Bon Preu tiene motivos para celebrar en 2023. Después de cerrar el 2022 con una facturación de 2.076 millones de euros y convertirse en uno de los principales líderes en el ranking de supermercados, genera más de 22.900 puestos de trabajo, de forma directa e indirecta, en Catalunya. Una apuesta por el crecimiento en años de máxima complejidad para el sector de la distribución debido al aumento de precios y la inflación de los alimentos, que no les ha frenado en la construcción de una nueva central logística en Montblanc, para expandirse hacia el sur de Catalunya, uno de los deberes pendientes. Y, sin ocultar sus orígenes, como es "el orgullo osonense", con la apertura de un ambicioso supermercado en el municipio de Tona, de 8.100 habitantes, con una inversión de 6,5 millones de euros y 26 puestos de trabajo en la histórica Plaza Mayo.
Los orígenes de lo que hoy es uno de los grupos de distribución más importantes con sede en Catalunya no están muy lejos de Tona, a la espera de inaugurar hoy un nuevo Esclat en Sitges, según detalla la compañía a VIA Empresa. Todo comenzó en la calle del Pont, en Torelló (Osona), donde el presidente y único propietario de Bon Preu, Joan Font (1951), se incorporó desde muy joven al negocio que regentaban sus padres, conocidos como los bacallaners Font. Después de varios viajes por Europa y haber visto nuevas formas de comercio, con tan solo 23 años abrió en 1974 su primer supermercado en la población vecina de Manlleu. Su hermano Josep, dos años más joven, se incorporó al negocio que quedaría repartido a partes iguales.
Con el paso de los años, abrieron un nuevo servicio en Vic y, poco después, en Vilafranca del Penedès con el primer hipermercado bajo la enseña Esclat. Como curiosidad, en el caso osonense tuvo que intervenir la Guardia Civil durante el primer día de apertura debido a la gran expectación popular desatada que obligó a los agentes a tener que poner orden en la calle. Cabe destacar que, con el paso de los años, uno de los motivos de su crecimiento tiene que ver con la apertura de nuevos establecimientos. En cuanto a adquisiciones, solo han comprado las redes de Orangután e Intermarché.
Font ha impregnado Bon Preu con una militancia activa en favor de la lengua y la cultura catalanas, hasta convertirse en símbolo del empresariado que ha respaldado el independentismo
Entre las principales características del modelo de negocio destaca la variedad de productos, la mayoría de kilómetros cero y la importancia del catalán en todos los productos y en la atención al cliente. De hecho, muchos trabajadores de origen extranjero que trabajan en la cadena de supermercados confiesan que "han aprendido de forma exprés el idioma por el énfasis en utilizar el catalán en todas las comunicaciones". Además, Font ha impregnado la marca con una militancia activa en favor de la lengua y la cultura catalanas, llegando a convertirse en símbolo del empresariado que ha respaldado el independentismo. Además, Joan Font tiene un papel destacado en el lobby empresarial Femcat, como patrón y cara más mediática.
Hace pocos años, Joan Font, presidente de Bon Preu, y los hermanos Josep, Óscar y Mertitxell Vall Esquerda, propietarios del grupo agroalimentario Vall Companys, irrumpieron en la última edición de la lista Forbes de las 100 personas más ricas del Estado. A Font, en la posición 90, se le atribuye un patrimonio de 375 millones de euros. Aunque hay varios rankings de El Mundo que lo sitúan en una posición diferente, el empresario se ha convertido en uno de los profesionales más ricos de Catalunya.
Entre las principales características del modelo de negocio del Grup Bon Preu destaca la variedad de productos, la mayoría de kilómetro cero y la importancia del catalán
Después de varias disputas entre los dos hermanos Font Fábregó, concretadas en la política de remuneraciones de los administradores y de distribución de dividendos de Bon Preu, cerraron el acuerdo en el verano de 2019 que puso punto final al litigio judicial sobre Bon Preu y Joan se comprometió a pagar cerca de 350 millones de euros, de manera escalonada, a su hermano menor Josep por su 50% de este grupo de distribución. Desde entonces, Josep ha llevado a cabo una intensa y diversificada actividad inversora, como se detalló en las inversiones de los hermanos Joan y Josep Font después de separarse en Bon Preu.
Una estructura y varias actividades
Con los nuevos establecimientos de Tona y Sitges, el Grup Bon Preu ya cuenta con 137 supermercados Bonpreu, 57 supermercados Esclat, 25 centros de recogida de la compra en línea, 60 gasolineras EsclatOil, 14 minimercados y más de 70.000 hogares adheridos a la comercializadora de energía eléctrica BonpreuEsclat Energia. Su sede central se mantiene en Osona, en les Masies de Voltrega y cuentan con 9.600 trabajadores distribuidos por todo el territorio.
En estos momentos, el grupo está en un proceso de expansión. Entre sus proyectos, destaca la construcción de la nueva central logística de Montblanc, que le permitirá duplicar su tamaño y expandirse al sur de Catalunya, donde aún tiene margen para ganar presencia comercial. El complejo estará completado en dos años, con una superficie total de 103.600 m2 y una inversión de 204 millones. En este caso, se trata de la segunda ciudad logística, ya que la primera se mantiene en Hostalets de Balenyà (Osona) y es ampliamente notoria y visible para los conductores que circulan por la C-17 en dirección a Puigcerdà. Según señalan desde la compañía, está previsto comenzar las obras en el primer semestre de 2025, y aún no hay fecha de cuando se podrá poner en funcionamiento
Entre los principales proyectos de expansión de Bon Preu destaca la nueva central logística de Montblanc que le permitirá doblar su tamaño y extenderse al sur de Catalunya
"La Ciudad Logística de Montblanc es una inversión estratégica de enorme relevancia porque garantiza la capacidad presente y futura de poder continuar creciendo a medio y largo plazo, permitiendo duplicar nuestra capacidad y ser más eficientes y cercanos para suministrar a los establecimientos de Ponent y del sur del país", detallan en VIA Empresa.
En cuanto a nuevas aperturas de cara a 2025, pronostican abrir dos Bonpreu en Teià y Terrassa, dos Esclat en la Seu d’Urgell y Canovelles, además de un minimercado en Cabrera de Mar. En cuanto a las gasolineras EsclatOil, habrá una nueva en El Vendrell y otra en Sant Pere de Ribes. La inversión total prevista será de 150 millones de euros, un récord histórico del grupo en un ejercicio. Cabe destacar que en 2022 invirtieron 109,2 millones de euros, un 5,5% más que el año anterior, en aperturas y reformas. Bon Preu, de Osona al resto de Catalunya con una expansión cuidadosa.