La movilidad sostenible de Cooltra llega hasta la capital de Francia. La empresa catalana ha adquirido Cityscoot, hasta ahora el principal operador de alquiler de motos eléctricas de París. La compañía francesa había declarado la suspensión de pagos el pasado noviembre y buscaba un relevo del servicio.
El Tribunal de Comercio de París se ha decantado por la oferta de unos 400.000 euros de Cooltra al considerarla "la más solvente por su solidez económica" y por conservar "la mayor parte posible de la plantilla". El precio de adquisición parece irrisorio en comparación a los 40 millones de euros que recibió Cityscoot el 2018 o los 23 millones que recaudó dos años después, antes del estallido de la pandemia.
Cityscoot se encontraba en una situación económica muy grave desde hace cuatro años. Sus accionistas históricos, la Caisse des Dépôts y la RATP, dejaron de rescatar la empresa después del coronavirus, con la excusa que la compañía nunca había generado beneficios desde su constitución en 1994.
La oferta de Cooltra, la mejor solución
A pesar de tener la opción de liquidar la sociedad francesa, finalmente el juez del Tribunal de Comercio ha optado para aceptar la oferta de Cooltra. Con esta compra, la empresa catalana se ha comprometido a mantener una treintena de los 157 empleados.
La compañía de Timo Buetefisch ya estaba presente en el sector del alquiler de motocicletas eléctricas parisinas desde el pasado verano, pero ahora será más relevante que nunca. Con la adquisición, pasará a tener una cuota de mercado del 60% y se convertirá en el principal operador de motos de alquiler de París, con más de 500.000 usuarios. Todos ellos tendrán a disposición las más de 1.500 motos eléctricas que ofrece Cooltra en la capital de Francia. El traspaso se hará definitivo a partir del 23 de febrero, con el nuevo nombre de Cityscoot by Cooltra.