​Cóndor, los leotardos de la Corona británica

La firma textil hace 120 años que viste generaciones de niños catalanes y tiene entre sus compradores norte-europeos la familia real británica

Los niños de la familia real británica con calcetines Cóndor | Cedida Los niños de la familia real británica con calcetines Cóndor | Cedida

De sus talleres de Arenys de Mar salen leotardos y calcetines de hasta 67 colores diferentes. Los grises, por ejemplo, son los que lució la pequeña princesa Charlotte del Reino Unido en su primer día de guardería. La firma Cóndor, fundada en Arenys de Mar pero de propiedad igualadina, hace 120 años que calza los niños catalanes con calcetines y leotardos y ahora, gracias al exitosa exportación que han iniciado, también viste ingleses, alemanes, noruegos... Y es que el frío es un buen aliado suyo y tiene buena parte de culpa de sus 18 millones de euros de facturación.

"Vendemos mucho en el Reino Unido, muchísimo, los encantan nuestros productos y hemos tenido la suerte que la familia real a los príncipes se los ponen siempre nuestros leotardos que los compran a nuestro cliente de Chelsea. Han salido a todas las revistas y esto también nos ha dado una propaganda enorme como proveedores de los calcetines de las criaturas de la Casa Real", explica Roser Ramos, directora general de esta empresa textil.

Més info: "Dar un paso adelante vale dinero pero tienes que apostar"

Este hito, importando por la promoción de la marca, es fruto del trabajo de los últimos 10-12 años de la compañía. "Antes el que se fabricaba prácticamente era para venderlo en el mismo territorio español, pero antes de la gran crisis ya empezamos a montar un departamento, a dedicarle recursos, humanos y económicos, y empezamos a menearnos por el mundo. Y nos dimos cuenta que el nuestro era un producto atractivo y que en todas partes donde íbamos, gustábamos y ahora estamos en todo el mundo", explica con orgullo.

Ramos: "Nos dimos cuenta que el nuestro era un producto atractivo y que en todas partes donde íbamos, gustábamos"

Aretex SANO fue fundada el 1898; primero fue propiedad de la familia Riera, fundadora de la firma de Arenys de Mar. Después, pasada una época difícil en que incluso la fábrica sufrió un incendio, el 1970 fue comprada por la familia Valls de Igualada y es una de las seis empresas del grupo empresarial Corporación Empresarial Valls, que también gestiona tiene Punto Blanco, otras empresas de artes gráficas e hilaturas. Con este carácter legendario, Cóndor aglutina una plantilla de 220 trabajadores en que se conjugan dos cosas: "La experiencia continuada de gente de toda la vida, que trabaja 40 años en la casa, y gente joven viene muy preparada académicamente. Esta fusión de estas dos tendencias hace que la empresa tenga un ritmo no siempre acelerado, porque hay quién frena para pensar, pero esta fusión hace que la empresa funcione mucho y muy bien", apunta Ramos.

Una fábrica vertical

Ubicados en el centro de Arenys de Mar, la fábrica de Cóndor tiene 10.000 metros cuadrados y la próxima dedicada al producto acabado, con 4.600 metros cuadrados, se ubica en Arenys de Munt. "Allí hacemos un producto de género de punto a casa nuestra y es vertical, desde la entrada del hilo, lo teñimos, lo hilamos, el texturem... lo hacemos todo hasta el producto acabado. Nuestros referentes son la calidad y el color, somos la marca a escala mundial dentro del mundo infantil que más colores ofrecemos: ahora son 67 colores diferentes y ya hay gente que encuentra que falta algún moratón y ya traemos 18!", comenta la directora general de la compañía que, a la vegada, es portavoz del clúster MODACC.

Filatures a la fàbrica de Cóndor | Cedida
Hilaturas en la fábrica de Cóndor | Cedida

Desde esta perspectiva de representación sectorial, Ramos matiza la importancia que la exportación ha tenido para el textil en estos años de crisis económica. "El mundo se ha hecho pequeño porque es mucho más fácil de llegar, antes ir a los Estados Unidos o intentar vender allá era una cosa de ciencia-ficción, imposible por todas las barreras, por el desconocimiento que había, no había la mentalidad. Hoy en día ir a vender en los EE.UU. no te diré que sea relativamente fácil -porque mis colegas me matarán porque es complicado- pero un golpe estás, o un golpe tienes la mentalidad de ir, te lo trabajas y puedes ser con más o menos presencia. Los EE.UU. es nuestro primer país exportador, es donde vendemos más", apunta.

De hecho, la exportación supone el 30% de su facturación: Portugal, Francia, Alemania, Noruega, Dinamarca, Bélgica, Reino Unido, los EE.UU.... 40 países en total. El otro 70% se queda en el territorio español, donde vienen desde tiendas propias, cornes al Corte Inglés y establecimientos multe marca. "A medida que vas teniendo éxito cuando estás vendiendo afuera, tú mismo te vas animando y dices, "Ostras, esto funciona!". Y resulta que los que marchan, los que me decían que era una tonteria fabricar aquí los calcetines y que teníamos que ir a la China porque allí eran mucho más baratos, pues resulta que ahora ya no están y nosotros, que seguimos fabricando en Arenys de Mar, somos los que se los vendemos los calcetines a los chinos porque hacemos una calidad y trabajamos de una manera que ellos no lo saben hacer", comenta orgullosa la máxima directiva de Cóndor.

Treballadora a la fàbrica de Cóndor | Cedida
Trabajadora en la fábrica de Cóndor | Cedida

Més informació
Punto Blanco, calcetines con visión exportadora
Hoy Destacamos
Lo más leido