excluirá los ciclos.
Si se aprueban los presupuestos de la Generalitat, la prohibición será efectiva el 1 de enero de 2023. En caso contrario, se tendrán que buscar otros mecanismos
Este cambio se hará a través de la ley de medidas complementarias de los presupuestos de la Generalitat para el 2023, de forma que si se acaban aprobando las cuentas la modificación legislativa estará en vigor desde el 1 de enero. En caso de que no se acaben aprobando los presupuestos, Font indicó que existen "otros mecanismos" para aprobar el cambio, pero que pueden alargar el proceso "unas semanas".
Jaume Collboni, primer teniente de alcalde: "La imagen de los bicitaxis no es coherente con un turismo de calidad"
Por su parte, el primer teniente de alcalde de Barcelona, el socialista Jaume Collboni, se sumó al acuerdo. Recordó que se trata de una propuesta que el Ayuntamiento trasladó al Gobierno en el marco de la comisión mixta que se reunió el 2 de junio, cuando se acordó crear el grupo de trabajo.
Collboni argumentó la prohibición de los bicitaxis porque "no es coherente con la imagen y el mensaje que quiere dar la ciudad de Barcelona", enfocada a un "turismo de calidad". También ha asegurado que la actividad es "una fuente de precariedad de todo tipo". Precisó que para poder realizar el servicio de taxi hace falta una licencia, que los bicitaxis no tienen.
Régimen sancionador
Una de las cuestiones que queda pendiente de cerrar son las sanciones que se aplicaran alos que incumplan la norma. Según detalló Font, ahora mismo ya se contempla inmovilizar el vehículo e imponer una multa de 6.000 euros, que es la sanción más dura. De todos modos, añadió que están trabajando para actualizar el régimen sancionador y endurecerlo para que los importes sean más elevados. Con todo, apunto que esta cuestión se deberá negociar, puesto que se aplicará con la ley de medidas de los presupuestos de la Generalitat para 2023, que todavía no está aprobada.
Según datos del Ayuntamiento, hasta ahora se han inmovilizado 40 vehículos y se ha impuesto 1.400 sanciones, si bien los importes son muy menores.