PimeComerç ha pedido que las medidas de ahorro y eficiencia energética del Gobierno central sean temporales. La sectorial de la patronal catalana de la pequeña y empresa media alerta de las "disfunciones" que se podrían producir a varios negocios del país en caso de que las exigencias del ejecutivo central se alargaran en el tiempo.
Las medidas anunciadas al Boletín Oficial del Estado lo pasado martes pasan por la limitación a 27 grados del aire acondicionado de espacios comerciales, edificios públicos, infraestructuras de transportes, espacios comerciales y hoteles; así como el techo de 19 grados para los mismos establecimientos a la calefacción durante el invierno, entre otras medidas.
El presidente de la sectorial patronal, ÀlexGoñi, si bien acepta la necesidad del ahorro energético en un contexto de tensión internacional, considera que las medidas "se tendrían que haber tomado en consenso y diálogo con los diversos sectores afectados". El dirigente empresarial ha propuesto que las nuevas normas estén sujetas al escenario geopolítico y a los fluxes del mercado energético; así como de las necesidades de cada actividad y su situación.
Así, Goñi ha reclamado "ponderar la duración y el alcance de las medidas en funciones de cada sector y su coyuntura". Según el presidente de PimeComerç, especialmente de cara a actividades para el público cómo el retail o la hostelería, hay que "encontrar un equilibrio para dar pasas hacia el ahorro energético y mejorar los servicios a los clientes", reclamando una regulación que no cuestione el confort a los locales.