
La salud ha sido tradicionalmente uno de los sectores más fuertes de la economía catalana y uno de los referentes del Principado a escala internacional, un liderazgo que continúa manteniendo en el ámbito de la inversión. En 2024, las startups catalanas especializadas en biotecnología lograron captar hasta 347 millones de euros, un 55% más que en 2023 (cuando se captaron 224 millones) y más del triple de los 112 millones atraídos en 2018, según recoge el Informe de la Bioregió 2024 elaborado por Biocat a principios de 2025.
Este incremento catalán se contextualiza en un contexto de relajación de la inversión a escala internacional. De acuerdo con los datos recogidos en el Estudio sobre la inversión en el sector salud en Catalunya en el año 2024, elaborado por Catalonia.health y EY y presentado este miércoles en la sede de EY de Barcelona, Estados Unidos y Europa captaron conjuntamente 72.466 millones de euros durante 2024 para empresas del sector de la biotecnología, una cifra que supone una caída del 10% respecto a 2023. Aún más destacado es el caso de las tecnologías médicas: de los 32.852 millones de dólares de 2023 a los 20.908 millones de 2024, un 36% menos.
Estas bajadas se definen como una “pequeña corrección de los niveles de inversión de 2023” por el socio responsable del sector Life Sciences en Business Consulting de EY, Hugo Dosil, que consolida el ecosistema “claramente por encima” de la época precovid. Las caídas se vinculan a los altos tipos de interés que aún perviven a principios de 2024, y también al contexto de incertidumbre global provocado por las guerras en Ucrania y Gaza y por las elecciones presidenciales en EEUU.
A pesar de la estabilización de la inversión, en los últimos años se ha experimentado un cambio importante en el acceso a financiación de las empresas del sector de la salud. Las salidas a bolsa han disminuido de forma destacada, hasta el punto de representar sólo un 6% del capital levantado durante 2024 por las empresas del subsector de la biotecnología, cuando en 2021 llegó a ser el 18%. Esto supone la necesidad de buscar nuevas vías de financiación, que son principalmente dos: el endeudamiento y el capital riesgo. Estos mecanismos dan más maniobrabilidad a las empresas, pero también les exige un grado de madurez mucho más elevado, sobre todo en el caso del capital riesgo, que también apuesta por entrar directamente en la dirección de las compañías.
La caída de salidas a bolsa por la incertidumbre global ha incrementado el endeudamiento y el capital riesgo como vías de financiación alternativas
Si se observa Europa de manera individual, el volumen de inversión en biotecnológicas ha crecido un tímido 5% respecto a 2023 y se consolida en los 12.175 millones de dólares. El continente encadena tres años seguidos de aumentos después de la corrección postpandémica, pero continúa por debajo de las cifras de 2019, cuando se captaron más de 16.000 millones. Además, hay que tener en cuenta que la inversión en Europa es cinco veces inferior a la de Estados Unidos. Dosil interpreta las cifras como un “mensaje de que aún se espera la recuperación de los tipos, más solidez de los proyectos y la llegada de una regulación que ayude a la inversión”. En el caso de las tecnologías médicas, la inversión también cae en Europa, pero sólo un 0,4%, y en este subsector las diferencias no son tan grandes respecto a Estados Unidos, que "sólo" multiplica por 1,4 el volumen de inversión europeo.
Una inversión concentrada por el capital riesgo
¿Y cómo afecta todo esto a Catalunya? Según Dosil, tanto España como el Principat se enmarcan dentro de las tendencias europeas, pero con un cierto decalaje, por lo que se espera una réplica de los movimientos del continente durante el año actual. Con todo, el estudio de Catalonia.health y EY sí que identifica algunas particularidades específicas del ecosistema catalán, entre las que destaca la fuerte dependencia de los fondos de capital riesgo, que representan hasta el 80% del total de inversión. Este hecho contrasta con la baja presencia de fondos de inversión nacionales, los cuales sólo representan el 25% del capital riesgo agrupado por las compañías catalanas en 2024.
De hecho, cuando se analizan únicamente los fondos de inversiones con sede en el Principat, éstos invirtieron 157,8 millones de euros en el sector de la salud durante 2024, cifras inferiores a los 177,3 millones de 2023, pero que confirman el boom respecto a años anteriores: en 2022 sólo se invirtieron 64,1 millones en estas industrias. Sin embargo, de los 157,8 millones de 2024, sólo un 19% se han destinado específicamente a proyectos catalanes, mientras que el 81% restante se ha invertido internacionalmente. La principal razón que dan el 32% de los fondos de inversión locales consultados por el estudio es que las compañías extranjeras tienen mejores propuestas en ciencia y tecnología que las catalanas, mientras que un 26% justifica que las empresas de aquí presentan carencias en los equipos profesionales y la experiencia acumulada.
Los fondos de inversión catalanes justifican las inversiones en el extranjero porque encuentran mejor ciencia y tecnología y equipos mejor preparados y experimentados
El informe también hace hincapié en las compañías catalanas a partir de una encuesta a los más de 240 socios de Catalonia.health, de la cual se extrae que los tres subsectores principales del ecosistema de salud (biotecnología, tecnologías médicas y farmacéuticas) destinan al menos la mitad de sus presupuestos de I+D a propuestas catalanas. “Ha crecido, pero en 2017 el porcentaje era del 73%, lo cual quiere decir que cada vez se dedica más presupuesto a escala internacional, donde hay más incentivos e infraestructuras”, ha alertado la presidenta de Catalonia.health, Mariona Serra. El porcentaje es del 51% en el caso de las biotecnológicas, del 65% en las tecnológicas médicas y del 55% en las farmacéuticas.
De las diferentes áreas clínicas existentes, la oncología se consolida en primera posición con un 24,4% de las inversiones, una plaza ocupada desde la primera edición del informe, de 2017. En segunda posición se sitúan las enfermedades infecciosas con un 14,6%, impulsadas por las políticas públicas que han intentado promover las inversiones en investigación dentro de este ámbito después de la covid. En tercera posición se encuentran las plataformas no asociadas a ningún área terapéutica con un 12,2%, y a continuación empatan con un 9,8% los proyectos especializados en el sistema cardiovascular, en el sistema hepático y digestivo y en endocrinología y nefrología.
Cuando son cuestionadas sobre los principales retos que afronta el sector, la normativa reguladora es la problemática más mencionada por las empresas de todas las especialidades, pero sobre todo en el caso de las compañías de tecnología médica. En segundo término destaca la competencia de mercado, ya que según Serra, muchas multinacionales han entrado en la industria en los últimos años a raíz del auge de la inteligencia artificial, hecho que afecta especialmente a las empresas farmacéuticas. Finalmente, la tercera razón de peso señalada por las compañías es la falta de salud, una problemática que, en este caso, afecta con notoriedad a las biotecnológicas.
Convertir Catalunya en un 'sandbox' europeo
El estudio de Catalonia.health y EY destacan la buena situación de Catalunya como territorio de referencia en el ámbito de la salud, de la cual Dosil ha destacado que “tiene un ecosistema maravilloso, con hospitales punteros y multinacionales con sede aquí”. Sin embargo, el Principat también presenta obstáculos que hay que mejorar, muchos de ellos compartidos con el continente europeo, como conseguir reforzar el liderazgo y la madurez de las startups locales -por ejemplo, a través de acompañamientos iniciales y de compartición de experiencias y mentorías- y conseguir “desbloquear el sistema sanitario” para que sea más permeable a adoptar innovaciones desarrolladas localmente.
De entre las diferentes oportunidades que los fondos de inversión consultados en el informe señalan como potenciales para explotar, destacan principalmente dos. Por un lado, la posibilidad de convertir Catalunya en un “sandbox europeo” del sector de salud, es decir, en el territorio de referencia para llevar a cabo ensayos clínicos. “Estamos dentro del top 5 de regiones en ensayos clínicos en Europa, y si pudiéramos aplicar entornos legales regulados más flexibles, esto permitiría crear entornos para probar nuevas tecnologías que sirvan para atraer más inversores y conseguir que las empresas de aquí puedan escalar más rápidamente”, ha comentado Serra. La otra oportunidad es más específica aún, y hace referencia al potencial de liderazgo de Catalunya en el sector de las terapias avanzadas. “Tenemos conocimiento en Catalunya, tanto en instituciones como en empresas. Tenemos que estructurar la logística, la regulación y la producción para poder liderar esta tecnología”, ha reclamado la presidenta de Catalonia.health.