El gobierno español ha elevado este lunes sus previsiones de crecimiento del PIB de 2023 hasta el 2,4%, tres décimas más que en la anterior proyección publicada en abril. Sin embargo, recorta las perspectivas de cara a 2024 y la sitúa en el 2%, cuatro décimas menos por el impacto de los tipos de interés del Banco Central Europeo y los conflictos geopolíticos en desarrollo. Según consta en el plan presupuestario enviado a Bruselas, se mantiene ,sin embargo, el objetivo de cumplir con las metas de déficit hasta situarlas en el 3% en 2024. Desde el ministerio de Asuntos Económicos destacan que esta cifra supone una reducción de más de siete puntos en los últimos cuatro años.
Recientemente, la Cámara de Comercio avisó de que el PIB per cápita en Catalunya se encuentra "estancado" a niveles de 2007 y todavía no ha recuperado los registros prepandemia. Así lo muestra el balance de los Indicadores de Progreso y Bienestar (IPB), que la entidad publica periódicamente para medir el crecimiento de la economía. El jefe del Gabinete de Estudios Económicos del organismo, Joan Ramon Rovira, ha remarcado que aunque la economía catalana ya ha recuperado el nivel de PIB que tenía antes de la pandemia, no lo ha hecho en términos de PIB per cápita, pese al "dinamismo" de los últimos dos años, lo que se atribuye a factores demográficos. El organismo anticipa que el indicador puede recuperar los registros previos a 2019 en los próximos trimestres.
El organismo remarcó que el progreso económico de Catalunya ha seguido una tendencia creciente, pero condicionada a los ciclos económicos. En este sentido, recordó que los estudios de los últimos meses apuntan a un estancamiento de los salarios reales durante las últimas décadas y un crecimiento "desequilibrado" de la productividad. Por otra parte, la Cámara también expuso que en materia energética, el despliegue de energías renovables en Catalunya "no avanza en el ritmo deseado". Según el ente, debería destinarse el 0,67% del PIB catalán de cada año a inversiones relacionadas en energías limpias para alcanzar los objetivos climáticos planteados para 2050.