Los accionistas de Ferrovial han decidido por mayoría trasladar su sede social a los Países Bajos, pese a las advertencias del gobierno español. Así lo han decidido en la junta que se ha celebrado en Madrid en la que han votado a favor el 93,3% de los asistentes, y en la que ha participado una mayoría absoluta de los accionistas, un 77,6%. El sí a la fusión transfronteriza ha obtenido 524.626.719 votos favorables, en oposición clara a la presión que el gobierno español ha ejercido en los últimos días para evitar el traslado, y en contra de los 32.564.783 que ha recibido el no, el 5, 79%.
La abstención fue del 0,9% (5.087.843 votos) y hubo 23 boletos en blanco. Todo ello conforma un 77% del capital social de la entidad, dado que no se incluye la autocartera de Ferrovial, que computa como asistente pero no vota.
A partir de ahora, los accionistas contrarios a la medida tienen un mes para ejercer el derecho de oposición o separación, es decir, se pueden vender las acciones, que Ferrovial comprará a 26 euros el título. Se da el caso de que Ferrovial ha condicionado el traslado a que la compra de acciones no supere los 500 millones, por lo que el 5,79% de accionistas contrarios al traslado podría bloquearlo por esta vía.
En caso de que la compra de acciones no supere esta cifra, Ferrovial SA será absorbida por su filial holandesa, Ferrovial International SA (FISE), que adquirirá todos sus activos y pasivos. Ferrovial SA, pues, desaparecerá, ya sus accionistas se les cambiarán los títulos que tengan por acciones de la nueva compañía.
Una vez sea efectiva la fusión, FISE solicitará cotizar en la bolsa de Ámsterdam y en la española, y más adelante lo hará en la de Nueva York, motivo que la dirección de Ferrovial ha esgrimido para justificar el traslado de la sede.