QEV Technologies, la firma de automóviles eléctricos que, recientemente, ha ganado el concurso para reindustrializar los terrenos de Nissan en la Zona Franca, ha formalizado el acuerdo de fusión con la holandesa Spear Investment. Uno de los objetivos de este movimiento es facilitar el aterrizaje en la bolsa Euronext de Ámsterdam. En las instalaciones catalanas, QEV quiere producir 16.000 vehículos eléctricos a partir del 2027.
"Es un punto de inflexión, en un momento donde el mercado de vehículos comerciales ligeros y autobuses eléctricos se está acelerando a un ritmo vertiginoso", apunta Joan Orus, consejero delegado en QEV. La operación con Spear le da un valor de 209 millones de euros al fabricante eléctrico. Los actuales inversores, Inveready y Gaea Inversión mantienen su participación al 100%. Nissan cerró las tres plantas que tenía en Catalunya a finales del 2021, dejando a unas 2.500 personas sin trabajo.
Actualmente, QEV también está concentrando sus esfuerzos por completar la tramitación necesaria para acceder a los fondos europeos y desplegar las inversiones previstas en la fábrica situada en el área metropolitana de Barcelona. El proceso de fusión con Spear queda supeditado a la validación de las autoridades supervisoras y, a su vez, el visto bueno de la junta de accionistas de la marca holandesa, prevista para el 27 de septiembre.