La Oficina Catalana del Canvi Climàtic estima que las emisiones de gases de efecto invernadero cayeron un 5,5% interanual en 2023, el último ejercicio con datos disponibles, y por debajo del nivel de emisiones de 1990 por primera vez en los últimos 30 años. En total, Catalunya fue responsable de la emisión de 38,37 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente, según ha informado el Govern de la Generalitat este miércoles en un comunicado.
De acuerdo con la consellera de Territori, Habitatge i Transició Ecològica, Sílvia Paneque, las políticas públicas, cambios tecnológicos y compromiso social están produciendo ya efectos reales, aunque también ha puntualizado que "aún se debe acelerar el ritmo de reducción para alcanzar los objetivos internacionales y europeos".
Esta caída está relacionada principalmente por la reducción de las emisiones industriales, que anotan un descenso de más de un millón de toneladas, tanto por una menor actividad de algunos de los sectores más intensivo en uso de energía como por la mejora en la eficiencia de los procesos productivos, destaca el comunicado.
El transporte concentra un 34% de las emisiones totales en Catalunya, seguido de la industria, con un 26% del total, el sector de la producción y transformación de energía, con otro 13%, y la agricultura y ganadería, con un 12% del total, mientras que el sector servicios y los residuos acumulan un 5% cada uno.