
Humildad y vocación de servicios. Estos son los valores que han llevado al Grup Andreu a convertirse en un referente en el diseño, desarrollo y puesta en marcha de procesos industriales. Una trayectoria que les ha llevado a participar en las plantas de Porsche en Alemania, Airbus en Francia o Mercedes en Vitoria.
La pandemia supuso un golpe muy duro para la compañía de Valls, que se vio obligada a replegarse en el Camp de Tarragona, donde en los últimos años ha centrado su actividad, trabajando en la mayoría de los grandes proyectos industriales de la zona. Kellog's, Revlon, Lear Corporation o Gomà-Camps son algunos de los líderes mundiales con presencia en Catalunya con los que ha colaborado el Grup Andreu. Una vuelta a casa exitosa: entre 2020 y 2024, su facturación ha pasado de 6 a 13 millones de euros y dan trabajo a 130 personas.
La aventura emprendedora
Los inicios del Grup Andreu se remontan al año 2004, cuando Jordi Andreu dejó su trabajo como responsable eléctrico en una empresa para emprender su propio camino. Su tarea inicial era el apoyo al mantenimiento eléctrico y tecnológico en la industria. "Lo quería hacer con una empresa pequeña, no teníamos ni el objetivo de llegar hasta donde estamos ahora", explica el fundador.
Con la llegada de la crisis económica de 2008 llegó un punto de inflexión. De manera accidental, la empresa entra en el sector de la automoción: "Una empresa de Badalona buscaba técnicos para ir a Volkswagen en Pamplona y nos sumamos". En Alemania había mucha falta de técnicos, y se les abrieron las puertas de Volkswagen en Wolfsburg, el "kilómetro cero y la catedral de la automoción".
Jordi Andreu: "Nos despertó y sacudió"
En aquel momento, Andreu Manteniment era una pequeña empresa de una veintena de trabajadores. De repente, accedieron a un mundo mucho más profesional y exigente: "Nos despertó y sacudió. Nos tuvimos que espabilar". Aunque todavía se centraban en la parte eléctrica y de mantenimiento de los procesos industriales, supuso un empuje a toda la compañía. "El rasgo diferencial de todo nuestro proyecto se basa en esta iniciativa de arriesgarnos a ir a un país como Alemania, salir fuera con todos los cambios que representaba", recuerda Andreu.
A partir de 2014 tuvieron claro que debían crecer para sobrevivir y, sobre todo, para fidelizar a su personal y dar oportunidades de desarrollo. "El talento necesita espacio para crecer y nos fijamos una estrategia de crecimiento", explica el fundador, que remarca que una de sus prioridades es la parte humana de su equipo. Desde entonces, han crecido cada año por encima de los dos dígitos, a excepción de la pandemia.
Porsche, Mercedes y Airbus
A partir de 2018, diversifican su actividad y se adentran también en los procesos mecánicos y fabricación de cableado y cajas eléctricas. Así, agrupaban la parte mecánica y eléctrica: "El objetivo era ofrecer un servicio integral y que cualquier empresa que tuviera un problema o un proyecto, pensara en nosotros".
Todo ello les llevó hasta algunas de las plantas productivas más relevantes de Europa como la de Volkswagen en Hannover, Porsche en Leipzig o Airbus en Francia. En la automoción, fueron los encargados de diseñar e instalar líneas de producción con decenas de robots y controles. Por ejemplo, con el Porsche Macan. Con Airbus, se responsabilizaron de líneas productivas para hacer piezas del A-350 y el A-320.
Como en casa, en ningún sitio
Con la pandemia, la actividad internacional se detiene y la crisis se ensaña con Andreu, que sufre una reducción drástica de la facturación. "Decidimos centrarnos en proyectos de la provincia de Tarragona", enfatiza Andreu. La reputación y la marca que se habían ganado en los últimos años, les permite entrar en algunas de las industrias más potentes del sur de Catalunya, donde hay empresas que son líderes mundiales.
"Desde entonces, no ha habido proyecto industrial importante en el Camp de Tarragona en el que no haya participado el Grupo Andreu", celebra Jordi. Revlon, Kellog’s, Saint-Gobain, Laboratorios Maverick, Salaet o Nestlé son sólo un pequeño ejemplo de las empresas con las que ha trabajado Andreu, tanto en la puesta en marcha de nuevos procesos industriales como en su mantenimiento. El fundador del grupo destaca que cuentan con "clientes recurrentes" que confían año tras año con ellos. El conocimiento del sector y la proximidad con todas las empresas les supone una ventaja competitiva.
Andreu: "Es muy bonito trabajar en Porsche, pero si lo podemos tener en Tarragona, mejor"
Actualmente, Grup Andreu se encarga de todo el proceso de puesta en marcha de un nuevo proceso industrial: desde el diseño, la ingeniería y el proceso hasta la instalación y mantenimiento. "Hace unos años estábamos en una posición de apoyo técnico; hoy nos hemos convertido en una asesoría desde primera instancia. Y todos los proyectos los hacemos desde nuestra casa, con más de 130 personas".
Este repliegue en Tarragona y Catalunya no ha sido sólo con visión empresarial, sino también humana: "Nos gusta más trabajar por aquí. Para los trabajadores, no es lo mismo tener que estar seis meses en Alemania, que poder moverse por aquí". "Es muy bonito trabajar en Porsche, pero si lo podemos tener en Tarragona, mejor".
20 millones de euros en Tarragona
Paralelamente, desde 2018 se fue formando un holding con la creación de nuevas empresas dentro del grupo y la adquisición de otras. También fue una salida para superar la pandemia: "Pasamos de unas expectativas muy malas a volver a crecer". En parte fue gracias a la facilidad para acceder a la financiación. Hoy en día, el Grup Andreu reúne seis compañías que van desde la instalación de placas solares hasta el mantenimiento industrial o la fabricación de cableado. Pero todas comparten la gestión administrativa a través del grupo, una clave que les aporta competitividad.
Con todo este recorrido, el Grup Andreu quiere alcanzar los 20 millones de euros de facturación en Tarragona en 2030 y, al mismo tiempo, ganar presencia en otras regiones como el Vallès. Y hacerlo manteniendo los valores de humildad y vocación de servicio. "Si no tienes vocación de servicio y compromiso con los clientes, es imposible", reivindica Andreu, que concluye: "Y la clave es rodearte de personas adecuadas y preparadas".