BonÀrea hace historia. La empresa de Guissona especializada en productos cárnicos ha invertido hasta ahora 223 millones de euros en el centro alimentario de Épila, en Aragón, en la que será la mayor inversión de su historia y la puesta en marcha más ambiciosa de su modelo de integración vertical. Un modelo que abarca todas las fases del proceso productivo, desde el campo hasta el consumidor final. Este proyecto le permitirá dar el salto hacia Madrid, Levante y el País Vasco, y aumentar la capacidad productiva hasta un 60% más que en Guissona. Con esta apuesta, bonÀrea protagoniza un paso histórico, consolidándose como un modelo productivo y logístico de referencia dentro del sector agroalimentario europeo.
El complejo, iniciado en 2018, ocupa 180 hectáreas destinadas a concentrar las actividades industriales, logísticas y de distribución del grupo. “Es uno de los pilares estratégicos de la compañía para su expansión nacional”, ha explicado Ramon Alsina, consejero delegado de bonÀrea Agrupa durante una visita a las instalaciones para los medios celebrada este martes, guiada por el director de obra del polígono industrial de Épila, Javier Jiménez. VIA Empresa ha podido conocer de primera mano el funcionamiento de estas infraestructuras clave, que actualmente operan al 25% de su capacidad total.
Alsina (bonÀrea): “Épila es la pieza clave que nos permite llevar el modelo de bonÀrea a más hogares de España”
El centro alimentario de Épila, con cerca de 200 trabajadores, suministra 132 tiendas -de las más de 600 de bonÀrea- principalmente en Aragón, Navarra y La Rioja, y representa un punto de inflexión para la expansión del grupo. “Épila es la pieza clave que nos permite llevar el modelo de bonÀrea a más hogares de España”, afirma Alsina. Sin embargo, Guissona continuará siendo el centro logístico principal. Es decir, Épila no lo sustituye, sino que lo amplía y lo refuerza. “Es un centro situado en Aragón que incrementa nuestra capacidad productiva y de servicio, y que nos facilita el acceso a nuevos mercados que, desde Guissona, presentaban dificultades logísticas”, añade.
Inversión superior a los 400 millones de euros

El punto estratégico para la expansión nacional de bonÀrea ofrece una experiencia inmersiva, transportándote a las diferentes estancias destinadas a las actividades industriales, logísticas y de distribución del grupo. Como curiosidad, la ambición es que, en el futuro, cuando el complejo esté plenamente operativo, sea un auténtico motor económico y social para este territorio. Se prevé que esté a pleno rendimiento en el año 2030, con unos 4.000 trabajadores y una inversión superior a los 400 millones de euros.
Se prevé que el centro de Épila esté a pleno rendimiento en 2030, con unos 4.000 trabajadores y una inversión superior a los 400 millones de euros
Su propuesta de valor se fundamenta en el hecho de que el grupo ofrece directamente al consumidor los productos que elabora, sin intermediarios, garantizando origen, frescura, calidad y un precio competitivo. Su objetivo es que “cada vez más personas de toda España puedan beneficiarse de este modelo, independientemente de si viven en una gran capital o en un pequeño pueblo del interior”, ha matizado Jiménez.
Por otro lado, Jiménez ha destacado que ya funciona una planta de frutos secos y un lavadero de las cajas blancas reutilizables con las que la empresa transporta sus productos hasta el destino final.

La compañía calcula un aumento de facturación del 5% para este ejercicio, elevando así sus ingresos respecto a los 2.680 millones de euros de 2024. Actualmente, dispone de puntos de venta en Catalunya, Madrid, Aragón, Comunidad Valenciana, Navarra, La Rioja, Castilla-La Mancha y Andorra. Este año, prevé incorporar hasta 18 nuevos establecimientos, además de trasladar o ampliar 22 comercios existentes.
La compañía calcula un aumento de facturación del 5% para este ejercicio, elevando así sus ingresos respecto a los 2.680 millones de euros de 2024
En cuanto a las perspectivas de futuro, bonÀrea tiene como objetivo que la próxima primavera se abra una nave de productos líquidos, donde se empezará a tratar y envasar leche, y, de cara al año que viene, se empezarán las obras del área destinada a la producción de alimentos para mascotas.
El proyecto RetornA, economía circular en la carne

Cuando VIA Empresa ha preguntado a la compañía sobre el proyecto de sostenibilidad RetornA -un sistema de economía circular que permite a los consumidores devolver bandejas de productos cárnicos a sus tiendas para que puedan ser reutilizadas-, han reconocido que ha tenido una buena acogida entre los compradores de Tarragona, donde se ha probado en 57 tiendas. Aun así, han subrayado que la dificultad de esta iniciativa radica en intentar “cambiar un hábito” en el consumidor.
El proyecto RetornA ha tenido una buena acogida entre los compradores de Tarragona, donde se ha probado en 57 tiendas
Las cajas de RetornA, en las que el alimento va envasado en una bolsa de plástico sin tocar la bandeja, permiten reducir 25 gramos de plástico de un solo uso e incorporan un chip para registrar sus movimientos y lavados. En las últimas semanas, se ha hecho una nueva inversión de 300.000 euros en el proyecto, con la previsión de expandirlo a otras tiendas de Catalunya.