Väcka, o cómo consumir queso si eres vegano

Los frutos secos y las semillas de melón son la clave de sus productos, comprometidos con el medio ambiente

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El veganismo es un concepto que ha ganado presencia en los hogares y supermercados de todo el mundo, en un contexto donde la sostenibilidad ha pasado a un primer plano. Se trata de un estilo de vida que cada vez atrae a más personas y, según el estudio Las comunidades autónomas y ciudades más veganas de España (según Google) realizado por Vegans and Plants, Catalunya es, con diferencia, la región más vegana del país. Un dato que refleja el compromiso de la población catalana con el medio ambiente, pero también la necesidad de innovar y aportar nuevas soluciones al mercado.

En este contexto surgen iniciativas como Väcka, un proyecto que nació en 2015 con forma de restaurante y desde entonces ha evolucionado a un laboratorio y, finalmente, a una tienda en línea de quesos veganos. "Mi pareja y cofundador de Väcka, Maxime Boniface, y yo transicionamos a una dieta basada en plantas porque nos dimos cuenta del impacto que supone para la naturaleza, la salud y los animales", explica a VIA Empresa Luz Sanz, CEO y cofundadora de la iniciativa. Los dos, sin embargo, se encontraron ante un gran reto: dejar de consumir queso.

Catalunya es la región más vegana del país

El dolor de despedirse del queso

"Maxime es francés, y yo soy argentina y me encanta la pizza muy cargada de queso", explica Sanz quién añade que "es lo que más echábamos de menos". A raíz de la necesidad de encontrar una fórmula vegana que fuera compatible con el consumo del queso, Sanz y Boniface se trasladaron a Barcelona para abrir un restaurante 100% plant-based con la intención de usarlo como laboratorio y como punto de contacto con los consumidores que se encontraban en una situación similar a la suya.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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La semilla de melón: el gran descubrimiento

De entre los diversos experimentos, destacaron las recetas de queso basadas en frutos secos. En vista de su éxito, a inicios de 2021, Sanz decidió lanzar al mercado una nueva marca de queso con seis productos innovadores, dejando atrás el modelo de negocio del restaurante y centrándose en el desarrollo de nuevas fórmulas y recetas. De este modo, el equipo de 14 personas que conforma la iniciativa y que dispone del apoyo de Barcelona Activa, dio con la clave que hoy en día les diferencia del resto de sus competidores: las semillas de melón.

Sanz: "Las semillas de melón son muy saludables en el ámbito nutricional"

"Descubrimos que son muy saludables en el ámbito nutricional", explica Sanz, y, por este motivo, además de lanzar en abril una nueva línea de productos basada en este ingrediente, Väcka registró una patente para el uso de semillas de melón en los quesos. "Nuestro principal diferencial con otras marcas es la fermentación, puesto que logramos nuestros sabores a través de estos organismos, no trabajamos con aromas artificiales", añade la CEO.

En la actualidad, Väcka ofrece desde queso para pizzas hasta cremas de queso. Su producto más popular es el Mözza especial pizza, un queso de almendras fermentado ecológico "que se funde y gratina de verdad". Además de distribuir los productos a través de su tienda en línea, la firma dispone de más de una centena de puntos de venta en todo el país.

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El queso fundido, la apuesta de futuro

Väcka cerró el año pasado con una facturación de 285.000 euros, y para este prevé facturar 800.000. Supondría un salto exponencial que se explica con el siguiente paso que prevé dar el equipo liderado por Sanz: llegar al gran retail. "No queremos impactar únicamente a un nicho de mercado, que es el público vegano, queremos llegar más lejos", apunta la fundadora quien detalla que los productos que les permitirán lograr este objetivo son los quesos fundidos: "Son los que más posibilidades de crecimiento tienen".

Väcka cerró el año pasado con una facturación de 285.000 euros, y para este prevé facturar 800.000

Sanz quiere seguir un camino similar al de las leches vegetales. "Los consumidores no sienten que están resignando al sabor ni a la naturalidad al consumir leche vegetal, y creemos que podemos conseguir lo mismo con el queso, ofreciendo una buena calidad y haciendo crecer este sector desde Catalunya hasta otros países".

Para lograrlo, la cofundadora considera que es clave "estar alineado con una misión, sabiendo que es posible contribuir a un mundo mejor" así como "rodearse de un equipo de personas y un ecosistema que haga posible este proyecto, adoptando una perspectiva de generar ocupación y economía". Solo de este modo, Sanz considera que es posible hacer realidad el objetivo que se propuso hace más de 10 años al dejar de consumir alimentos de proteína animal: "cambiar la historia del queso vegetal".

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