La Federación de Organizaciones Empresarials de Girona (FOEG) ha cargado contra el Govern y ha exigido la interconexión para enlazar la red de abastecimiento del sistema Ter- Llobregat (ATL) con la del Consorci d’Aigües de Tarragona, que gestiona los caudales del Ebro. El empresariado gerundense ha asegurado que no busca "ningún enfrentamiento territorial", sino soluciones para una situación crítica que "puede tener efectos devastadores para la economía".
En concreto, la FOEG ha denunciado en un comunicado que no se está respetando el pacto del Ter alcanzado el verano de 2017. El documento consta de seis puntos que exponen los posicionamientos y las quejas de la patronal, partiendo de la premisa que la actual situación de emergencia se ha generado por decisiones que "sólo tienen sentido político". De hecho, la federación ha apuntado que el escenario actual es, en parte, de "sequía administrativa".
Una interconexión respaldada por los expertos
El empresariado ha señalado que la interconexión que piden "está avalada por cuatro colegios profesionales de Catalunya (Ingenieros de Caminos, Ingenieros Agrónomos, Ingenieros Industriales y Economistas) y que se recomendó desde la propia Agencia Catalana del agua (ACA)". También han argumentado que los expertos del ámbito del agua no han encontrado "ningún argumento técnico" para mantener la división del país en las cuencas internas (Ter-Llobregat) y Confederación Hidrográfica del Ebro. En este sentido, consideran que hay un contraste que perjudica el territorio, puesto que ahora mismo el embalse de Mequinensa están entrando 520 m3/s, hecho que provoca que se tenga que lanzar agua, a la vez que el Ebro se encuentra al límite de riadas. Esta circunstancia, han añadido, "obligará a la Confederación Hidrográfica del Ebro a regular el caudal, mientras se imponen restricciones en Girona y Barcelona".
Los expertos del ámbito del agua no han encontrado "ningún argumento técnico" para mantener la división del país en las cuencas internas
Además, la federación también ha reprochado a las administraciones que el minitrasvase del Ebro en Tarragona hasta la región de Barcelona tiene una concesión de agua otorgada por ley superior a la utilizada. Según datos del Idescat, se usan 2,4 m3 /s de los 4m3 /s que tiene la concesión: 76 hm3 de los 126 hm3 disponibles. La FOEG ha recordado que esta es una infraestructura por un uso "solo de emergencia y en ambas direcciones". Por lo tanto, "hay que continuar con todas las inversiones necesarias que eviten el uso recurrente de esta interconexión".
El escenario actual, culpa de todas las administraciones
Más allá de la situación climática, la patronal tiene muy claro que la situación se ha agravado debido a las decisiones que se han tomado desde el Gobierno. "No es admisible que la Generalitat, antes de utilizar todos los recursos disponibles, pretenda amortiguar los efectos de la sequía con la implantación de ERTE, hecho que demuestra la carencia de conocimiento y sensibilidad sobre la realidad del mundo empresarial", han criticado. La FOEG también ha lamentado que ninguno de los presidentes que ha habido durante los últimos años haya querido atender una circunstancia que ahora se ha convertido en una emergencia.