El 38% de los catalanes ha modificado sus hábitos de compra debido al cambio climático

El desperdicio alimentario es un problema real para el 95% de los hogares catalanes y preocupa a 4 de cada 5 consumidores

9 de cada 10 consumidores cree que el cambio climático afecta negativamente al cultivo de algunos alimentos | ACN 9 de cada 10 consumidores cree que el cambio climático afecta negativamente al cultivo de algunos alimentos | ACN

Cerca de 2 de cada 5 familias catalanas (38%) ha modificado sus hábitos de compra a causa del cambio climático. Así se desprende de la quinta edición del Observatorio de Frescos de ALDI, que revela que la mayoría de los consumidores de Cataluña prioriza en su compra los productos de temporada (60%), a granel o con menos plástico en sus envases (56%) o de proximidad (56%), con el fin de llevar a cabo una compra más sostenible y responsable con el entorno.

El informe constata que los cambios de hábitos de las familias catalanas están estrechamente ligados a una preocupación transversal ante los efectos del cambio climático. De hecho, 9 de cada 10 consumidores cree que el cambio climático afecta negativamente al cultivo de algunos alimentos, principalmente de las verduras (67%) y las frutas (65%); seguidas del pescado y el marisco fresco (49%), la carne fresca (27%) y los huevos frescos (16%)

La mayoría de los consumidores prioriza los productos de temporada, a granel o con menos plástico en sus envases, o de proximidad

El desperdicio alimentario: la gran preocupación

Otra de las principales preocupaciones de los hogares catalanes es el desperdicio alimentario: el 95% ya lo considera un problema real y 4 de cada 5 reconoce que es algo que le preocupa mucho o bastante.

Según el informe, la mayoría de los catalanes y catalanas ya ha adoptado medidas para reducir el desperdicio alimentario, como comprar cantidades limitadas o únicamente lo que se vaya a consumir (63%), congelar alimentos para consumirlos más adelante (58%) o revisar las fechas de caducidad (57%).

Més info: Mercabarna inaugura Foodback para evitar el derroche de 4.000 toneladas de alimentos

En este contexto, han surgido iniciativas para combatir el desperdicio alimentario, como por ejemplo el Foodback de Mercabarna que se puso en marcha hace un año. Se trata de un centro pionero de reaprovechamiento de frutas y verduras no comercializables, pero que son perfectamente aptas para el consumo humano. El proyecto pretende multiplicar por 2,5 el aprovechamiento alimentario en cinco años, pasando de las 1.500 toneladas de alimentos aprovechados actualmente a las 4.000 toneladas.

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