El Govern prevé que la economía catalana crezca un 2,1% este año, tres décimas más de lo proyectado inicialmente, impulsado por el consumo de los hogares y la contribución de la demanda externa. Las nuevas proyecciones macroeconómicas publicadas por el departamento de Economía y Hacienda apuntan a la creación de unos 53.500 nuevos puestos de trabajo durante este año, y sitúan la tasa de desempleo en el 9%, el nivel más bajo desde 2008. Asimismo, el Ejecutivo prevé que el crecimiento se mantenga también en 2025 en el 2,1%, con una ligera moderación en la creación de empleo, con la creación de 43.500 puestos de trabajo y un desempleo del 8,9%.
Las nuevas estimaciones de Economía y Hacienda mejoran las previstas en los presupuestos fallidos de 2024, que era un crecimiento del 1,8%. Sin embargo, el crecimiento para este año es cinco décimas menor que el de 2023, que se cerró en el 2,6%. La previsión de un crecimiento del 2,1% permitirá situar el PIB por encima de los 300.000 millones de euros por primera vez. El impulso a la economía lo darán tanto la demanda interna (1,6 puntos) como la externa (0,4 puntos), pero con una contribución especialmente importante del consumo de los hogares, que aumentará hasta el 2,5% por el dinamismo del empleo, el aumento de salarios y la contención de la inflación.
La previsión de un crecimiento del 2,1% permitirá situar el PIB por encima de los 300.000 millones de euros por primera vez
En cambio, las previsiones del Govern apuntan a una moderación del consumo público hasta el 1,4%, ya que este año se reactivarán las normas fiscales europeas que obligan a controlar el déficit de las administraciones públicas. De acuerdo con los pronósticos de Economía, las exportaciones crecerían un 1,7% y las importaciones lo harían en un 1,2%.
Las previsiones laborales apuntan a una creación de empleo más suave que en 2023, con un aumento del 1,5% y 53.500 nuevos empleos, con el desempleo en el 9%, el nivel más bajo desde 2008. De cara a 2025, el Govern también prevé un aumento del PIB del 2,1%, con una aceleración de una décima de la demanda interna (1,7%). El consumo de los hogares se moderará hasta el 1,7%, mientras que se mantendrá el consumo público (1,5%). Por su parte, el pronóstico es que la demanda externa aporte en 2025 0,4 puntos, con unas exportaciones e importaciones al alza, en un 3,1% y un 2,8%, respectivamente.
Finalmente, en cuanto al empleo, el pronóstico del Govern para 2025 es que se modere tres décimas hasta el 1,2%, con la creación de 43.500 nuevos puestos de trabajo y una reducción leve del desempleo hasta el 8,9%.