Las 11 estaciones de esquí alpino y nórdico distribuidas por el Pirineo de Lleida se muestran optimistas de cara al inicio de la temporada y confían en igualar el millón y medio de forfaits vendidos la pasada campaña. Los complejos han realizado una inversión de 24 millones de euros y ahora están pendientes de nevadas importantes para anunciar más aberturas de pistas ya que, de momento, solo arranca este sábado Baqueira Beret, con 36 kilómetros. El incremento de los costes energéticos es el principal quebradero de cabeza de las estaciones, que en la gran mayoría han decidido subir el precio del forfait para poderlos afrontar. El presidente de la Asociación de Estaciones, Joaquim Alsina, ha apuntado que el esquí es una "adicción" y los clientes no dejarán de ir por la subida de la inflación, según informa la ACN.
El presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn, fue el encargado de conducir el acto de presentación de la temporada 2022-2023 de las estaciones de esquí de esta demarcación. Anticipó que si el clima acompaña podría durar 136 días, hasta el 10 de abril. En este sentido, recordó que los ingresos de la pasada temporada se elevaron a 270 millones de euros. Según Talarn, el sector genera unos 2.000 puestos de trabajo directos a lo largo de la temporada y, por eso, cabe destacar la importancia de este deporte a nivel económico en el conjunto de la demarcación.
Por su parte, la vicepresidenta del Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida, Rosa Pujol, no escondió la preocupación que existe, a nivel global, por el encarecimiento de los productos y la crisis energética. Una situación que también afecte al turismo, al igual que otros sectores productivos. Sin embargo, destacó la apuesta de las estaciones de esquí, con una inversión de 24 millones de euros. De éstos, la mayor parte fueron invertidos por la estación aranesa y pallaresa de Baqueria Beret, 17,6 millones, que se destinaron al nuevo telesilla de Dossaus, en el área de Beret.
Las estaciones de esquí alpino y nórdico leridanas ofrecen un total de 505 kilómetros de pistas distribuidas en más de 4.500 hectáreas esquiables. Su conjunto de remontes puede llegar a transportar hasta 180.000 esquiadores en total, cada hora. Además, según Pujol, existe una oferta complementaria integrada por 137 empresas. Pujol ha destacado que desde Patronat se ha impulsado la campaña 'Lleida te espera de nuevo, ven y vívela' para contribuir a que la campaña alcance cifras récord como el año pasado y se llegue a los 1,5 millones de forfaits vendidos.
Las reservas están por encima de las del año pasado, según confirma Joaquim Alsina, presidente de la Asociación Catalana de Estaciones de Montaña
El presidente de la Asociación Catalana de Estaciones de Montaña, Joaquim Alsina, aseguró que, esta temporada, las reservas "están bastante por encima del año pasado" y recordó que en el Estado, el esquí es donde más ha subido de Europa después de la pandemia de la Covid.
Alsina cree que, pese a la subida de la inflación y el encarecimiento de forfaits, los amantes del esquí seguirán subiendo a las pistas porque se trata de un deporte "adictivo".
En relación a la sequía y la necesidad de producir nieve artificial, Alsina remarcó que todas las estaciones tienen su sistema de balsas de almacenamiento de agua para producir nieve y que, por tanto, no se consume de la red. Sin embargo, apuntó que dependen de las nevadas para poder abrir los complejos ya que no tienen capacidad para innivar a la totalidad de las pistas.
Mejoras en las pistas
Las pistas han invertido en mejoras para afrontar la temporada, desde las más pequeñas como Tavascan, en el Pallars Sobirà, que están ampliando los paravientos porque el cambio climático ha hecho aumentar el viento en la estación y deben procurar que la nieve no desaparezca, hasta las más grandes, como Baqueira, que además del nuevo telesilla también han mejorado servicios.
En la estación de Port del Comte, en el Solsonès, la principal inversión ha sido la renovación del hotel - cafetería de pie de pistas pero también el pintado y valisado de los aparcamientos de la estación, entre otros. En Port Ainé y Espot Esquí, donde prevén abrir el 2 de diciembre, se ha realizado el asfaltado del parking de la Rabasta para 290 vehículos en la primera, y mejoras en la cafetería de la cota 2.000 en la segunda además en más de una nueva pista de tubbing.
Boí Taüll, en la Alta Ribagorça, también ha invertido en los accesos y aparcamientos. Además, se han creado dos nuevas pistas, la Regalecia y la Carreretes así como también se han retirado instalaciones en desuso en pro de la sostenibilidad del entorno. Esta estación organizará en febrero y marzo los Campeonatos del Mundo de Esquí de Montaña.